Hertz Global Holdings Inc. obtuvo la aprobación de la corte para su plan de recaudar efectivo mediante la venta de nuevas acciones. Esto, a pesar de que la empresa, que se declaró en quiebra, admitiera que dichos papeles podrían no tener valor.

En una audiencia en la corte de bancarrota, la jueza Mary Walrath dictaminó que Hertz podrá seguir adelante con la oferta, que según la compañía podría recaudar hasta US$ 1 mil millones.

Hertz basó su solicitud a la corte en el aumento de casi diez veces que registraron sus acciones, al pasar de 56 centavos el 26 de mayo a US$ 5.53 el lunes. Las acciones se han deslizado desde entonces, cayendo a US$ 2.64 en las últimas operaciones de Nueva York después del fallo.

El abogado de Hertz, Tom Lauria, dijo que la compañía buscará comenzar la venta lo antes posible antes de que se escape la oportunidad. “Estamos tratando de movernos muy rápidamente”, dijo.

Los expertos en quiebras han dicho que el plan de Hertz es inusual y sin precedentes, pues es probable que no exista valor para los accionistas que participen, considerando que los acreedores deben ser reembolsados en su totalidad.

La compañía le dijo al tribunal de Wilmington, Delaware, que advertiría a los compradores que “las acciones comunes podrían no tener valor”. Nadie sabe aún si eso se hará realidad, dijo Walrath durante una audiencia de Zoom observada por más de 200 personas.

“No está claro dónde está la seguridad y el valor empresarial” de Hertz, dijo Walrath.

Un comité de acreedores no garantizados respalda la venta de acciones porque aún podría generar alrededor de $ 500 millones, sin tener que pagar las altas tasas de interés y las tarifas asociadas con los préstamos tradicionales de bancarrota, explicó el abogado acreedor Thomas Moers Mayer.

Hertz tiene una deuda de aproximadamente US$19.000 millones, compuesta por US$4,300 millones en bonos y préstamos corporativos y US$14,400 millones de deuda respaldada por vehículos mantenida en subsidiarias de financiación especiales.

En abril, la empresa no logró saldar un pago de arrendamiento y convenció a los acreedores de esperar hasta este viernes antes de declarar el incumplimiento. Hertz intentó extender el plazo, pero los acreedores se negaron a otorgar la extensión.