Por incumplimientos, Codelco corta contrato con contratista en Chuqui

La paciencia de la estatal Codelco con SNC Lavalin -firma a cargo de la construcción de las plantas de ácido de la Fundición Chuquicamata, son claves para cumplir con la norma de emisiones- terminó.

Esto, luego que ayer la cuprera informara la decisión de terminar anticipadamente el contrato con la firma canadiense, por "incumplimiento grave en los hitos contractuales" relacionados con las obras encargadas.

Entre estas demoras que acusa Codelco, se cuenta "el retraso en los pagos a sus subcontratistas, demoras en la ejecución del proyecto y problemas en la calidad de las obras".

Junto a lo anterior, fuentes comentaron que la compañía ejecutó una segunda boleta de garantía por US$40 millones, que se suma a una de igual monto cobrada a fines de enero. Situación que además abrió una confrontación en el Centro de Arbitraje y Mediación de la Cámara de Comercio de Santiago que comenzó a inicios de año y de la cual no se tenía registro.

Cabe recordar, que la estatal adjudicó en noviembre de 2016 a SNC Lavalin las obras relacionadas con las plantas de ácido, a través de un contrato de US$260 millones.

Según Codelco, en abril y con una diferencia estimada de 15 a 20 días, se normalizará la operación con la entrada en funcionamiento de la segunda planta de ácido sulfúrico. Sin embargo fuentes cercanas al proceso, señalaron que la reanudación de la fundición podría generarse en mayo.

La semana pasada, el ministro de Minería, Baldo Prokurica, dio cuenta de las dudas que existen a nivel de gobierno respecto del tema, asegurando que que "existe preocupación del Presidente Piñera por este tema".

Dos de las fundiciones de Codelco, la propia Chuquicamata y Salvador, no están operando justamente por estos retrasos.