Los bonos y acciones inmobiliarios chinos se veían sometidos a una fuerte presión vendedora un día después de que la constructora china Fantasia Holdings dijo que no logró pagar a tiempo una deuda en el mercado internacional.
6 oct 2021 07:38 AM
Los bonos y acciones inmobiliarios chinos se veían sometidos a una fuerte presión vendedora un día después de que la constructora china Fantasia Holdings dijo que no logró pagar a tiempo una deuda en el mercado internacional.
No cumplió con el reembolso de US$ 205,7 millones previsto para el lunes.
Este jueves era la fecha límite para que Evergrande abonara el cupón de uno de sus bonos denominados en dólares.
El papel del gigante inmobiliario chino ahogado por las deudas llegó a subir más de 30% en la bolsa de Hong Kong.
La empresa china, con un pasivo de más de US$ 300.000 millones, está siendo observada con lupa por parte de la comunidad financiera mundial.
El gigante chino se enfrenta al enfado de compradores e inversores que temen perder su dinero con una hipotética quiebra.
Expertos dicen que el colapso de la compañía sería el mayor desafío que el sistema financiero de China ha sufrido en años.
De acuerdo a la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento, las liquidaciones cayeron 25% totalizando 105, la cifra más baja desde noviembre de 2018. Entre enero-julio se concretaron 928 procedimientos, de ellos 30 corresponden a grandes empresas.
La automotora presentó en Estados Unidos un estado de cuenta de sus finanzas a mayo de 2021, el que sigue en rojo. Sus operaciones se han recuperado gracias al aumento de las ventas de autos. La marca Hyundai, que representa en Chile, sube sus ventas un 73,7% en el primer semestre.
El empresario que opera el icónico restaurante de la Plaza Ñuñoa tenía 22 empleados y hoy solo conserva a seis. Vendía $ 70 millones al mes y hoy solo $ 1 millón. Fundado en 1964, Vidal tiene un último recurso: vender una propiedad para mantener a flote el local.
Esta es la sexta vez en el año que una compañía solicita la liquidación forzosa de la cadena ligada a la familia Bada Gracia. En marzo recién pasado, la compañía decidió poner fin a su operación tras 40 años de vida.
La junta de acreedores designó al martillero público Jorge del Río Varela para a venta de los bienes, con los que esperan recuperar no más de UF 5.000, unos $ 150 millones. El mayor acreedor de la empresa en liquidación es el Banco de Chile, con casi a mitad de los pasivos.
la compañía estimó que la proyección operacional de pasajeros para junio llegue a un 36% (medida en asientos-kilómetros disponibles - ASK).
La nueva sociedad que desde Estados Unidos controlará el grupo chileno tendrá en el directorio a dos altos ejecutivos de Elliot Investment Management, al ex presidente de Nissan North America y a un experto en reorganizaciones de empresas. El presidente seguirá siendo el chileno Ricardo Lessmann.
La medida obedece a los efectos de la pandemia. Justo y Bueno anunció el año pasado la adquisición de la cadena chilena.