Las acciones de la aerolínea brasileña Azul suben ante la posibilidad de que la firma compre las operaciones de Latam en Brasil. Tanto es así que la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados del Congreso brasileño discutió los efectos que tendría esta eventual adquisición.

Con este telón de fondo, los papeles de la aerolínea brasileña suben un 2,77% en el día, y acumulan un alza de 9,24% en cuatro sesiones consecutivas. En agosto, eso sí, acumulan un retroceso de 4,55% y de 5,52% en lo que va del año.

Según una publicación de Wall Street Journal, una fuente cercana al proceso aseguró que Azul estaría en conversaciones con los acreedores de Latam Airlines para que venda sus operaciones en Brasil. La empresa brasileña estaría abierta a comprar toda la compañía y luego desprenderse de las operaciones en otros países. También estaría dispuesta a un joint venture para completar su actual negocio en Brasil.

Ambas compañías mantuvieron conversaciones de un posible acuerdo al inicio del proceso de quiebra, pero Latam interrumpió las negociaciones, ya que los propietarios no querían ceder el control del grupo, según consignó la fuente al WSJ. Dijo, además, que Brasil tiene sus propias ventajas y oportunidades y Azul está enfocada en ellas.

La aerolínea de capitales chilenos, por su parte, sostuvo que no tiene intención de vender su operación brasileña y que espera salir de la reorganización judicial durante este año.

El tema de la posible compra llegó hasta el Congreso de Brasil. La semana pasada, la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados discutió los efectos en el mercado aéreo local y en los consumidores en caso de concretarse esta operación.

La solicitud para realizar esta sesión, fue realizada por el diputado Eduardo Bismarck, quien teme sobre el posible impacto de esta adquisición en el bolsillo de los consumidores.

“Es probable que los precios suban debido a la falta de competidores. Cabe recordar que hoy los precios están por debajo de los de los últimos años, sobre todo por la crisis del sector“, sostuvo el legislador el viernes pasado.

El director de la Secretaría Nacional de Aviación Civil de Brasil, Ronei Glanzmann, dijo, por su parte, que “no tenemos miedo de un eventual proceso de fusión y adquisición en este mercado. Por supuesto, esto va en contra de nuestra agenda de promover una mayor competencia, pero entendemos que esta es una solución que tiene que dar el mercado... Seguimos este proceso, pero es inminentemente privado y el gobierno no puede interferir en el respeto de los principios constitucionales de libertad económica”.