Empresario Jonás Gómez presenta querella contra árbitro Herman Chadwick y lo acusa de prevaricación

Empresario Jonás Gómez presenta querella contra árbitro Herman Chadwick y lo acusa de prevaricación
Empresario Jonás Gómez presenta querella contra árbitro Herman Chadwick y lo acusa de prevaricación

En la acción penal, acogida a tramitación por el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago, Gómez denunció que el juez árbitro Herman Chadwick Piñera actuó fuera de sus competencias y que estaría efectuando cobros que estaban fuera del acuerdo. Chadwick se defiende: “todas las resoluciones que he dictado en el proceso del juicio y que las partes han recurrido a los tribunales superiores de justicia, como la Corte de Apelaciones y la Corte Suprema, han sido confirmadas”.


El empresario Jonás Gómez Pacheco presentó una querella en contra del árbitro Herman Chadwick Piñera por los presuntos delitos de prevaricación y exacciones ilegales en el marco de la disputa que mantiene con sus hermanos por la herencia de su padre, el ex diputado y senador del Partido Radical Jonás Gómez Gallo, quien falleció el 24 de junio de 2019. El ex parlamentario era nieto del político Pedro León Gallo Goyenechea, quien hiciera su fortuna con la explotación de plata en Chañarcillo.

En la acción penal, interpuesta el 4 de enero y acogida a tramitación por el Cuarto Juzgado de Garantía, Jonás Gómez Pacheco acusó que “un otrora juez árbitro -cuya jurisdicción se encuentra vencida hace más de 1.000 días-, determinó que, para él, las normas legales no tienen ninguna importancia. Ni siquiera aquellas consagradas en el Código Penal”.

Según el querellante, el árbitro “decidió por sí y ante sí que tiene potestad de imperio, que la Constitución y la ley reservan a los tribunales ordinarios; tanto así que puede enajenar inmuebles en representación de personas que se han manifestado expresamente en contra de ello, aun cuando fue advertido de la ilegalidad profunda que esto importaba”.

“A pesar de haber cobrado más de US$1.200.000 por su cometido y haber manifestado por escrito hace 3 años que nada se le adeudaba, ahora -con el plazo del arbitraje vencido-, pretende cobrar más de $120 millones adicionales. Como si fuera poco, más de la mitad de esos dineros que pretende obtener fueron justificados como trabajo de una abogada que pertenece a su despacho cuando, en realidad, fueron realizados en todo o parte por un abogado con poder en la causa y que representa a la contraparte”, acotó la acción legal patrocinada por el abogado Álvaro Jofré.

Jonás Gómez Pacheco, querellante en esta causa, mantiene un patrimonio en común con sus cuatro hermanos Magdalena, Teresa y Segundo Gómez Pacheco. Los hermanos tienen a su vez descendencia y vienen desde hace ya varios años intentando dividir los activos que mantienen en propiedad común, a través de sociedades familiares de distintas nacionalidades, naturalezas, tipos, etc., en las que todos o algunos son socios y/o administradores.

El patrimonio que se pretende dividir incluye los derechos y acciones de dos compañías mineras, cuyo valor excede los US$1.000 millones; centenares de bienes inmuebles en Chile y el extranjero; bienes muebles, valores y efectos de comercio, etc, dice la acción legal. Pero sin duda lo más significativo en cuanto a su valor económico son las sociedades mineras y los inmuebles que la familia Gómez Pacheco mantiene en común, a través de las denominadas “sociedades inmobiliarias”

Las dos principales sociedades inmobiliarias –Comercial e Inmobiliaria Nacional Limitada (INASA) e Inmobiliaria Conosur Limitada (Conosur)- se encuentran hoy disueltas y en razón de ello sus bienes son, al día de hoy, propiedad de comunidades formadas por la disolución e integradas por todos sus socios. Según la acción penal, la única manera de enajenar esos activos es actuando de común acuerdo todos los comuneros, o bien, previa partición voluntaria o arbitral.

“Uno de los ilícitos que se denuncian en esta querella consiste precisamente en que un árbitro -designado como árbitro y no como partidor de dichas comunidades-, pretende enajenar los bienes de las comunidades, contra la voluntad expresa de varios de los comuneros”, dice la acción.

Para dividir los bienes de la familia Gómez Pacheco surgieron dos grupos: un grupo compuesto por Segundo, Teresa y Magdalena Gómez Pacheco, con sus respectivos hijos, por un lado (Grupo STMGP) y el grupo compuesto por Jonás Gómez Pacheco y sus hijos (Grupo JGP), por el otro.

Los hermanos Gómez Pacheco iniciaron sus intentos por dividir el patrimonio en 2016, teniendo como una suerte de mediador al abogado y ex ministro de Justicia Felipe Bulnes, pero no hubo consenso. Fue precisamente con Felipe Bulnes que Jonás Gómez Pacheco tuvo un altercado a principios de 2023 que derivó en una querella del segundo y en la formalización del abogado, que ocurrió en noviembre.

Contactado por Pulso, el árbitro Herman Chadwick señaló: “todas las resoluciones que he dictado en el proceso del juicio y que las partes han recurrido a los tribunales superiores de justicia, como la Corte de Apelaciones y la Corte Suprema, han sido confirmadas”. También destacó que ejerció su labor con “absoluta y plena certeza de la ley”.

Origen

La querella es la segunda acción penal que interpone Jonás Gómez en contra de un árbitro en medio del proceso para dividir el patrimonio familiar. Anteriormente, también hizo lo mismo en contra de Jaime Ríos, quien según el querellante “ejecutó una serie de ilícitos que derivaron en un quiebre definitivo de relaciones entre los hermanos”.

Como parte de las diferencias surgidas en 2018, Segundo Gómez Pacheco interpuso una acción criminal en contra su hermano Jonás por supuestos actos en perjuicio de las sociedades familiares; acción que, al igual que aquella en contra de Jaime Ríos, concluyó mediante un acuerdo celebrado en 2019. Es en este proceso en que las partes decidieron nombrar a Herman Chadwick Piñera como nuevo árbitro.

“Las partes ordenaron determinar la manera en que el árbitro debía asignar los bienes, pero no le confirieron un mandato o poder de representación para que él, en cuanto árbitro y actuando por sí y ante sí, ejecutara materialmente las operaciones necesarias para concretar la distribución de activos”, añadió la querella presentada en enero pasado.

Otro de los ilícitos que justifican esta querella viene dado porque, según Jonás Gómez, a Chadwick, como árbitro, se le confirieron 150 días totales de plazo para dictar sentencia y a la presente fecha ya han transcurrido más de 1.600 días desde el inicio del arbitraje. En términos concretos, este plazo de 150 días otorgado al árbitro para concluir el proceso arbitral expiraba el día 10 de junio del año 2020 (como resultado de suspensiones relacionadas con etapas de conciliación), fecha que fue ratificada incluso por el propio árbitro a través de un correo electrónico el 15 de enero de 2020.

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