Organizaciones de la sociedad civil en Chile están en punto crítico de financiamiento por impacto de crisis por el Covid-19

Las organizaciones de la sociedad civil, dedicadas a proteger a los más necesitados y vulnerables, están en punto crítico de financiamiento y serán las primeras en resentir la crisis por el impacto del Covid-19 si el Estado, las empresas y las personas naturales en Chile recortan gastos a través del congelamiento de donaciones o el desvío irrestricto de recursos para mitigar la coyuntura, advierte Vicente Gerlach, director ejecutivo de Fundación Trascender y miembro de directorio de la Red de Voluntarios de Chile.

El sector de las fundaciones y similares aporta con 310 mil empleos en jornadas completas equivalentes, es decir remunerado y voluntariado, lo que en términos de gastos representan 2,1% del PIB y su fuerza laboral equivale a 3,7% del país, según cifras de Sociedad en Acción. Se trata de cerca de alrededor de 15 mil fundaciones y corporaciones sin fines de lucro.

“En estado de normalidad, el promedio de las fundaciones en el país se maneja con una caja que les da liquidez de 2 a 3 meses, de independencia económica. Para muchas organizaciones de la sociedad civil, marzo es el mes en que consiguen financiamiento para el primer semestre o para todo el año. Esto, debido a la lógica anual de la gran mayoría de los fondos de financiamiento y de los convenios con empresas privadas”, dice Gerlach.

“Hoy en día, son muchas las organizaciones que no lograron cerrar proyectos de financiamiento durante marzo, sumado a que venimos saliendo del período de verano en que la mayoría de las organizaciones y programas se detienen y hay pocas alternativas de nuevo financiamiento. Esto quiere decir que dichas organizaciones ya están en un punto crítico de financiamiento. Dado el nuevo contexto, abril es el mes ‘clave’ en que la sociedad civil necesita recibir un respiro o muchas fundaciones tendrán que cerrar”, agrega.

De acuerdo con Gerlach, la atención a adultos mayores, infancia, personas con discapacidad, personas en situación de calle, entre muchas otras, se verán truncadas justo en el momento en que más se necesitan. El director de Fundación Trascender señala que las fundaciones, corporaciones sin fines de lucro, ONGs y organizaciones territoriales requieren flexibilidad en las rendiciones de fondos, en los plazos de postulación y en la entrega de garantías para fondos concursables, además de rescate.

“La gran mayoría de los fondos provenientes del Estado se administran bajo una lógica de financiamiento de la operación de los programas de intervención, dejando de lado la administración misma de las organizaciones. Esto genera precariedad en la administración de recursos humanos y bajísimo potencial de ahorro en una ONG”, indica el director ejecutivo de Fundación Trascender.