Tres conceptos: Ambiente, Social y Gobierno corporativo (en inglés ESG)
AQR realizó un estudio que ordena las empresas por "quintiles ESG": las del peor quintil tienen un 10-15% de mayor volatilidad.
Para el que no conozca la sigla en el título de esta columna, se refiere a un marco de referencia enfocado en principios de inversión responsable. No solo es un tema en boga, sino también de amplia discusión respecto a su capacidad de general valor de largo plazo.
Nadie quiere invertir en empresas que contaminan o con una administración abusiva, pero la pregunta es: ¿Invertir en empresas "buenas" es bueno, neutral o malo?
Una de las formas más comunes de aplicar ESG es a través de un filtro negativo. Es una forma de limitar al portafolio a empresas que no violan los principios estipulados. Al limitar las inversiones excluyendo estas empresas "malas" estaríamos castigando este tipo de conductas. El problema: si esto fuera el caso, y los inversionistas venden las empresas "malas", éstas se volverían relativamente más baratas, creando un resultado claramente no deseado.
Otra forma de aplicar ESG en el proceso es a través de Integración, proceso que no implica reducir el universo de inversión. Se enfoca más en incorporar variables cuantificables que miden desde un punto de vista ESG la oportunidad de inversión dentro de un contexto más amplio. Se incluirían, por ejemplo, cambios regulatorios, sobrecostos por contaminación y contabilidad agresiva.
¿Qué dice la evidencia?
Si nos enfocamos exclusivamente desde un punto de vista de retorno, el objetivo es rentar más que el índice de referencia. Pero lograr esto a través de un filtro negativo es complejo. Probablemente este es uno de los motivos por el que los estudios entregan diferentes conclusiones respecto de la capacidad de generar exceso de retorno a través de ESG.
Desde un punto de vista de riesgo, AQR realizó un estudio que llega a la conclusión de que ordenar las empresas por "quintiles ESG" entrega resultados relevantes.
Las empresas del peor quintil tienen un 10-15% de mayor volatilidad que las del mejor quintil. Sería entonces un método estadísticamente significativo para reducir el riesgo de cola.
Considerar factores de ESG no implicaría solo un foco más amigable con el medio ambiente y prácticas responsables, sino que ayudaría a obtener un mejor perfil riesgo-retorno para los inversionistas y, ojalá evitar lo máximo posibles casos como el de Volkswagen y muchos otros.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.