Minera El Abra busca aumentar la información geológica de las más de 74 mil hectáreas de concesiones mineras que explota en el yacimiento a rajo abierto, ubicado en la comuna de Calama, región de Antofagasta. La firma, controlada en un 51% por la estadounidense Freeport McMoRan, y donde Codelco posee el 49% de la propiedad, ingresó este jueves una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) asociada al proyecto “Ampliación Campaña de Sondajes de Exploración, El Abra”, cuya inversión declarada alcanzaría los US$3,5 millones.

Según detalla la firma en los documentos oficiales enviados al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), la iniciativa busca perforar 73 pozos de sondajes durante la vida útil del proyecto, que alcanza los 3 años. Ello se suma a una primera campaña de exploración, realizada entre 2020 y 2012, que estuvo compuesta por 27 sondajes, pero que no pasó por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental por no constituir un proyecto de los listados en el artículo 3 del DS N°40.

En concreto, la nueva campaña de sondajes abarca una superficie de intervención aproximada de 37,21 hectáreas, y no se considera la habilitación de instalaciones de apoyo, ya que se utilizarán las instalaciones existentes.

“El Abra posee concesiones mineras de exploración y explotación en las cercanías del rajo y de la planta y se requiere de este tipo de labores, para verificar la existencia de recursos minerales”, indicaron desde la empresa, al ser consultada por el proyecto, junto con descartar “por ahora” el desarrollo de una tercera campaña, la que “tendrá que evaluarse una vez que contemos con los resultados de la segunda campaña”, dijeron.

El área definida para el proyecto se basa en el potencial de mineralización de la zona, de acuerdo a los resultados de la primera campaña. A partir de esos datos “se hace necesario complementar los estudios y profundizar el conocimiento geológico”, agregan los documentos oficiales.

“El objetivo del proyecto es complementar la información extraída en una primera campaña a través de una segunda campaña mediante la ejecución de 73 pozos de sondajes mineros de reconocimiento que permitan reducir la incertidumbre geológica del cuerpo mineralizado y evaluar el potencial geológico asociado al área de estudio”, señaló sobre el objetivo del proyecto.

La fase de construcción del proyecto involucra sólo dos trabajadores y considera obras de acondicionamiento del terreno, necesarias tanto para la habilitación de caminos como plataformas. En su operación, diez trabajadores se desempeñarán en la ejecución de sondajes, manejo y transporte de muestras de testigos de roca, trabajos que se realizarán durante las 24 horas al día.

La segunda campaña de exploración de El Abra avanza en paralelo a los planes de expansión por US$7.500 millones que la compañía anunció en julio de 2024, y cuyo Estudio de Impacto Ambiental (EIA) continúa en desarrollo.

La expansión de El Abra apunta alcanzar una producción de 750 millones de libras de cobre anuales, cifra que equivale a poco más de 340 mil toneladas, lo que significa más que triplicar las 98 mil toneladas logradas en 2023.

Con todo, desde la firma detallaron que la nueva campaña de exploración “no tiene una interacción directa con el proyecto de expansión, sino más bien busca mejorar el nivel de información para entender de mejor forma el potencial del recurso minero fuera del área donde se encuentran las reservas consideradas para nuestro proyecto de expansión”.

Hace algunas semanas, la compañía presentó una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto “Modificación Pila de Lixiviación Sulfolix” para mantener y optimizar la producción actual, y continúa trabajando en el desarrollo de un proyecto de expansión para seguir operando más allá de 2029.

Se espera que el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de este proyecto sea presentado a evaluación a fines de 2025. En la calendarización de Freeport-McMoRan, a lo anterior se suman otros tres años para tramitar los permisos, y cuatro más para completar el proceso de construcción, con lo cual espera que el proyecto de expansión comience a operar en 2033.

Los largos tiempos que toma la tramitación de permisos en Chile es algo que en la compañía tienen muy claro. La CEO de Freeport-McMoRan, Kathleen Quirk, aseguró en su última conferencia con analistas, desarrollada en octubre de 2024, que desarrollar proyectos como la expansión de El Abra en Chile “lleva mucho tiempo debido a los requisitos de autorización”.