Manfred Paulmann regresa a Cencosud tras 10 años alejado

Manfred Paulmann Koepfer, el primogénito de Horst Paulmann Kemna (86 años), volvió ayer de dos maneras al grupo que dejó hace una década.

Primero, pasado el mediodía, Cencosud Shopping, el brazo de centros comerciales del grupo Cencosud, informó su designación como director y su nombramiento como presidente de la compañía, en reemplazo de su hermano Peter Paulmann. Poco más tarde fue su estreno en terreno. Un asalto frustrado en el Alto Las Condes, centro comercial que controla la empresa que desde ayer preside, lo hizo acudir al establecimiento acompañado de Sebastián Ñúñez, ejecutivo del grupo.

Los dos hitos escenifican otro símbolo: el regreso del mayor de los cuatro hijos de Horst Paulmann a la cúpula del grupo. Su nominación se suma a otros cambios: su padre Horst Paulmann dejó en febrero la presidencia de Cencosud S.A. de manera momentánea por razones de salud -estuvo internado en la Clínica Las Condes-, y su hermana Heike Paulmann lo reemplazó en forma interina en el holding.

En el directorio de Cencosud S.A. hoy están Horst, Heike y Peter, más otros seis integrantes: el exministro de Hacienda Felipe Larraín, el exgerente general de Arauco, Alejandro Pérez, el exgerente general de Enersis, Mario Valcerce, el exgerente de Jumbo, Stefan Krause, el expresidente de Masisa, Julio Moura y el abogado Jorge Pérez. Una de las opciones futuras es también el retorno de Manfred Paulmann a la matriz, lugar donde ya estuvo mucho antes.

Mientras ello no ocurra, en Cencosud Shopping estará junto a su hermano Peter, Stefan Krause, ex ejecutivo de Jumbo, Matías Videla, gerente general de Cencosud, José Fernández, Victoria Vásquez y Rafael Fernández.

Dados los cambios en esa firma, el directorio deberá ser renovado en la junta ordinaria anual de accionistas, programada para el 23 de abril. Sin embargo, se espera que la designación de Manfred Paulmann se ratifique y se mantenga en ese directorio.

Los tres hermanos Paulmann Koepfer son ingenieros comerciales. Manfred y Heike egresaron de la Universidad de Chile, mientras Peter lo hizo de la Universidad Católica. A ellos se suma Hans Dieter, de dos años, el hijo menor de Horst Paulmann con Katherine Bischop. Los tres hermanos mayores participan en la propiedad de Inversiones Quinchamalí, la controladora de Cencosud, y desde febrero comparten el poder de administración que hasta ahora solo tenía su padre.

El mayor de los hermanos decidió hace una década emprender un camino en solitario, lejos del holding de su padre, consolidando sus negocios en Alpa, grupo que tiene los quioscos MaxiK, la cadena de restaurantes Caprioli, Inmobiliaria Suecia y Neuralis, una firma que brinda servicios para eventos de otras compañías y emprendedores, y cuyo crecimiento los llevó a considerar la idea de levantar el hotel Nodo, en Providencia, inaugurado en 2019.

Manfred fue director de Cencosud y en 2008, tras la salida del gerente general, Laurence Golborne, asumió la vicepresidencia ejecutiva, un cargo creado para él. Sin embargo, diferencias con su padre -quien según exdirectores no le cedió suficiente autonomía- lo llevaron a renunciar al grupo en 2010 para no volver. Hasta ahora.

Junto con convocar a la próxima junta de accionistas para el 23 de abril -para la cual propuso un reparto de dividendo de $28 por acción-, el directorio informó de Cencosud convocó a una junta extraordinaria para la misma fecha para, entre otras cosas, acordar un programa de adquisición de acciones de su propia emisión con el objetivo de realizar inversiones en la compra de estos instrumentos, “pudiendo obtenerse eventuales beneficios para la sociedad producto de la variación de su precio”, detalló la firma en un hecho esencial.

La junta deberá decidir la cantidad de acciones propias a emitir y la duración del programa y se delegará en el directorio la fijación del precio a pagar por las mismas. Por ley, el monto a adquirir no puede ser superior a las utilidades retenidas ni mantenerse en propiedad acciones representativas de un monto superior al 5% de sus acciones suscritas y pagadas.

Esto implica que el máximo a mantener en cartera equivale a unos US$ 300 millones. La operación se financiaría en un 100% con flujos de la operación de la firma.