Hong Kong complica futuro de pacto comercial entre China y EEUU

Donald Trump respaldó la ley que formaliza el apoyo de EEUU a las protestas en Hong Kong, justo cuando se afinan un acuerdo de fase uno con China, el cual -como demuestra la experiencia- es frágil hasta que se logre firmar.

"Se están promulgando con la esperanza de que los líderes y representantes de China y Hong Kong puedan resolver sus diferencias de manera amistosa, lo que conducirá a la paz y la prosperidad a largo plazo para todos", indicó Trump en un comunicado que no dejó indiferente a Beijing.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de China dijo hoy que se opone firmemente a la firma del proyecto de ley en cuestión y enfatizó que Hong Kong es parte de China a través de la política de "un país, dos sistemas", y que los asuntos de la región de administración especial son asuntos internos".

A la luz de estas declaraciones, Holger Schmieding, economista jefe de Berenberg, sostuvo que "en este momento Hong Kong es el mayor riesgo geopolítico para los mercados".

Consultado por CNBC, indicó que si la situación de la península "empeorara gravemente, si recibiéramos una intervención militar china de mano dura, sería casi imposible para los Estados Unidos concluir un acuerdo comercial con China, incluso un acuerdo de primera etapa, sería casi imposible para que la UE haga eso, para prolongar la recesión industrial global causada por las tensiones comerciales".

Sin embargo, hay quienes ponen paños fríos al asunto. De acuerdo a Lu Xiang, investigador de la Academia de Ciencias Sociales de China, "el acto es una carta, pero Estados Unidos solo puede jugarlo una vez", mientras que subraya que "las relaciones bilaterales son extremadamente complicadas. Es un compuesto químico, no una relación mecánica como en la guerra fría".

Dicho esto, Lu advirtió en SCMP que si bien "China quiere cooperar con los EEUU, también estamos preparados para que los lazos se desmoronen".