El desafío de sumarse a la economía digital

Hoy en día el data análisis, el internet de las cosas o la inteligencia artificial están cada vez más presentes en los procesos cotidianos. El control de la ventilación en la oficina, la verificación de identidad al ingreso de los edificios y el registro de datos a través de la nube son sólo algunos ejemplos de cómo día a día nuestras tareas están envueltas en lo que se ha denominado la economía digital.

Para Jean-Pascal Tricoire, presidente y CEO de Schneider Electric -una de las empresas pioneras en impulsar este concepto-, "el mundo está cambiando a un ritmo sin precedentes impulsado por una economía digital en auge. Tecnologías como Internet de las cosas (IoT), inteligencia artificial y análisis de big data están haciendo que las empresas sean más eficientes e innovador, impulsando su ventaja competitiva".

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Y tal como menciona el CEO de la compañía, el auge de estas tecnologías no solo permite aumentar la automatización de los procesos de cualquier industria, sino que también permite usar de manera eficiente recursos tan importantes como la energía.

A modo de ejemplo, durante el Innovation Summit Paris 2018, desarrollado a comienzo de mes, la empresa presentó al mercado el EcoStruxure Building, un sistema de administración de los servicios que mejora el valor de la construcción ofreciendo hasta un 15% más de rentabilidad en los edificios que lo implementen, con la posibilidad de elevar un 6% el valor del arriendo.

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Pero ¿qué tan importante es sumar estos sistemas inteligentes en nuestros edificios? En el caso del EcoStruxure, el software de supervisión y control de potencia administra la energía de los espacios entregando hasta un 10% de aumento en el ahorro de energía. Otro dato interesante es que a través del control de los recursos básicos en un lugar de trabajo como es el caso de la ventilación, se pueden disminuir en 35% las enfermedades de los trabajadores por problemas con la regulación de la temperatura y zonas no ventiladas, mejorando la calidad de vida y la productividad al mismo tiempo.

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Ahora, la automatización no solo beneficia a la industria inmobiliaria, ya que en el caso de Chile puede favorecer en sectores productivos tan importantes como la minería. De acuerdo a CFO de Schneider, Emmanuel Babeau, "la industria minera tiene un potencial de ser un gran socio, porque podemos obtener una gran eficacia en un contexto donde las empresas quieren aumentar su eficiencia, en vista de mejores precios de las materias primas". Aquí de acuerdo al ejecutivo, sería esencial apuntar al mejoramiento de lo que se denomina el "energy managment" -administración de la energía de forma eficiente- y la digitalización de este recurso.

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