A cinco meses del mortal accidente de Sebastián Piñera en Lago Ranco: ¿Qué ha pasado en la investigación?

La Fiscalía Regional de Los Ríos está a la espera de los resultados de las pericias que se están desarrollando en los hangares de Robinson Helicopter Company. Hasta ahí fueron enviadas partes del helicóptero que piloteaba el expresidente al momento de sufrir el accidente que cobró su vida el 6 de febrero pasado. La hipótesis de lo que ocurrió sigue siendo la misma y de eso dan cuenta también los sobrevivientes del trágico suceso. Aquí los detalles.


Algunas partes están en Canadá y otras en California, Estados Unidos. Esos son los destinos de los hangares de Robinson Helicopter Company a los que fueron enviadas piezas del helicóptero monomotor bipala R66 que piloteaba el expresidente Sebastián Piñera el 6 de febrero pasado en el accidente en Lago Ranco que le costó la vida. Han pasado ya cinco meses de ese fatídico hecho y la fiscal regional de Los Ríos, Tatiana Esquivel, está a la espera de los resultados de los peritajes internacionales para dar por cerrada la investigación penal que se abrió ese día.

Las diligencias, que se mandaron a realizar a los galpones del fabricante de la nave, serán clave para confirmar o descartar la principal hipótesis del accidente y que habría sido un error humano por parte del malogrado mandatario. Aun así, para el Ministerio Público es vital establecer las condiciones del helicóptero al momento de sobrevolar el lago en el cual cayó y donde lograron sobrevivir los acompañantes de Piñera, entre quienes estaba su amigo Ignacio Guerrero, el hijo de éste y también su hermana Magdalena Piñera.

Se espera, dicen fuentes consultadas, que en septiembre lleguen las conclusiones de Robinson Helicopter sobre la dinámica del accidente y especificar por qué una de las alas de la nave resultó completamente doblada y si eso se debió al impacto con el agua. Lo mismo que las abolladuras que tenía el R66 al momento de ser sacado de las profundidades de Ranco.

FOTO: MARIO TÉLLEZ / LA TERCERA

Las primeras tesis que delineó la PDI y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) sobre las causas del accidente iban desde las eventuales fallas mecánicas del helicóptero, hasta el empañamiento del parabrisas de la aeronave. Si bien aún no hay certezas, pues todo deberá ser respaldado por informes técnicos, fue de a poco tomando fuerza la del error humano, o también visto una impericia al momento de pilotear por parte del exjefe de Estado.

Esto, debido a las condiciones climáticas de ese día, ya que lo que han señalado diversos testigos es que al momento de comenzar su vuelo desde la casa de su amigo José Cox con destino a la propia la poca visibilidad determinó que no pudiera seguir la ruta trazada, ni tampoco lograr encontrar una zona segura para aterrizar.

Fuentes del caso aseguran que al descender para buscar una mejor visibilidad, el helicóptero se giró en 30°, lo que provocó que “la pala” (que es la hélice) golpeara el lago e hiciera que la nave se hundiera.

De todas maneras, esta hipótesis debe ser confirmada aún por las instituciones a cargo de la elaboración de las conclusiones de los peritajes.

José Cox, el anfitrión: “Corrimos a desamarrar mi lancha”

En el expediente que tramita Wittwer están las declaraciones de los testigos de esa fatídica jornada.

“El día de hoy, martes 6 de febrero del año 2024, siendo las 13.40 horas, mientras me encontraba en mi domicilio ubicado en el sector rural de Ilihue S/N, de la comuna de Lago Ranco, llegó de visita mi amigo Sebastián Piñera Echenique, acompañado de su hermana Magdalena Piñera Echenique, de mi amigo de nombre Ignacio Guerrero Gutiérrez y su hijo Bautista Guerrero Matta”. Así comienza la declaración del empresario y amigo de Sebastián Piñera, José Cox, quien ese día recibió al grupo en su casa, ubicada a una distancia de 42 kilómetros de Bahía Coique, donde está la casa del fallecido presidente.

“Estuvieron compartiendo alrededor de 45 minutos (…), sin embargo, alrededor de las 14.30 horas, los cuatro abordaron un helicóptero de propiedad de su amigo, Sebastián Piñera”, continuó.

Cox dio detalles de lo que presuntamente vio desde su casa.

“Luego de haber realizado el despegue, transcurrió aproximadamente un minuto, y observé que el helicóptero comenzó a cambiar su trayectoria en el aire, dirigiéndose al noreste”, dijo Cox.

“El helicóptero inició un ascenso relevante, llegando a un punto en que cambió su línea de vuelo y descendió hacia el lago en un ángulo aproximado de 30 grados”, relató.

Tras eso, “impactó con el agua a unos 250 metros de la orilla”, justo al frente de su casa.

José Cox, amigo del expresidente.

La declaración de Cox continúa relatando que él, junto a su hijo José Cox Alcaíno, “corrimos” a la orilla del lago “a desamarrar mi lancha particular, trasladándonos al lugar donde había capotado el helicóptero, con el fin de auxiliar a la tripulación”.

Como se sabe, Cox fue uno de los primeros en llegar al lugar donde había capotado el helicóptero Robinson 44, en el que viajaba Piñera junto con sus tres acompañantes.

Según declaró ante la policía uniformada, una vez que llega al lugar junto con su hijo, “logramos extraer desde el interior del lago a tres ocupantes, dos hombres y una mujer, quienes se veían sin lesiones visibles”.

“Sin embargo -agregó-, faltaba un cuarto ocupante, siendo éste Sebastián Piñera, quien no había logrado salir desde el helicóptero, quedando sumergido al interior del agua”.

