Reforma energética de México toma forma detrás de barricadas




Escudado por barricadas, el Senado mexicano firmaría esta semana el plan de reforma energética, pavimentando el camino para que una profunda revisión al sector pueda ser transformada en ley antes del 15 de diciembre, dijo un legislador.

La legislación es el punto máximo de las ambiciones del presidente mexicano Enrique Peña Nieto, diseñada para atraer miles de millones de dólares en inversión y alimentar el crecimiento económico, y exige la reescritura de partes de la constitución para abrir el sector que ha estado en manos del estado por 75 años.

Andrés Manuel López Beltrán, hijo del líder izquierdista Andrés Manuel López Obrador (conocido como Amlo), llamó a los partidarios a reunirse hoy "para bloquear el Senado y evitar que la reforma energética sea aprobada". La policía erigió rejas y aumentó la seguridad en el Congreso después de que Amlo atrajera a miles a una marcha anti reforma energética el fin de semana para parar lo que él considera como el "robo" del monopolio del petróleo.

En una carrera contra el tiempo, el destino de la reforma energética ha quedado vinculado al de la reforma electoral, que el opositor Partido de Acción Nacional ha hecho una precondición para el debate energético. Se espera que los senadores voten sobre la reforma electoral el próximo martes, para luego pasar a la Cámara de Diputados.

El 15 de diciembre es la fecha límite porque el congreso se va a receso hasta el 1 de febrero.

"Una vez que el Senado vote sobre la reforma política, pueden entrar a la reforma energética. Debieran enviarla a la Cámara la próxima semana, para votar sobre la reforma energética antes del 15 de diciembre", dijo el legislador, confirmando las expectativas que han crecido en las últimas semanas de que será más amigable con los mercados que lo que se espera.

Es una fecha importante ya que el Congreso entra en receso hasta el 1 de febrero en esa fecha. Después de sacrificar su popularidad en su primer año como presidente para conseguir las reformas mediante, Peña Nieto tiene que terminar este año con una nota alta.

Durante casi todo su año inaugural en el cargo, el presidente logró mantener un pacto entre los partidos cada vez más rebeldes de México a flote. Pero la semana pasada, el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), abandonó el pacto, diciendo que las dos partes habían dejado de conversar sobre la reforma política.

Esa salida hace que sea más fácil para el gobierno aprobar una reforma energética más favorable para el mercado.

COPY RIGHT FINANCIAL TIMES

© The Financial Times Ltd, 2011.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.