Los desafíos del CEO de Gildemeister: rentabilidad, menos gastos y nuevas oportunidades
El 6 de septiembre, el ex Finning, Marcello Marchese, asumió como gerente general de la automotora. Si bien la firma reordenó sus finanzas, sigue en rojo. "Para este 2021 se proyectan nuevamente resultados negativos”, reconoció la compañía en un proceso judicial. ¿La misión de Marchese?: mejorar ese panorama.
La estructura ya está prácticamente completa. Tienen desde hace meses un nuevo directorio, en agosto nombraron a Cristóbal Lessmann a cargo de Hyundai en Chile, y ahora ya está quién asumirá el desafío de liderar la nueva etapa de Automotores Gildemeister, tras el chapter 11.
A casi cuatro meses de que contrataran a Spencer Stuart para rastrear al sucesor de Ricardo Lessman -ahora presidente del grupo- en el cargo, finalmente anunciaron a la persona. Se trata del ingeniero de la Universidad Técnica Federico Santa María y MBA de la Universidad Adolfo Ibáñez, Marcello Marchese, quien debutó en la compañía el 6 de septiembre.
En su linkedin se describe así: “Ejecutivo experimentado con una importante trayectoria profesional en diferentes Empresas Nacionales y Multinacionales entre las que se encuentran Lan Chile Airlines, Finning Chile, Finning International y Finning Sud America”. “A través de los diferentes puestos en los que ha estado involucrado ha podido desarrollar sus habilidades técnicas y de gestión. Esto se ha traducido en altas habilidades de Planificación Estratégica, Comercial y de Gestión”, se lee en la plataforma.
Desarrolló una trayectoria de casi 20 años en la compañía de maquinaria Finning. El también director de la Fundación Carlos Vial Espantoso, ingresó en 2002 a esa firma como business development Manager & Blue Line Director, y ascendió hasta llegar a ser Presidente ejecutivo de Finning Sud America. En enero de 2020, asumió como presidente del Consejo Asesor de Finning Sudamérica, entidad integrada por varios ejecutivos senior de la región, cuya función es proporcionar información y asesorar sobre estrategias, conocimientos del mercado y problemas geopolíticos para apoyar a los principales ejecutivos y a la junta directiva de la matriz. Tras este cargo, saltó a Gildemeister.
“Estoy orgulloso y entusiasmado de asumir este nuevo desafío. Trabajaremos para capitalizar la fuerte y creciente demanda en los mercados en los que estamos presentes, mientras continuamos enfocándonos en entregar un servicio excepcional a todos nuestros clientes y socios. Espero trabajar junto a todo el equipo de Automotores Gildemeister y con ellos avanzar hacia la siguiente etapa del crecimiento de la empresa“, sostuvo Marchese a través de un comunicado. “Estamos contentos de que Marcello lidere la empresa hacia el futuro, ya que cuenta con las habilidades, visión y experiencia de gestión para hacer crecer con éxito la compañía”, puntualizó Ricardo Lessmann.
Sus desafíos
“Bajo su liderazgo, buscaremos nuevas oportunidades para el crecimiento de nuestra participación de mercado y así consolidar la sólida posición de la empresa en los países que estamos presentes”, subrayó el director de la compañía, José Valls, luego del anuncio.
Gildemeister representa a la marca coreana Hyundai desde 1986 en Chile y desde 2002 en Perú y tiene una red de 228 sucursales de venta, 70 propias y 158 franquiciadas. Además, el holding tiene operaciones en Costa Rica, Uruguay y Shanghai.
A agosto, su participación de mercado en Chile llegaba al 12% en vehículos de pasajeros; ocupaba el segundo lugar tras Chevrolet. En el segmento comercial ostentaba el liderazgo, con el 12,3% de la industria.
En los primeros ocho meses del año, había comercializado 17.606 unidades entre livianos y medianos, un 95% más que las 9.028 que hace un año atrás. Su modelo Verna estaba entre los diez más vendidos en Chile.
Marcelo Marchese llega a liderar una compañía en pleno ajuste; una firma que aún está en rojo. La misma empresa ha señalado en procesos judiciales recientes que si bien el mercado automotriz se ha recuperado, “estas mejoras no son suficientes para revertir la situación de la empresa, ya que la ganancia bruta durante el 2021 continúa siendo inferior a los gastos”. Subraya: “Para este 2021 se proyectan nuevamente resultados negativos”.
Tal es así, que si bien lograron reordenar sus finanzas tras su paso por la Ley de Quiebras de Estados Unidos, han debido continuar con una profunda reorganización interna que partió en 2013 y seguirá a lo menos todo este año. Si hace ocho ejercicios tenían 1.836 empleados, en 2021 llegaron a 682. Sólo entre octubre de 2019 y marzo de 2020, sacaron a 120 personas; y desde el comienzo de la pandemia del Covid-19 a la fecha, han recortado a 185 trabajadores más.
“Esta difícil situación del mercado automotriz ha obligado a Automotores Gildemeister a reorganizar y ajustar los elementos productivos, para hacer más eficiente a la empresa en miras a los nuevos desafíos que impone el mercado automotriz”, ha dicho la empresa en procesos laborales de agosto. “Lo anteriormente expuesto nos obliga a seguir adecuando nuestra estructura organizacional”.
Todo, en medio de una exigencia de ventas para hacerle frente a los compromisos adquiridos con acreedores.
Marchese tendrá que ajustar el engranaje, mientras -como han dicho gremios automotrices como Cavem- el mundo continúa ajustando las producciones tras el Covid-19.
Comenta
Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.