Carlos Melo: "Los contratos que vamos a licitar suman más de US$730 millones al año"

El encargado de definir cómo será el nuevo proceso de licitación, Carlos Melo, espera que el nuevo sistema resulte atractivo para la llegada de nuevos inversionistas y a al mismo tiempo aumente la calidad del servicio.

“El gran objetivo es estructurar un sistema que dé un salto en la calidad del servicio importante, pero que al mismo tiempo sea atractivo como negocio para que nuevos operadores vengan y participen en el sistema. Es una combinación que estamos tratando de lograr porque estamos convencidos que con más operadores y mayor competencia en la licitación se va a traducir en una mejor calidad del servicio para el usuario”, comentó.

¿Cuáles el monto de la inversión que se va a licitar?

Los contratos que nosotros vamos licitar en esta iteración, es un negocio de más o menos US$730 millones al año, donde US$600 millones al año tienen relación con la operación de los buses, y US$120 millones al año, más o menos, son los que tienen relación con todos los sistemas tecnológicos de apoyo al sistema. Es un negocio de un volumen importante en cuanto a los recursos involucrados y que nosotros creemos que es atractivo para cualquier operador en el mundo.

¿Es una cifra que está dentro de estándares internacionales?

Para los estándares latinoamericanos, sí. Estamos convencidos de que con esa cantidad de recursos se puede prestar un servicio de buena calidad.

¿Cuál es el tiempo de duración de los contratos que considera más prudente?

Uno de los análisis que estamos haciendo son opciones para reducir la duración de los contratos actuales. Si uno hace un benchmark en el mundo, en sistemas del tipo Transantiago, los contratos no son tan largos, son de 6 o 7 años. A veces son de 7 años con opciones de extensión. Y eso es una figura que nos parece bastante atractiva, el definir una duración más corta que la actual, pero con la posibilidad de que esos contratos se extiendan en base a algunos indicadores que sean bien objetivos, eso también es fundamental. Creemos que es una opción que es bien atractiva para mantener al operador siempre que (esté) involucrado en prestar una buena calidad de servicio. La posibilidad de extensión es una herramienta que puede ayudar a mantener esa tensión de decir “si hago un buen trabajo, voy a aspirar a que mi contrato sea más largo”.

¿Deben ser similares entre las operadoras de buses y las de servicios complementarios?

No necesariamente. Sí es importante diseñar bien las transiciones, porque cuando un contrato de buses termina, y si el contrato de los complementarios es más largo, tienes que mover esa tecnología y ponerla en una nueva flota de buses. Por un lado, la tecnología a veces avanza mucho más rápido que cuánto se va desgastando la flota. Pero no necesariamente tiene que ir alienados.

¿Quieren aumentar el número de operadores del sistema?

Sí, estamos convencidos de que tenemos que tener más actores en el sistema. Nos interesa aumentar, ese es un hecho, porque nos interesa reducir el tamaño de las empresas. A qué número lleguemos, va a ser resultado de los estudios que estamos desarrollando. Si eso puede implicar duplicar o ir más allá en el número de operadores actuales, es una posibilidad.