Joaquín Pérez Rey, subsecretario del Trabajo de España: “Ahora mismo tenemos la mejor situación de empleo desde hace 17 años”

Joaquin Perez Rey
Joaquín Pérez Rey, secretario de Estado de Trabajo del ministerio de Empleo y Economía Social de España. Foto: Juan Farias / La Tercera.

“El ejemplo español demuestra de manera clarividente que no hay una relación inversamente proporcional entre la conquista de derechos y el progreso económico, sino que van de la mano”, afirma el personero español.


En líneas generales, el gobierno español ha impulsado una agenda laboral similar a la del Presidente Gabriel Boric. En cuatro años la administración que preside Pedro Sánchez ha aumentado el salario mínimo en un 54%, han reforzado la negociación colectiva sectorial que ya imperaba en el país, y ahora están negociando para reducir la jornada laboral desde 40 a 37,5 horas semanales a 2025. Todo eso lo han impulsado de la mano de diálogos sociales entre organizaciones sindicales, empresariales, y el gobierno.

La semana pasada visitó el país el secretario de Estado de Trabajo del Ministerio de Empleo y Economía Social de España, Joaquín Pérez Rey. Entre otras cosas, se reunió con la ministra del Trabajo, Jeanette Jara; y con su homólogo, el subsecretario de Trabajo, Giorgio Boccardo.

Pérez Rey forma parte de Sumar, coalición de partidos que gobierna junto al PSOE en España, fundada por la actual vicepresidenta segunda del gobierno de España, Yolanda Díaz, quien también es ministra de Trabajo y Economía Social.

“La última vez que vine a Chile tuve la oportunidad de asistir a la toma de posesión del Presidente Boric, junto con la vicepresidenta segunda Yolanda Díaz. Chile es un país hermano, es un gobierno amigo, y (esta) ha sido una visita absolutamente fructífera”, comenta.

Las carteras de Trabajo de España y Chile han impulsado las mismas políticas. ¿Ha sido casualidad?

-Esas son las políticas que desde una óptica progresista hemos venido defendiendo durante mucho tiempo, que son políticas exitosas. Por lo tanto, no hay mucha extrañeza en que entre la ministra Jara y la ministra Díaz haya esta confluencia de medidas, porque son medidas que llevamos hipotetizando mucho tiempo como medidas que podrían resolver algunos de los males del trabajo en el mundo, pero es cierto que desde la toma de posesión del Presidente Boric ha habido una relación fluida con el Ministerio del Trabajo chileno, porque efectivamente tienen una línea política y de intervención en el trabajo bastante paralela.

¿Con qué imagen se va de Chile?

-Me voy con un Chile que está avanzando decisivamente en ir más allá del plan laboral. Por tanto, volver a ver el trabajo y sus derechos desde otra óptica, desde una perspectiva no vinculada al neoliberalismo, protector de las mayorías sociales, y con avances significativos en materia de jornada, en salario mínimo interprofesional, dos debates que también son cruciales en España, y con apasionantes reformas por delante, tanto la reforma previsional como lo que tiene que ver con la negociación colectiva ramal.

¿El incremento del salario mínimo en España no ha desincentivado la contratación?

-En España ahora mismo tenemos la mejor situación de empleo desde hace 17 años, con un récord de afiliación. Nunca han trabajado tantas personas en España, y nunca han trabajado tantas mujeres en España. Es decir, que esas medidas de garantía de los derechos laborales, de garantía de los derechos salariales, de mejora de las condiciones sociales en general, lejos de haber provocado un efecto negativo en el mercado de trabajo, han conseguido lo contrario, estimular un mercado de trabajo mucho más resiliente.

¿Qué tasa de desempleo tienen actualmente?

-Actualmente estamos en el 11,27% según la última EPA (Encuesta de Población Activa). Es la menor tasa de desempleo de los últimos 18 años.

¿A qué lo atribuye? Considerando que están impulsando medidas que se podría pensar que tienden a desincentivar la contratación.

-Es que, fíjese, yo creo que esa correlación entre mejoras sociales y destrucción de empleo no es cierta. Es una construcción que no tiene un fundamento sólido. Es justo al contrario. Cuando la gente tiene más derechos, está mejor en las empresas, está más animada, tiene una perspectiva más ambiciosa, un futuro más prometedor, se implica más en el trabajo, es más productivo, tiene mayor bienestar y esto estimula al sistema económico. No hay una ecuación negativa entre los derechos sociales y el crecimiento económico, creo que es al revés: el crecimiento económico se produce de la mano del progreso social.

En el caso de Chile, se redujo la jornada laboral, se aumentó el salario mínimo a $500 mil, se discute un alza de la cotización de pensiones del 10% al 16%, y el gobierno busca implementar la negociación ramal. Todo eso mientras el mercado laboral está debilitado. ¿Son iniciativas que van a ayudar, o hay que mirarlas con más gradualidad?

-Mire, como no soy un observador experto en la realidad chilena, voy a hacer una comparación con la realidad española. En España hay negociación colectiva ramal, siempre la ha habido, es lo que nosotros llamamos sectorial. Se ha subido un 54% el salario mínimo interprofesional, alcanzando a 1.134 euros, cuando estaba en 735 euros. Hemos llevado a cabo políticas de reducción de jornada, y ya la jornada efectiva de trabajo se sitúa muy por debajo de las 40 horas, se sitúa en 38,2 horas ahora mismo, en estos momentos. Y hemos llevado a cabo todo un proceso de reformas que ha llevado a garantizar la estabilidad en el empleo, ha mejorado los instrumentos de negociación colectiva ramal, y ha generado mecanismos distintos al despido como fórmula de gestión de las empresas. El resultado económico es incontestable. Nunca hemos tenido tantos trabajadores, nunca hemos tenido tantas trabajadoras, y nunca hemos tenido tanto trabajo estable. Y nunca, y esto es lo más importante, hemos tenido una dinámica de nuestro trabajo que fuera tan resistente a la incertidumbre económica.

Igualmente, con una base comparable que no es buena, digamos, ¿o considera que el 11% de tasa de desempleo que tienen es bueno?

No, efectivamente, es decir, en España hay un problema de desempleo más alto de lo habitual en comparación con otros países de la Unión Europea, pero insisto, estamos en la mejor situación de empleo desde aproximadamente 2007-2008, por lo tanto, desde hace 17 o 18 años; ese desempleo antes se producía en un entorno de enorme inestabilidad laboral, con fluctuaciones de trabajadores y con poca protección social. Ahora, ese desempleo en España, que estamos intentando reducir, de hecho junto con las reformas laborales, o las reformas vinculadas al teletrabajo, o a los riders, hemos hecho una enorme reforma de nuestras políticas activas para garantizar al conjunto de los desempleados españoles derechos subjetivos a que los servicios públicos de empleo les acompañen a través de itinerarios individualizados, un derecho a la formación, un derecho a tener claro un expediente laboral único, y por tanto, tener oportunidades de empleo y que tengan una tasa de retorno rápido al mercado del trabajo.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.