“Un gobierno, dos coaliciones” y un espacio de influencia: la fórmula del Socialismo Democrático para enfrentar negociación con Boric

Una fórmula para enfrentar su relación con el gobierno han abordado en los últimos días algunos de los presidentes de partido del denominado bloque del Socialismo Democrático (PS, PPD, PR, PL y Nuevo Trato).

Ante la invitación formal que el mandatario electo les hizo a los socialistas para integrarse a su futura administración y la duda de si se incluirá o no a las otras fuerzas del bloque, los timoneles Álvaro Elizalde (PS), Natalia Piergentili (PPD), Alberto Robles (PR) y Patricio Morales (PL) han abordado distintas estrategias para enfrentar la negociación con el futuro gobierno.

Una de ellas, cuya premisa contempla, en la práctica, “un gobierno y dos coaliciones”, es decir, que la base de sustento político de la nueva administración sea, por un lado, Apruebo Dignidad y, por otro, la del bloque que represan ellos.

Según fuentes del sector, esa fórmula apunta a que más allá de los cargos que les puedan ofrecer en el próximo gabinete -donde el PS tendría una posición más privilegiada que sus socios-, lo relevante para el sector es incidir estratégica y políticamente en las prioridades y contenidos de la gestión del nuevo mandatario.

“No nos interesan sus cargos, nos interesa construir un espacio de influencia permanente en el rumbo de las reformas y contenidos estratégicos para asegurar las mayorías en el Congreso”, sostiene una fuente del sector.

En el pacto señalan que el esquema podría expresarse tanto en que los timoneles de esos partidos participen del comité político del gobierno o de algún tipo de comité estratégico en el que puedan plantear sus énfasis.

La fórmula, dice un representante de esas fuerzas políticas, despejaría -en parte- la incomodidad que se ha instalado ante la idea de que habría partidos de primera y segunda categoría para el futuro jefe de Estado, la que se hizo extensiva luego de que trascendiera que el diseño de su gabinete se iba a configurar sobre la base de “anillos de poder” en el que algunas fuerzas quedarían relegadas.

El diseño, de hecho, según quienes conocieron del intercambio, fue parte de la conversación que sostuvieron la mañana de este martes Boric y Piergentili.

A la salida, la dirigenta aseguró que el mandatario electo le transmitió que sigue “analizando” las fuerzas que incorporará en su administración, incluyendo al PPD.

Las mismas fuentes señalan que en la cita, Boric clarificó a la líder del PPD que no existen partidos de primera y segunda línea para él y que está consciente de que requiere trascender las fuerzas de Apruebo Dignidad para generar mayorías.

“El presidente tiene claro cuáles son los temas más sentidos respecto de cómo queremos generar gobernabilidad, cómo esa gobernabilidad tiene que tener una expresión en el Parlamento para generar las reformas, que somos espacios políticos distintos Apruebo Dignidad y el Nuevo Pacto Social, pero que somos tremendamente complementarios”, sostuvo a la salida.

Y agregó: “El presidente entiende perfectamente que requiere a todas las fuerzas políticas (…). Lo importante es cómo se construye gobernabilidad con dos coaliciones”.

La idea, pese a que no es un acuerdo de todo el bloque, también fue abordada en la cita que sostuvo la directiva del Partido Liberal con el mandatario electo pasadas las 16 horas.

En ese encuentro los dirigentes reiteraron que su bloque no tenía la intención de sumarse a Apruebo Dignidad y que sus esfuerzos debían enfocarse en encontrar una alternativa que garantice un “pacto de gobernabilidad”.

“En caso de ser imposible una gran coalición, nosotros desde el Partido Liberal proponemos un gobierno y dos coaliciones, donde una sensibilidad de izquierda y otra de centroizquierda cohabiten y colaboren. Quizás las cosas demuestren que la idea de una gran coalición se construye a fuego lento”, aseguró Morales a La Tercera.

Con esa fórmula, sostienen en el bloque, podría asegurarse una construcción de mayorías más sostenible en el tiempo y que le permita al nuevo Ejecutivo avanzar en sus principales reformas. Sobre todo, considerando que la nueva administración es minoría en la Cámara Baja y que el socialismo democrático cuenta con 28 diputados y 13 senadores.

El planteamiento se da luego de que Boric hiciera un ofrecimiento formal al Partido Socialista para integrar su gabinete. En esa colectividad, sin embargo, están a la espera de que el mandatario clarifique su diseño y señalan que esperan un “trato digno” para ellos y sus aliados.

Con todo, tanto el PPD como el PL aseguraron ayer que Boric no los convocó formalmente a su gobierno y que no abordaron la integración en cargos de gobierno.