Servicio y comercio tiran el carro de la actividad en el primer trimestre y mercado ve que desaceleración se acentuará desde julio

Alta inflación y exigente base de comparación llevan a las ventas presenciales del comercio a anotar su peor caída en 2 años y se anticipan mayores retrocesos

Los economistas afirman que el rango de crecimiento del PIB 2022 que fijó el BC en el IPoM de marzo, de entre 1% y 2%, se mantiene plenamente vigente, aunque algunos aseguran que puede estar más cerca de la cota superior el resultado final. No obstante, mantienen la cautela, puesto que en el segundo semestre la velocidad de la desaceleración es incierta.


El crecimiento de la economía sorprendió en marzo. El registro de 7,2% estuvo por sobre el promedio de las expectativas del mercado, que esperaba un 6,2%, y con ello el primer trimestre cerró en un mejor pie de lo previsto, con un alza de 7,9%, versus un 7,5% que era el promedio de lo esperado. De todas maneras, se trata de la expansión trimestral más baja desde el primer cuarto de 2021, cuando la variación fue nula.

De acuerdo al Banco Central, la serie desestacionalizada aumentó 1,6% respecto del mes precedente y 8,5% en doce meses. El mes registró la misma cantidad de días hábiles que marzo de 2021.

Asimismo, se mencionó que el resultado del Imacec fue explicado principalmente por el aumento de las actividades de servicios. En tanto, la producción de bienes cayó, incidida principalmente por la minería y el resto de bienes. Por su parte, el crecimiento del Imacec desestacionalizado fue explicado por todos sus componentes, destacando el dinamismo de la minería.

De acuerdo al análisis que hacen los economistas, servicios y comercio se mantienen con un buen dinamismo y fueron los que tiraron el carro en este primer trimestre de 2022. “Ambos sectores han presentado una recuperación constante desde que se han ido relajando las medidas sanitarias en país y en línea, además, con la mayor liquidez en la economía luego de los diversos apoyos hacia las familias en el transcurso de la crisis sanitaria”, sostiene la economista de Euroamerica, Martina Ogaz. Por su parte, minería e industria, si bien se han desacelerado con mayor nitidez, aún aportan al crecimiento.

Francisca Pérez, economista principal de Bci, añade que “el mayor crecimiento y lo que nos sorprendió, fue servicios, el cual tuvo un mejor desempeño. También influyó minería, el cual venía disminuyendo los últimos meses y mostró una mejora importante en el crecimiento mensual, sin embargo, no creemos que sea sostenible”.

Tomás Flores, economista de Libertad y Desarrollo, acota que “en el sector servicios se observó un dinamismo superior al exhibido en los meses previos, en donde los servicios personales tuvieron un rol significativo. Uno de ellos, probablemente, es la vuelta clase presencial en todo el sector educacional”.

Esa visión la refuerza Pavel Castillo, gerente comercial de Corpa, quien sostiene que “el crecimiento de la economía en marzo se explica principalmente por el área de servicios, y nos muestra que afortunadamente la desaceleración está teniendo un proceso más paulatino, lo que es bueno para la economía”.

Desde el gobierno, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, analizó el escenario actual: “Cuando uno toma esas cifras trimestrales desestacionalizadas y compara con el trimestre anterior, tiene un cambio muy cercano a cero, y levemente negativo para el producto trimestral y levemente positivo para el no minero. Es decir, luego que la economía creciera algo más del 4% en el tercer trimestre, 1,8% en el cuarto trimestre, ahora está prácticamente en cero. Eso ya indica desaceleración, hay una desaceleración bastante clara”.

Actividad económica confirma señales de desaceleración: Imacec creció 6,4% en mayo

¿Cambia visión para el año?

No tanto, dicen los economistas: el rango que fijó el instituto emisor para el crecimiento del PIB 2022 en el Informe de Política Monetaria (IPoM) de marzo, de entre 1% y 2%, se mantiene plenamente vigente, aunque algunos aseguran que puede estar más cerca de la cota superior el resultado final, aunque siguen con cautela, puesto que afirman que en el segundo semestre la velocidad de la desaceleración es incierta.

“Es necesario considerar la volatilidad de estas cifras frente al proceso de normalización de la actividad económica en el mundo, por lo que, si bien este dato es positivo, difícilmente cambia la tendencia de enfriamiento de la economía que hemos visto en los últimos meses”, comenta José Manuel Peña, Senior Portfolio Manager en Fintual.

Alejandro Fernández, economista de Gemines, dice que antes de esta cifra “tenía una proyección de 1,5%, y ahora podría ser de 1,7%, pero el segundo semestre se ve muy incierto por factores internos y externos”.

Josefina Henríquez, investigadora de Clapes-UC, indica que “este nuevo escenario modifica al alza nuestras estimaciones para abril y mayo, ubicándose en 7,3% y 4,6% respectivamente”. Antes preveían un 3,6% y 0,7%, respectivamente. Con ello, su previsión para el año se sitúa entre 1,5% y 2%, con una probabilidad de que esté más cerca de 2%.

Ogaz, por su parte, asevera que “por el momento mantenemos nuestro rango de crecimiento PIB de 1,5%-2,5%, rango que le agregamos un sesgo al alza dada la sorpresa positiva del Imacec de marzo”; mientras que Pérez, agrega que “no ha cambiado para nada nuestra proyección de crecimiento para este año, que se encuentra en 1,8% desde hace varios meses”.

Desde Tanner indicaron que “creemos que estas cifras no significan un cambio de tendencia, ya que en los próximos meses tendremos condiciones más restrictivas tanto a nivel internacional (China está siendo un factor relevante) y nacional. Con todo, mantenemos nuestra proyección de crecimiento para el 2022 en el rango de 0,75% - 1,75%”.

Carlos García, académico de la Universidad Alberto Hurtado, añade que “la serie realmente importante es la serie desestacionalizada, que aumentó solo 1,6% respecto del mes precedente y que sin duda está mostrando una desaceleración de la economía que se irá pronunciando en la medida que avance el año por el peor escenario internacional”.

Ricardo Consiglio, Economista jefe de Zurich AGF, apunta que “a pesar de la positiva cifra de crecimiento para el mes de marzo, estimamos que gran parte de los factores que impulsaron el fuerte crecimiento son transitorios, lo que, junto con política fiscal y monetaria contractivas, el deterioro de las condiciones financieras que está impactando el crédito, siguen apuntando a una pérdida de dinamismo por parte de la economía y a una desaceleración importante para los próximos meses”.

En ese sentido, menciona que “por ahora mantenemos nuestras expectativas que la economía crecería un 2% este año. No obstante, el escenario económico tiene un nivel de incertidumbre más alto que el habitual y los riesgos están sesgados a la baja ante el desafiante escenario externo que enfrenta la economía”.

Cuándo se intensificará el menor dinamismo

Los economistas consultados coinciden en que el menor crecimiento se comenzará a notar con mayor fuerza desde el tercer trimestre y luego acentuándose hacia la última parte del año. “Nosotros esperamos resultados negativos en el crecimiento desde julio-agosto, como datos mensuales, y el tercer trimestre de 2022 será negativo en variación anual”, subraya Pérez. Ogaz puntualiza que para el tercer trimestre “tenemos preliminarmente una estimación de -0,5%, comenzando a notarse la desaceleración”. Y Fernández menciona que se verán cifras negativas en doce meses desde julio o agosto, aunque en la medición mensual será “más claramente desde mayo”.

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