El persecutor a cargo del caso argumentó que el crimen fue planificado y que, por ello, es posible que hayan participado el doble de personas que el número de efectivos policiales.
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Tres meses tardó la detención de quienes serían los principales sospechosos de haber asesinado a tres carabineros en Cañete, tiempo suficiente para que el fiscal de La Araucanía, a cargo de las diligencias, llegara a la convicción de que se trata de un crimen cuidadosamente planificado, pero que -salvo el odio a la policía- nada tiene que ver con la causa mapuche.
Fue un operativo casi perfecto, si no fuera porque uno de los sospechosos se les escapó. Aun así, para La Moneda el que la Fiscalía de La Araucanía y el OS-9 de Carabineros identificara y detuviera a los presuntos autores del triple homicidio de carabineros en el Biobío fue todo un triunfo. Pero no todo fue dulce para el Ejecutivo. La ministra del Interior no pudo convencer a los fiscales para trasladarse al hito comunicacional preparado por La Moneda en la ciudad de los fallecidos policías. Aquí la historia.
Si bien no existen antecedentes ni sospechas de que Tomás Antihuen salió del país, la Fiscalía Regional de La Araucanía emitió una alerta al resto de países. Información que fue confirmada por el fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, a este medio.
Fue formalizado y quedó en prisión preventiva.
Pese a ráfagas de viento y lluvia en la Región del Biobío, Carabineros y la Fiscalía siguen realizando labores para dar con el paradero de Tomás Antihuen, único prófugo del triple homicidio. En paralelo, sus hermanos que quedaron en prisión preventiva fueron ingresados durante la noche al recinto de máxima seguridad en la capital, donde también están presos miembros del Tren de Aragua.
"Si consideramos que se trataba de tres funcionarios policiales, entrenados profesionales, que tenían armamento, la reducción de ellos tendría que haber implicado por lo menos una cantidad de personas que los superara en número", planteó el persecutor jefe de La Araucanía.
El fiscal nacional dijo, además, que en este caso se trata de personas “que conocen mucho mejor que los policías el entorno del lugar donde se encuentran, que están familiarizadas con esos lugares y donde esconderse”.
Pese a lo sostenido por la defensa, que cuestionó el inicio de la investigación, el tribunal decretó la medida cautelar en contra de los tres imputados, apuntando a la violencia con la que estos actuaron. La medida cautelar será cumplida en la cárcel de alta seguridad en la Región Metropolitana.
El tribunal decretó seis meses para desarrollar la investigación por este triple homicidio, mientras sigue prófugo uno de los hermanos Antihuen Santi.
Jefferson Antihuen Santi, Felipe Antihuen Santi y Nicolás Rivas Paillao, además del prófugo Tomás Antihuen Santi, son sindicados como los presuntos autores del asesinato de los carabineros Sergio Arévalo (34), Misael Vidal (30) y Carlos Cisterna (43).
“Creemos que los antecedentes esgrimidos, trataremos de demostrarlo, no permiten corroborar ni superar el estándar de la presunción fundada”, sostuvo el abogado Jaime Pacheco.
En un nuevo capítulo del programa de La Tercera, el periodista José Carvajal, entregó nuevos antecedentes sobre los tres imputados detenidos -y el prófugo- sobre el triple crimen contra funcionarios de Carabineros el pasado 27 de abril.
El "testigo reservado 8" reveló ante Carabineros que el día del triple homicidio de los funcionarios, Nicolás Rivas Paillao (29) fue quien le entregó un arma de alto calibre a uno de los hermanos Antihuen Santi, lo cual sería su participación en este hecho. Además de eso, el testimonio también da cuenta de la reacción que tuvo Rivas cuando se enteró del crimen.
