Vallejo evita referirse a investigación de Fiscalía por posibles vínculos de Hizbulá con empresas en Zona Franca de Iquique

En el marco de una actividad de alfabetización digital en Pudahuel, la ministra de la Secretaría General de Gobierno (Segegob), Camila Vallejo, fue inquirida por una investigación del Ministerio Público por posibles vínculos del grupo chiita libanés Hizbulá con empresas en la Zona Franca de Iquique.

De acuerdo a fuentes de La Moneda, se trata de una investigación por lavado de activos que surge a raíz de una denuncia ingresada hace un tiempo por la Unidad de Análisis Financiero (UAF). Indagatoria que podría tener vínculo con grupos de las características de Hizbulá.

Por tratarse de una investigación por lavado de activos tiene carácter reservado, la que está radicada en la Fiscalía Regional de Tarapacá.

Ante la pregunta del trabajo que está desarrollando el Ministerio Público en esta materia, Vallejo respondió: “Sobre relaciones o negocios (de Hizbulá) es algo que efectivamente tendrán que pronunciarse y responder las autoridades correspondientes”.

Los detalles sobre estos supuestos vínculos del grupo libanés en Chile serían parte del informe reservado que la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, entregó el pasado 25 de abril a la ministra del Interior, Carolina Tohá, en su visita al país en el marco del Encuentro Nacional de la Empresa (Enade) 2024.

Las informaciones presentadas por Bullrich -según publicó en su momento El Clarín- dan cuenta de la presencia del clan Barakat en la región que, según se indica, uno de ellos, Hatem Ahmad Barakat fue designado por Estados Unidos, presunto financista de Hizbulá, vinculado con el atentado terrorista a la AMIA de 1994.

El documento -de acuerdo al citado medio- señala que Barakat “viajó a Chile para recolectar fondos destinados a Hizbulá, y a principios de 2003, se informó que era un accionista importante en al menos dos negocios en Iquique, Chile”. Y que su hijo, Ali Hatem Barakat residiría legalmente en territorio nacional.

Respecto a esto, la portavoz dijo en esta jornada: “Nosotros no entendemos por qué llegó a filtrarse un informe reservado y tampoco nos podríamos pronunciar sobre un informe reservado. Lo que podemos decir es que lo que se entregó no son nuevos antecedentes, son cosas que ya conocíamos y son bastante generales”.

Y luego agregó: “De la información de Estados Unidos tendrá que hacerse cargo Estados Unidos y sus propias autoridades”.