Sonda ve mejora en entorno empresarial de Brasil y destaca reactivación de nuevos contratos

Puede que la economía de Brasil esté saliendo de la recesión con demasiada lentitud, pero la compañía de tecnología de la información Sonda ya está cosechando los beneficios, según el gerente de finanzas de la compañía, Rafael Osorio.

La empresa, que ofrece servicios en la nube, seguridad informática y otros servicios en 10 países latinoamericanos, superó las estimaciones de analistas en sus resultados del segundo trimestre gracias a un salto de 85% del Ebitda (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) en Brasil.

La cifra obedece a reducciones de costos que realizó la compañía en medio de una economía en contracción y un mayor optimismo empresarial este año, señaló Osorio.

En 2017, Sonda comenzó a fusionar unidades y cambiar su estrategia comercial en Brasil, donde la economía se contrajo hasta un 3,5% en 2015. Esto condujo a mejores resultados a partir de principios de 2018 y permitió a la empresa obtener contratos de servicios a mayor plazo y con márgenes más elevados, explicó Osorio en una entrevista en el programa de radio Pauta Bloomberg.

"Sin duda el entorno empresarial (de Brasil) ha mejorado desde la segunda mitad del año pasado" tras la elección del presidente Jair Bolsonaro, señaló Osorio. "Muchos clientes nuestros había postergado firmar nuevos contratos con nosotros y ahora están sucediendo", añadió.

Entre los ejemplos figuran un contrato de outsourcing a cinco años por US$70 millones con un grupo de bancos y un acuerdo de US$55 millones con una organización fabril local no identificada, detalló el gerente. La compañía también firmó en julio otros US$100 millones en nuevos contratos que aparecerán en los resultados del tercer trimestre. "Estos son contratos a largo plazo, que nos permiten decir que la tendencia de aumentar los ingresos debería continuar en los próximos años", dijo Osorio.

Es un cambio drástico para las operaciones en Brasil. Luego de sumar el 44% de los ingresos en 2014, Brasil representó solo el 28% el año pasado. Asimismo, Sonda reportó pérdidas operacionales de US$12 millones en ese país en 2017 sobre ingresos totales ese año de US$418 millones, que pudo reducir a US$2,1 millones el año pasado.

No obstante, las acciones de Sonda han tenido un rendimiento inferior al mercado general y han bajado 14% en 2019, en comparación con el retroceso de 2,3% del índice de referencia S&P Ipsa.

Pese a sellar nuevos acuerdos, persisten los riesgos para Sonda en Brasil. Economistas han reducido constantemente sus estimaciones de crecimiento para este año puesto que la inversión sigue moderada a la espera del desenlace de la tramitación de una importante reforma al sistema de pensiones del país. El desempleo también se mantiene elevado. Analistas proyectan que la economía se expandirá 0,8% este año, según la más reciente encuesta del Banco Central, menos de un tercio de lo que pronosticaban en febrero.

Sonda también experimenta un crecimiento de sus ingresos en Argentina, donde pudo obtener contratos a fines del año pasado en los sectores de transporte y educación.

Algunos de ellos son pagaderos en dólares y la compañía ha cubierto su exposición a la moneda local para los demás, precisó Osorio. El peso argentino se ha depreciado 14% en 2019.

La compañía reestructuró además su estrategia comercial y de gestión en México. "Las cosas estuvieron mejor allí este año que el año pasado, pero aún vemos cierta debilidad en las ventas", sostuvo Osorio.

"El entorno empresarial no es el mejor. Sí vemos oportunidades para crecer allí y usar ese país como una plataforma para prestar servicios en Estados Unidos", agregó.

La compañía estudia posibles adquisiciones de empresas en Guadalajara y Monterrey, según Osorio. "No serán grandes, US$100 millones en ingresos como máximo", precisó.