La declaración la prestó -según el parte policial- ante el cabo Eduardo Vargas del Río y el cabo Cristopher Inostroza Yévenes, de la Tenencia de Carabineros de Lago Ranco, quienes llegaron al lugar tras recibir a las 14.57 horas de ese día un llamado desde la Tenencia de Futrono.

“Logramos salir”

Los tres sobrevivientes del accidente -Magdalena, la hermana de Piñera; Ignacio Guerrero y su hijo Bautista- optaron por entregar la misma declaración a Carabineros. Sólo cambiaron el orden en que salió cada uno del helicóptero, una vez que éste comenzó a hundirse en el agua.

“Siendo las 13 horas, abordamos el helicóptero de propiedad de Sebastián Piñera Echenique y realizamos un trayecto desde la casa de Sebastián, ubicada en el sector de Coique, de la comuna de Futrono, hasta la casa de José Cox, ubicada en el sector Ilihue de Lago Ranco”, comienzan en su declaración.

Los tres -que declararon en calidad de víctimas- continuaron relatando que “compartimos con esa familia alrededor de una hora aproximadamente. Siendo las 14.30 horas, los cuatro tripulantes abordamos nuevamente el helicóptero, para regresar nuevamente al sector de Coique”.

Los problemas empezaron inmediatamente. “Pero luego de despegar y al cabo de unos dos minutos en el aire, debido a la poca visibilidad que generaba la lluvia, nos elevamos unos 15 metros aproximadamente, buscando visibilidad y orientación con la orilla”, aseguraron.

Magdalena Piñera, sobreviviente del accidente.

Magdalena y los dos Guerrero explicaron a la policía uniformada que todo ocurrió rápidamente.

“De forma repentina, y al realizar el descenso, topamos con el agua del lago Ranco y por efectos de las aspas del helicóptero perdimos la estabilidad. Nos comenzamos a hundir en el agua”.

“Cada uno de nosotros se soltó el cinturón de seguridad. Pudimos abrir una puerta lateral izquierda y, en acción de sobrevivencia, logramos salir desde el interior del helicóptero”, continuaron en su relato, detallando el orden en que salieron de la aeronave: primero, Bautista Guerrero, luego Ignacio Guerrero y, finalmente, Magdalena Piñera.

Una vez a flote, “fuimos auxiliados por dos lanchas de vecinos de la familia Cox, que llegaron en ayuda al lugar del siniestro”.

En el parte policial, donde figuran estas declaraciones, se detalla que a las 16.10 horas de ese día, luego de que personal de Bomberos en conjunto con la Armada de Chile extrajeran el cuerpo del expresidente Sebastián Piñera, “este fue trasladado en la lancha institucional PM-2251 desde el sitio del suceso hasta la Tenencia de Carabineros Lago Ranco para su custodia y posterior peritaje”.

Asimismo, se revela que, aunque llegó personal del SAMU de la zona, “las tres víctimas sobrevivientes se negaron a la atención médica por parte del personal de salud en el lugar”.

El bombero rescatista

Ricardo Esteban González Delgado, de 27 años, constructor civil, voluntario de Bomberos de Lago Ranco, fue el rescatista del cuerpo de Sebastián Piñera.

En su declaración a Carabineros, González aseveró que a las 14.49 horas del martes 6 de febrero, él estaba en su lugar de trabajo, en el departamento de obras de la Municipalidad de Lago Ranco, “cuando recibí un comunicado radial de la central de alarmas de esta comuna, indicando que existía una emergencia de rescate aéreo en el sector de Ilihue Bajo”.

“De forma inmediata -relató- fui hasta la Segunda Compañía de Bomberos, para equiparme y salir a la zona de la emergencia”.

Una vez llegado al lugar, González declaró que “constaté que se trataba de un helicóptero que había capotado en las orillas del lago Ranco, con cuatro ocupantes en su interior, de los cuales tres habían logrado salir por sus propios medios”. Sin embargo, “un cuarto ocupante, al parecer el expresidente Sebastián Piñera, se encontraba desaparecido, con altas probabilidades de estar sumergido en el agua, según la información que proporcionaron los otros ocupantes”.

Inmediatamente él, junto a su equipo de bomberos, “comenzamos a preparar la zona”. Así, realizaron “un sondeo con la embarcación de la Armada -la lancha institucional PM-2521-, logrando identificar el punto” donde se había hundido el helicóptero.

Embarcaciones que trabajan en la extracción del helicóptero en el que falleció el expresidente Sebastián Piñera.

Después de eso, relató, “arrojamos un peso muerto al agua con una cuerda, para posteriormente realizar un descenso de aproximadamente 28 metros de profundidad”.

Una vez inmerso en el agua, cuando “logré descender hasta el fondo del lago, observé el helicóptero sumergido”. Y luego vio que, “a un costado de éste, a una distancia aproximada de 50 centímetros, se encontraba un cuerpo en posición de cúbito abdominal (boca abajo), que correspondía al expresidente Sebastián Piñera”.

González aseveró que “lo pude reconocer y lo tomé de uno de sus tobillos, con el fin de llevarlo a la superficie”.

“Una vez que llegué con él a la superficie, fui ayudado por mi colega Álvaro Riquelme Quijada, para subir el cuerpo a la embarcación de la Armada”, terminó.

Días después, en conversación con La Tercera, Ricardo González dijo que “la extracción (del cuerpo) no fue compleja, ya que las condiciones climáticas, la temperatura, el agua, el viento, la profundidad y el sondeo eran favorables para hacer un buceo libre”.

La aeronave, en tanto, fue reflotada cinco días después y sigue en peritaje para saber las causas del accidente.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.