El Niño: 5 dramáticas consecuencias del fenómeno en Chile

El Niño es un fenómeno climático que ocurre en el Océano Pacífico, pero tiene efectos significativos en el clima global, incluyendo a Chile.

Según documentación del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, Senapred, El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) consiste en una anomalía del sistema acoplado océano-atmósfera que se caracteriza por calentamientos y enfriamientos del océano que afectan significativamente en los procesos oceanográficos y meteorológicos a escala regional y global.

ENOS presenta tres fases conocidas como La Niña, Neutro y El Niño.

Durante un episodio de El Niño, los vientos del este se debilitan y las aguas superficiales del Pacífico ecuatorial aumentan sostenidamente la temperatura superficial del mar por sobre los 0.5°C respecto del promedio, por un período de 5 meses.

Sus consecuencias inmediatas pueden variar dependiendo de la intensidad del fenómeno, pero generalmente se pueden esperar los siguientes impactos durante un evento de El Niño.

• Precipitaciones: durante El Niño, las regiones ubicadas al norte tienden a experimentar un incremento en sus lluvias, lo que puede llevar a inundaciones y deslizamientos de tierra en zonas que normalmente son áridas. Este incremento de precipitaciones puede ser beneficioso en términos de aporte de agua a las zonas desérticas y semiáridas, pero también puede ser perjudicial si la infraestructura local no está preparada para lidiar con el exceso de agua.
• Temperaturas: El Niño puede causar un aumento en las temperaturas promedio durante el invierno, lo que podría tener un efecto en la agricultura, en particular en los cultivos que dependen de las bajas temperaturas del invierno.
• Pesca: El Niño puede alterar las corrientes oceánicas y la disponibilidad de nutrientes en el mar, lo cual puede impactar negativamente en la pesca. En particular, puede afectar a la anchoveta, una especie de pez que es un componente clave de la industria pesquera en Chile.
• Incendios forestales: aunque menos comunes en invierno, las temperaturas más cálidas y el tiempo seco en la zona centro-sur del país pueden aumentar el riesgo de incendios forestales.
• Salud pública: las lluvias excesivas y las inundaciones pueden llevar a brotes de enfermedades transmitidas por el agua, como el dengue y el zika, de los que ya se han registrado casos en las regiones del norte.

Si bien la Dirección Meteorológica de Chile monitorea estos eventos de cerca para proporcionar advertencias, Senapred dispuso para la población algunas recomendaciones para prepararse ante la llegada del Niño.

Son las siguientes, divididas por zonas geográficas:

1. Mantén reservas de agua para afrontar la escasez de lluvias estivales.
2. Planifica actividades agrícolas acorde al déficit hídrico.

1. Mantén el techo de tu vivienda en buen estado.
2. Limpia acequias y vías de evacuación de agua alrededor de tu hogar.
3. Prepara tu terreno para evitar acumulación de agua o inundación de éstas.

1. Reserva agua para afrontar los meses secos de verano.
2. Protege los cultivos del frío. Resguarda a tus animales, como también los almacenamientos de agua, para evitar el congelamiento.

• Reconoce tu entorno, averigua si donde vives o en el lugar que visitas existe alguna amenaza e infórmate sobre el plan de emergencia del municipio respectivo.
• Una emergencia no afecta sólo a las personas, considera que animales y mascotas también se ven afectados.
• Elabora y pon en práctica tu Plan Familia Preparada, entrando a senapred.cl
• Mantén siempre preparado tu kit de emergencia.
• Los desastres, sean de origen natural o social, no afectan a todos por igual, estos tienen impactos diferentes sobre la calidad de vida de las mujeres, niños y hombres, adultos mayores, personas con discapacidad, grupos étnicos entre otros. Por lo que se deben considerar las vulnerabilidades, necesidades y capacidades de cada uno de ellos.

Fuentes: Ministerio de Agricultura, Ministerio de Energía, Dirección General de Aguas, MOP, DMC, Servicio Meteorológico de la Armada de Chile, Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura, Comisión Nacional de Riego, Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública.