Evelyn Matthei: “Tengamos claro que van a surgir nuevas figuras... Esto no es entre Lavín y yo”
La alcaldesa de Providencia sostiene que “lo más probable” es que el desafío presidencial termine seduciendo a Mario Desbordes y a Sebastián Sichel, entre otros. “No podemos ser los mismos de siempre”, sentencia.
“Sí podía ser candidata cuando todo el mundo sabía que iba a perder. Podía ser candidata a que me pusieran en el Ministerio del Interior cuando les convenía...”, lanza la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei, ya molesta por los cuestionamientos que han surgido en Chile Vamos por salirle al paso a su par de Las Condes, Joaquín Lavín, en la carrera presidencial. Matthei defiende su derecho a proponer una alternativa y aventura que no será la única en la centroderecha.
Sé que ha mantenido en reserva su voto del domingo pasado. ¿Eso se puede entender principalmente como un gesto en favor de su sector que se dividió entre el Apruebo y el Rechazo?
Sí, fue una decisión totalmente racional, en que me di cuenta de que mucha gente votaba Rechazo, ya sea porque le ha ido bien con las actuales reglas del juego, porque tienen temor. Hay otros que anunciaron su voto por el Apruebo ya sea por convicción o por conveniencia. El tema es que nuestro sector estaba profundamente dividido entre uno y otro, pero el resultado en realidad no debió haber sido un misterio para nadie. El resultado no era el tema, era cómo lograr después conversar con los que se abanderaron públicamente por el Apruebo y el Rechazo, es súper importante que todos esos sectores puedan volver a conversar y, por lo tanto, más allá de cualquier candidatura, no tiene nada que ver con cálculo electoral, sino con la posibilidad de volver a conversar y unir a personas que en realidad si tú les preguntas cuáles son sus sueños respecto de Chile, son bastante parecidos.
Se entiende perfectamente la reflexión respecto de su sector, sin embargo, usted aspira a ser candidata a la Presidencia de la República, ¿no le parece que una decisión tan importante como la del plebiscito debiera ser conocida?
Creo que no, porque no hace ninguna diferencia y porque, además, desde un principio dejé clarísimo que estaba porque se consultara a las personas. Así que el respeto al plebiscito, al proceso, a escuchar a la ciudadanía, yo creo que eso era lo principal y lo cumplí con largueza
¿Qué sentido tiene salir a competirle a alguien como Lavín, quien desde hace un rato aparece como consolidado en las encuestas?
Tengamos claro que van a surgir nuevas figuras. Esto no es entre Lavín y yo. Aquí lo más probable es que Desbordes sea candidato o precandidato; Sebastián Sichel, Felipe Kast estará de todos modos en una primaria, y esto es parte de una riqueza de poder conversar, mostrar distintos caminos, poder convenir y que finalmente sea la ciudadanía la que, en primarias, decida quién es la mejor figura. A mí me parece que es una tremenda fortaleza que pueda haber cuatro o cinco figuras compitiendo por la derecha.
Pero ahí la lógica es que eso potencia en general, porque qué sentido tiene competirle a alguien que les gana a todos en las encuestas…
Bueno, veamos poh... Resulta que es distinto si a ti te aprueba o tiene simpatía alguien que de verdad va a votar por ti o alguien que está al frente y va a votar por otro. Yo realmente creo que esto es una posibilidad muy buena de debatir qué es lo que somos, lo que creemos, a dónde vamos, y en la medida en que esas personas sean diversas y se comprometan, nos comprometamos todos, efectivamente apoyamos a aquel que gane, es una tremenda fortaleza de nuestro sector.
¿Alude a Lavín cuando señala esto de que el adversario te mira mucho con mucha simpatía, pero a la hora de la verdad, va a votar por alguien de su sector?
No, no me estaba refiriendo a él y quiero ser súper clara en que no me estaba refiriendo a él. Tengamos claro que hay encuestas y encuestas, hay algunas en que su metodología no da para que uno la llame encuesta. Yo todavía no conozco una encuesta seria, presencial, a nivel de todo Chile, en que se pregunta este entre y entre, qué prefiero, eso todavía no existe Y cuando uno ve las encuestas, sí hay algunos que andan allá arriba con nueve puntos, pero de nueve a 51 falta harto, ¿no?
Usted misma dio a entender que lo que gatilló su interés en la carrera presidencial fueron acciones de Joaquín Lavín, algo que le preocupa de su candidatura, ¿qué es...?
No quiero entrar en eso, creo que sí, todo el mundo sabe qué lo gatilló, pero creo que a estas alturas uno tiene que ser de verdad súper responsable, estamos en momentos de Chile que es delicado, creo que lo peor que podemos hacer es criticarnos entre nosotros o resaltar diferencias. Cada uno tiene que proponer en qué cree, qué es lo que quiere jugársela, ver qué se puede consensuar y que finalmente la gente elija, y creo que además todos tenemos que tener la grandeza de que primero, el que gane las primarias, todos los demás tienen que levantarle la mano esa noche y jugar a favor de esa persona, y segundo, uno también tiene que tener la grandeza de saber que quizás alguien puede ganar la primaria y, sin embargo, no ser el mejor candidato para el sector, todo eso lo iremos viendo con el tiempo.
Eso se dice sobre usted, alcaldesa, que puede ganar una primaria en Chile Vamos y que no necesariamente pueda aunar amplias voluntades fuera de su sector...
Suponte que eso fuera así... También hay algunos que dicen que tengo un carácter tan terrible que no puedo ser Presidenta, ¿no? Sí podía ser candidata cuando todo el mundo sabía que iba a perder, sí podía ser candidata a que me pusieran en el Ministerio del Interior cuando les convenía, para eso mi carácter es fantástico. Así que sí, se dicen muchas cosas de mí, probablemente porque soy mujer, porque no sé si se dirían todas esas cosas si yo fuera hombre. Respecto del tema de que pueden ganar las primarias, también ahí es bien distinto. Supongamos que hay todas las posibilidades de ganar la segunda vuelta a la centroderecha, supongamos que no hay ninguna posibilidad de ganar. Alguien me puede decir que probablemente esos casos son bien distintos y que, por ende, el candidato que requieren también es distinto. En uno se requiere un candidato que mantenga las ideas y la cohesión, en el otro es el más competitivo. Pero de todo eso no sabemos nada. Hay personas que quieren sacar conclusiones a partir de encuestas mal hechas y que, además, lo que muestran son nueve u 11 puntos de 51 que tienen que alcanzar. Entonces no me vengan con tonteras.
¿Qué hay en usted que hace que pueda representar mejor a su sector? ¿Por qué a Evelyn Matthei le interesa ser candidata presidencial? Además, lo pasó mal la otra vez, ¿o no?
Perdón, ¿y por qué le puede interesar a Mario Desbordes ser candidato presidencial? ¿Y por qué a Joaquín Lavín? Es muy curioso que a mí me hagan siempre todas esas preguntas, como si yo tuviera que justificar. ¿Soy la única que tiene que justificar? ¿O todos tienen que justificar? O sea, si el día de mañana sale Desbordes, ¿también va a tener que justificar de que sea candidato presidencial, a pesar de que está Joaquín Lavín? ¿O soy yo la única que tiene que justificar? Y Sichel ha dicho que a lo mejor también entra, y Felipe Kast también. Entonces, pongámonos de acuerdo, ¿tenemos todos que justificar los que entramos después? Si no tuviera las cualidades para ser candidata presidencial, ¿por qué me fueron a buscar hace ocho años? Pero por qué me fueron a buscar a mí ocho años atrás y no a Lavín. Y por qué soné en dos cambios de gabinete para el Ministerio del Interior y no sonó Lavín. O sea, ¿yo sirvo solamente pa' los cachos? ¿Ah? Cuando uno no puede ganar, puedo ser candidata presidencial; cuando hay dificultades graves en el Ministerio del Interior, ahí sirve la Evelyn, pero si decide que es candidata presidencial tiene que justificar por qué esta desfachatez de querer ser candidata. No me parece, no voy a entrar en esa lógica.
¿Ha sentido cierta hostilidad en su sector? Porque se nota enojada cuando se le plantean estos temas.
No. Me enoja cada vez que siento que a las mujeres nos tratan distinto que a los hombres. Eso de verdad me enoja y me ha tocado muchas veces. La verdad es que hay una serie de temas que son absolutamente indispensables para que Chile salga unido y sea un país con futuro, y creo que tengo derecho a poner todos esos temas en discusión.
¿A usted le parece que su sector posestallido también ha avanzado a esa misma lectura?
Creo que va a avanzar y eso es muy importante. Creo que muchas personas que creían que estaba todo bien, públicamente dije, cuando salió electo Piñera, que tenía que poner ministros que vinieran de regiones, colegios públicos, primera generación de la universidad, vengo diciendo estas cosas hace mucho tiempo y probablemente porque fui diputada por San Antonio, donde estuve en los campamentos tomando tecito con las señoras y las escuché, y porque estuve en la Cuarta Región, donde hay en algunos sectores una pobreza y desesperanza enormes. Esas cosas las conozco, las he vivido. El tema de la inequidad y los efectos que tiene uno los puede leer, están escritos, están en libros, pero yo creo que al final las emociones muchas veces te graban mucho más a fuego esos convencimientos que la lectura de ensayo, libros, etc. Y yo eso lo tengo con un convencimiento absoluto y lo vengo diciendo hace mucho tiempo. Así que son muchos temas los que quiero poner en discusión que gane o no gane, lo veremos después, lo conversaremos después. Yo nunca he sido una persona insensata que trate de imponer mi voluntad, pero tengo derecho a sacar la voz y a presentarme sin darle explicaciones a nadie.
¿Y a usted le parece que hay que aunar fuerzas con José Antonio Kast o es como Ossandón, que dice que hay que alejarse de lo que él domina la extrema derecha?
Yo sí estoy absolutamente abierta a conversar con él.
Usted se había puesto como meta diciembre para ver si la candidatura prendía… ¿Eso sigue así?
Diciembre-enero. Lo que pasa es que uno cree en algún minuto que la decisión está tomada, pero claramente yo veo otra cosa, yo veo que Desbordes se va a presentar de todos modos, que además es probable que entre Sichel, lo que es bueno, es bueno que mostremos estas caras, distintos nombres, que vayamos renovando las cartas…
¿Por qué está tan convencida de eso?
Porque no podemos ser los mismos de siempre, cómo no va a ser bueno que entre una persona nueva, distinta. En el caso de Desbordes, viene de una familia de mucho esfuerzo, estudió en escuela pública, cómo no va a ser bueno tener un candidato así en la derecha. Es como tener una candidata mujer. En el caso de Sichel, venía de la oposición. ¿Cómo no va a ser bueno eso para la derecha? Creo que lo peor que puede pasar es tener un solo candidato. Lo atropellan, se enferma y uno se queda en nada.
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