Daniel Mansuy a examen: ocho historiadores analizan su libro sobre Salvador Allende

Daniel Mansuy
Daniel Mansuy.

A 50 años del Golpe militar, el ensayo del cientista político dedicado al expresidente socialista es uno de los títulos más vendidos, con 20 mil ejemplares. Preguntamos a un grupo de reconocidos historiadores ¿qué opina del libro? ¿Qué destaca de él? ¿A qué atribuye su éxito? Responden Sol Serrano, Rafael Sagredo, Ana María Stuvens, Cristian Pérez, Isabel Torres Dujisin, Manuel Vicuña, Marcelo Casals y Juan Luis Ossa.


Sol Serrano
Sol Serrano, Premio Nacional de Historia 2018. Foto: Andres Perez

Sol Serrano, Premio Nacional de Historia, académica UC:

“Ha contribuido a que se converse de la UP desde una perspectiva analítica”

Estimo que es un libro con preguntas agudas que aborda con sólida investigación.

Es interesante para el público amplio, además, que para los especialistas. Y está bien logrado el entramaje entre síntesis y relato, entre cronología y problemas.

Sé que ha sido criticado por no comprender el estudio de otros actores como la derecha, los gremios o Estados Unidos. Pero él no promete eso desde el inicio. Dice expresamente que el libro es sobre Allende y la izquierda. Y genuinamente busca entender y no denostar dentro de su propia interpretación. Tengo dudas típicamente de historiadores que no valen mucho la pena discutir ahora. Además, salió antes del libro de Aylwin que ayuda mucho a comprender las negociaciones del último mes. Mansuy tiende a verlas como inviables. De hecho, no resultaron. Pero hay mucho que comprender del proceso mismo en ellas.

Lo crucial es que llegó a un público amplio y ha contribuido mucho a que se conozca el período y que se converse sobre la UP desde una perspectiva analítica que contribuye a comprender. Mansuy postula acertadamente, a mi juicio, que el tema de fondo es la política y lo político. Y por ello es tan relevante para hoy. Creo que sin comprender por qué hubo un Golpe de Estado es difícil comprender cómo evitar la violencia en democracia. Es un aporte historiográfico y político.

Pérez
Cristián Pérez, historiador UDP.

Cristián Pérez, historiador, académico UDP:

“Exculpa a los golpistas y responsabiliza a Allende y la UP”

El libro ha tenido gran aceptación por el público, por la crítica, especialmente vinculada con la derecha, porque ha permitido acercar a los lectores a Allende. Creo que el autor tiene simpatía por este señor que termina su vida en La Moneda con ese gran discurso. Y creo que eso a la gente vinculada a la derecha lo impresiona. Me parece que el autor hace un esfuerzo importante al construir este análisis sobre la izquierda chilena y la Unidad Popular. Dicho eso, tengo discrepancias de fondo con algunos de sus planteamientos. Una de ellas es que Mansuy traslada la responsabilidad del Golpe a Allende y la Unidad Popular. Y eso no es correcto. Exculpa a los golpistas y responsabiliza a la UP. Y eso merece un análisis más profundo. Es decir, yo estoy convencido de que el Golpe se podía evitar, y en eso la responsabilidad principal no era de la Unidad Popular, sino de quienes planificaron y ejecutaron el Golpe. Honestamente, creo que Mansuy se equivoca. Otra cuestión es la idea de que Allende no gobierna, no manda. Y me parece que también está en un error. Allende era una persona decidida, muy seguro de sí mismo, que daba órdenes claras y concretas. Hay muchos ejemplos de ello, incluso al final, cuando decide convocar a un plebiscito, en contra de la opinión del Partido Socialista y de parte importante de la coalición de gobierno. Además, Mansuy minimiza la intervención norteamericana, que fue determinante, antes y durante el gobierno, financiando operaciones de desestabilización. Y la violencia que ejerció la derecha. Allende no había asumido y asesinan al comandante en jefe del Ejército, y después asesinan a su hombre más leal en la marina, el comandante Arturo Araya. Eso no se puede obviar.

Rafael Sagredo
Rafael Sagredo, Premio Nacional de Historia 2022. Foto Juan Farias / Diario La Tercera

Rafael Sagredo, Premio Nacional de Historia, académico UC:

“Aprovecha la producción intelectual sobre Allende y la UP”

Me parece un libro muy estimulante, aborda asuntos esenciales, ofrece referencias fundamentales y plantea desafíos intelectuales para abordar nuestro pasado reciente.

Creo que es una mirada aguda que aprovecha la producción intelectual sobre Allende y la UP, en la que no obstante falta lo relacionado con el contexto histórico en que se desenvolvió el gobierno popular, es decir, la campaña de desestabilización llevada adelante por la derecha, y así también otros factores, Guerra Fría, polarización, pérdida de confianza en la democracia, frustración, desequilibrios estructurales, todo lo cual también explica la crisis que vivimos y su dramático desenlace, el que nunca estuvimos condenados a vivir. Ni qué decir de lo que vino después, desde el mismo 11 en adelante, la violencia desatada, sistemática e institucionalizada, avalada por muchos de los mismos que contribuyeron al fin de Allende y su régimen, todo lo cual hace todavía más incomprensible que no se aborde su conducta, opciones y actuaciones durante la Unidad Popular.

