Presidente de Aguas Andinas: "Es poco probable que en esta crisis solo haya un responsable"

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Cladio Muñoz ve una oportunidad para renovar la forma en que el país se desarrolla.


Entre personeros de gobierno, científicos, ambientalistas y ONG que se ven durante todo el día en la COP25 en Madrid, destaca la presencia de ejecutivos de, quizá, la única empresa de capitales chilenos presente en la cumbre de cambio climático: Aguas Andinas. Incluso su presidente, Claudio Muñoz ha participado de varias charlas y foros. Es que, entre otras cosas, la Biofactoría de La Farfana (Maipú) ganó un premio mundial en la COP24 el año pasado. De hecho, fue el mismo Muñoz que ayer anunció que a pesar del estallido social en Chile, los megaestanques de Pirque -que permiten autonomía de agua potable para Santiago por 34 horas- comenzarán a operar este mes. "Es más, nos gustaría llegar a una autonomía de 44 horas", dice.

¿Y cuál es la fecha o inversión que se requiere para eso?

-Todos nuestros planes de inversión los entregamos al regulador. Ya hemos planteado el proyecto y esperamos presentarlo a la brevedad posible.

La baja en las cuentas de agua, ¿corresponde a un esfuerzo de la compañía o es solo el resultado de los cálculos tarifarios?

-Ambos. Nosotros tenemos procesos de fijación tarifaria y,además, a partir de un modelo que se proyecta, se determina la tarifa. En nuestro caso, se determinó un 3% de reducción, que claramente, es un desafío y vamos a tener que enfrentarlo.

¿Cree que las empresas de servicios tienen una responsabilidad en el estallido social?

-Todos tenemos responsabilidad. Tomando en cuenta como se ha manifestado la sociedad, es poco probable que haya solo un actor responsable. Una es la expresión social legítima, que tiene que ver con equidad y desarrollo de cada persona. Pero lamentablemente se nos ha mezclado con algo muy preocupante: la violencia, la destrucción y la delincuencia.

¿Hay planes de elevar salarios o sumar a planta a trabajadores subcontratados?

-Sí. Compañías como la nuestras tienen conversaciones constantes con sus colaboradores y organizaciones sindicales y todo lo que podamos avanzar a para ser compatible; nuestro desafío de transformación con las personas es clave, y yo, como presidente, me sumaré a eso. Creo que quienes estamos como presidentes de directorios también podemos aportar en ese aspecto: poner a las personas en el centro de la estrategia.

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