Viña Errázuriz busca expandir sus ventas al mercado asiático
El enólogo Eduardo Chadwick, presidente de grupo Viña Errázuriz, busca ampliar sus ventas al mercado asiático, después de haber pasado más de tres décadas reconstruyendo la compañía familiar y ubicando su etiqueta de US$170 como referencia de la industria.
Errázuriz ha establecido su propia empresa en Shangai para apuntar a los compradores y coleccionistas chinos, complementando el trabajo con los comerciantes en Burdeos, que manejan las exportaciones globales de vino a través de redes de distribución definidas.
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"Hay un gran desafío por delante de nosotros para educar al mercado asiático", dijo Chadwick en una entrevista en Londres este mes, cuando recibió el premio Hombre del Año de la revista Decanter. "Ahí es donde vamos a dedicar mucho esfuerzo", agregar.
Como Burdeos y Borgoña se han vuelto más caros en la última década, una proporción creciente de la población china consumidora de vino ha comenzado a buscar alternativos de calidad de áreas como el norte de Italia, Australia, América Latina y California, creando un oportunidad para los exportadores nacionales.
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"Soy muy optimista sobre el potencial del mercado chino" en general, dijo Chadwick. Al señalar la creciente presencia de marcas chilenas en mercados clave de Asia, como Japón y China, afirmó que "tienen un gran interés en el buen vino".
Chadwick ha estado construyendo la reputación de sus viñedos desde 1983, cuando su padre le pidió que restaurara la fortuna de la compañía, que fue fundada en 1870 por Don Maximiano Errázuriz. El negocio había sufrido más de una década de inestabilidad política.
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"En 1983 fue difícil (...) 1990 fue el año crucial, cuando recuperamos la democracia", manifestó Chadwick.
Los viñedos fueron plantados con uvas cabernet sauvignon y carmenere, y la influencia de la tradición vinícola de Burdeos tomó fuerza. El propio Chadwick estudió en Burdeos, y ha construido la empresa en torno a la creencia de que Chile es capaz de producir vinos que pueden competir con las principales fincas internacionales.
A principios de la década de 1990, el enólogo pionero de California, Robert Mondavi, visitó Chile, conoció a Chadwick y quedó impresionado con el potencial de su tierra. A continuación, se inició una empresa conjunta, comenzando con la cosecha de 1995 y desarrollando la etiqueta Sena, vinos de alta gama de estilo Burdeos.
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Un reconocimiento más amplio llegó con una cata en Berlín en 2004 organizada por Chadwick y el crítico de vinos y autor Steven Spurrier, presentando a Sena junto a los mejores vinos internacionales.
Sena se produce en cantidades limitadas en el Valle de Aconcagua, al norte de Santiago y cerca del Océano Pacífico, y es una mezcla de estilo Burdeos elaborada según la cosecha de uvas Cabernet Sauvignon, Merlot, Cabernet Franc, Petit Verdot, Malbec y Carmenere . Mientras que las primeras cuatro variedades son típicas de Burdeos, el carmenere agrega un toque más chileno.
El vino, cuya cosecha 2015 está listada en US$171 la botella en Berry Bros. & Rudd de Londres, se distribuye en el Reino Unido a través de Hatch Mansfield e internacionalmente, a través de comerciantes de Burdeos.
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