Creo que su éxito se explica porque se trata de un tema, una historia, fundamental, que Mansuy insinúa muy contingente, en un momento particular como son los 50 años del Golpe y con estas coaliciones en el poder; además, está bien escrito y se lee con interés, y que tuvo en Boric, y en un conjunto de medios de la plaza, promotores entusiastas que contribuyen a difundirlo y a atraer el interés sobre este ensayo político.

La historiadora Isabel Torres Dujisin.
La historiadora Isabel Torres Dujisin.

Isabel Torres Dujisin, historiadora, académica U. de Chile:

“Es un libro valiente, respetuoso y bien fundamentado”

Es un libro bien documentado, de lectura ágil y entretenida. Es un libro valiente; como Mansuy no es un hombre de izquierda, no tiene el complejo de la izquierda de decir cosas incómodas, y se atreve a enfrentar el mito de Allende. Ahora, destaca mucho la soledad de Allende, y creo que exagera. Es cierto que el Partido Socialista lo apoyaba minoritariamente, pero tenía la lealtad del Partido Comunista, que era un partido poderoso. Como historiadora, yo creo -como dice Marx- que los hombres y las mujeres hacen su historia, pero no la hacen al libre albedrío, sino bajo su circunstancia histórica. O sea, todos somos seres históricos. A Allende uno tiene que leerlo históricamente, en su época, en sus decisiones y su contexto. A mí me faltó, aunque el autor dice que no lo va a trabajar, el tema de la intervención norteamericana, porque es muy determinante. La intervención norteamericana comienza antes de las elecciones y durante los tres años de gobierno la intervención de la CIA va a estar muy presente. Es un aspecto que no se puede soslayar y me parece que ahí hay una debilidad de su estudio. Lo otro es que los conceptos que se usan en la época -marxismo, lucha de clases, dictadura del proletariado- hay que leerlos históricamente y Mansuy tiende a ser muy literal. Faltó una mayor comprensión de ello. Por lo demás, es un libro que lo ha comprado tanto la derecha como los lectores de la izquierda, porque no es la caricatura de la derecha y tampoco el mito de la izquierda. Es un libro respetuoso y bien fundamentado.

Ana María
Ana María Stuven, historiadora UC/UDP.

Ana María Stuvens, historiadora, académica UDP/UC:

“Impone la visión del fracaso sobre la visión de la derrota militar”

El libro de Daniel Mansuy es muy oportuno. A diferencia de otros aniversarios, los 50 años del Golpe remecen al país. El libro ofrece un relato y una interpretación que hacen pensar sobre una herida aún abierta. Sólido intelectualmente, el autor se adentra no solo en el “mito” de Allende, sino también en los avatares que ha tenido la izquierda para lidiar con este y con la realidad.

Mito y realidad; fracaso o derrota. Son hilos conductores de un relato que restituye a los actores a la incertidumbre y la contingencia de un proceso donde los desaciertos de la Unidad Popular se combinan con las injerencias internas y externas. El autor impone la visión del fracaso sobre la visión reduccionista de la derrota militar. Sin embargo, reconoce que el discurso final y el suicidio de Allende -sale de la política y de la historia- dificultan la comprensión del proceso histórico que condujo a la UP y el análisis de sus desaciertos.

Como toda buena historiografía, bebe también de otros autores. Las posturas de Manuel A. Garretón y Tomás Moulian en los años 80 y 90 sugieren una mayor exploración en torno a la izquierda chilena, al socialismo y a los años de la Concertación. Aylwin y Lagos habrían querido domesticar y sustituir el mito; Boric, anestesiarlo. Mansuy deja planteado el enigma que reaparece en la conflictividad de este aniversario de los 50 años del Golpe militar.

Juan Luis Ossa
Juan Luis Ossa, historiador del Centro de Estudios Publicos (CEP).

Juan Luis Ossa, historiador, investigador del Cep:

“Presenta preguntas incómodas, pero necesarias”

¿A qué se debe que un libro de historia y filosofía política se haya convertido en un superventas en un país que, como Chile, no es particularmente dado a la lectura de no ficción? Como siempre, hay cuestiones de forma y de fondo que lo explican. Respecto de lo primero, la obra de Mansuy está construida en base a un buen trabajo de investigación, el cual, a través de una pluma ágil y directa, mezcla la crónica con la reflexión bibliográfico-teórica. La gracia de este ejercicio es que si bien no introduce documentos particularmente novedosos, permite hacerse una idea bastante cabal de una época concreta.

Más importantes son, sin embargo, las razones de fondo, y que tienen que ver con el proceso político de la Unidad Popular (UP). Se trata, en efecto, de un periodo que vuelve una y otra vez, generación tras generación, a la cotidianidad de nuestras vidas. Parafraseando a William H. Sewell Jr., la UP y la dictadura son eventos fuertemente “históricos”, en tanto en ellos se condensan una serie de acontecimientos cuyas repercusiones cambiaron profundamente las estructuras de poder hasta allí conocidas. Mansuy es consciente de ello, y la aparición del libro a exactos 50 años del Golpe militar no es una mera casualidad.

Sobresale un segundo motivo de fondo. Aun cuando en el último tiempo historiadores de izquierda han publicado análisis importantes sobre las tradiciones políticas que explican su evolución histórica hasta 1970, no ha ocurrido lo mismo (no con la misma intensidad) con los años inmediatamente posteriores. Mansuy se propone llenar este vacío, pero lo hace desde una posición, digamos, de centroderecha, no de izquierda. Es decir, lo hace sin un ánimo reivindicativo ni romántico, lo que le permite, a diferencia de cierta izquierda, presentar preguntas necesarias, pero evidentemente incómodas. Y eso siempre es bienvenido, sobre todo luego de las dos últimas derrotas electorales de la “nueva” izquierda chilena y la falta de rigurosidad intelectual que han mostrado muchos de los referentes juveniles del Frente Amplio. Repensar la historia propia siempre es doloroso, pero más doloroso es no hacerlo.

Marcelo Casals
Marcelo Casals, historiador, Cidoc. Foto: Juan Farias /La Tercera

Marcelo Casals, historiador, investigador Cidoc:

“Tiene por objetivo una defensa de la cultura política de la Concertación”

Escribí una reseña para Ciper donde desarrollé mis objeciones al libro de Mansuy. Sobre las razones de su buena acogida, creo que hay varias. Es un libro bien escrito y bien investigado (más allá de que esté en desacuerdo con muchas de sus tesis). También hay otras cosas propias del mundo editorial y del contexto político. Se publica en una editorial de grandes dimensiones, y además con el favor de la prensa conservadora que colaboró decisivamente con su difusión. Después, hay otras cosas que tienen que ver con el objetivo del libro y la coyuntura: el texto de Mansuy, más allá de que sea sobre Allende y la UP, tiene por objetivo no del todo manifiesto una defensa si no del proyecto, al menos de la cultura política de la Concertación (o bien, de la transición en su conjunto). De allí el trato favorable que reciben Aylwin y Lagos en sus intentos por domesticar el mito de Allende, y de ahí también las fuertes críticas al Frente Amplio y Boric, en la medida en que basaron su popularidad en una crítica injusta (para Mansuy) de los “30 años”. Con todo eso, el libro ha recibido el beneplácito del establishment político de la transición: de los sectores más conservadores en la medida en que Mansuy elabora una crítica informada y al mismo tiempo muy crítica de Allende y la UP (en una línea muy semejante al ensayismo y la historiografía conservadora, sobre todo Gonzalo Vial), y de la ex Concertación y sus intelectuales, por cuanto es una reivindicación de la renovación socialista y del proyecto de transición encarnado en esos gobiernos. Cabría preguntarse hasta qué punto Mansuy idealiza el proyecto político de la Concertación y sobre todo aquel supuesto espíritu dialogante y de amistad cívica de la transición. Baste para ello recordar la durísima oposición de la derecha política a la Concertación en el poder, sobre todo en los años 90.

manuel vicuña
Manuel Vicuña, historiador UDP.

Manuel Vicuña, historiador, académico UDP:

“No solo se ocupa de Allende, también aborda su estatura mítica”

Me parece un libro sólido, que hace un muy buen uso de la literatura académica existente sobre Allende y la UP, y además muestra las virtudes del ensayo como género histórico capaz de abrirse a una lectoría amplia. Y no se trata de un libro que solo se ocupa de Allende, también aborda su estatura mítica y su sobrevivencia como una figura que hipnotiza a sectores de izquierda, que no logran saldar cuentas definitivas con el pasado que representa.

Destacaría la capacidad para analizar los escenarios políticos y sus márgenes de maniobra, cada vez más estrechos conforme avanza el periodo de la UP, y el análisis de Allende como un hombre de Estado que confía en un arte de hacer política que responde a otra época, tanto en su relación con la oposición como con los partidos integrantes de su coalición.

Creo que los 50 años del Golpe de Estado, si bien se presentan como una conmemoración que divide, causan interés, porque ese sigue siendo el gran trauma de la historia de Chile. Ninguna de las guerras civiles del siglo XIX causó el mismo efecto perdurable en la memoria colectiva ni en las relaciones sociales. Hablar sobre Allende y su gobierno es una manera de comprender el quiebre de la democracia, los riesgos de la polarización política y las fantasías de introducir transformaciones radicales sin contar con mayorías políticas significativas.

Allende Mansuy

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