Carolina Podlesker, integrante de la campaña de Patricia Bullrich: “Va a haber un electorado de Juntos por el Cambio tremendamente dividido”

Fue una noche que la dejó cansada, agotada, desilusionada. De todo un poco, admitió Carolina Podlesker, exjefa de gabinete de la Secretaría de Seguridad de la Nación durante la gestión de Patricia Bullrich en el gobierno de Mauricio Macri. La politóloga fue parte de la campaña presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), que este domingo sufrió un duro revés en las elecciones presidenciales de Argentina.

Su candidata, Patricia Bullrich, quedó fuera del balotaje, y por un gran margen. Con poco más de 9,6 millones de votos, el ministro de Economía, Sergio Massa, dio la sorpresa al lograr el 36,68% del total. Javier Milei se desinfló al lograr un poco menos de votos que los que había conseguido previamente en las primarias, obteniendo 7,8 millones de apoyos y el 29,98%. En tanto, Patricia Bullrich solo perdió sufragios al comparar la suma de sus votos en primarias más los de su rival, Horacio Rodríguez Larreta. Este domingo alcanzó poco más de 6,2 millones de respaldos, equivalentes al 23,83% del total.

Usted trabajó en la campaña de Patricia Bullrich. ¿Cómo fue, en la interna, ese trabajo de dos meses hasta la elección del domingo?

Hubo que redireccionar la campaña. Primero, nuestro gran objetivo era ganar la interna, lo que estaba clarísimo dentro del PRO. Después, claramente hubo un resultado que fue sorpresivo, que fue cuando salieron los resultados de La Libertad Avanza, que quedó primero en el total nacional en agosto; pero nuestra primera meta, que era ganar la interna (ante Horacio Rodríguez Larreta) se consiguió ampliamente, y era inclusive lo que veíamos en territorio. Ese 2 a 1 que se dio en las elecciones se sentía también en la calle. Y superado eso, había que rediseñar la campaña, pero también con un elemento nuevo, que era redefinir cuál era el mensaje. Claramente, había una sociedad, sobre todo en lo que respecta a nuestro electorado, muy enojada, y que se evidencia también con lo que sucedió este domingo.

¿Afectó de algún modo la división de las primarias internas de Juntos por el Cambio?

Respecto a mi modo de ver, la figura de la interna política es un elemento muy valioso en una democracia, en un sistema de partidos. El tema es cómo es esa discusión, cómo se lleva adelante y hasta qué punto se sostiene. Creo que ahí nosotros perdimos mucho espacio. Y después, de cara al resultado de ayer (domingo), al peronismo le fue bien en lo que saben realmente hacer. Tienen una gran habilidad territorial, estando inclusive ellos en el poder, por lo cual tienen las herramientas, y la gran mayoría de los argentinos nos escarmienta.

Si se sumaran los votos de Juan Schiaretti (6,78%), Patricia Bullrich quedaba muy cerca del balotaje. ¿Fue un error no incluirlo en las primarias, como pidió Horacio Rodríguez Larreta?

Esto requiere, de acá en adelante, un replanteo y una reconfiguración de un montón de cosas. No sirve el pensar: “bueno, podríamos haber hecho tal cosa”, o “tendríamos que haber hecho tal cosa”. Los recursos se tomaron y utilizaron por un camino y con una decisión en mente. Sí creo que, si bien las internas son positivas, todavía el electorado en la Argentina no las entiende, o nosotros no supimos llevar el mensaje para que se entiendan, por lo cual fueron muy desgastantes. Se fueron perdiendo votos y energías en todo sentido, inclusive en la campaña. Es muy desgastante la interna, además de divisora. Por una parte, no solo tienes líneas de comunicación y de trabajo diferentes, sino que después, cuando tienen que unificarse esos equipos, también tiene que haber una nueva reconfiguración y el tiempo es muy corto. Me parece que hay que hacer un análisis respecto de un montón de cosas, no solamente desde lo político, sino también desde la estructura, y después pensar hacia adelante. Nosotros tenemos una bandera que es la de oponerse a la corrupción, respetar los valores de la Constitución nacional y de la libertad entendida dentro de esa Constitución. Eso no se abandona, pero claramente vamos a tener que reconfigurar un montón de cosas.

También se han escuchado críticas a Mauricio Macri por el resultado...

A ver, creo que críticas puede haber a todos, ¿no? No perdió uno solo, perdimos todos. Y todos perdimos la oportunidad también, entonces, no sé si tiene un nombre y apellido. Me parece que acá hay responsabilidades compartidas de todos quienes han formado parte de lo que es la estructura, sin poner nombre y apellido a nada. Unos porque hicieron de más, otros porque hicieron de menos, otros porque hicieron el camino contrario, pero me parece que es apresurado, hoy, decir que la responsabilidad está puesta solamente en una persona. En mi opinión personal, Mauricio Macri es un gran líder del espacio. Inclusive sucede que, cuando uno lo tiene en los actos, enseguida es quien más ovaciones se lleva, además de ser quien formó su partido. Yo formo parte del espacio desde el 2001, uniéndome justamente al PRO, cuando todavía no era PRO, cuando arranca Mauricio con este objetivo, por lo cual para mí es un gran referente. Eso sí, creo que el espacio tiene que evolucionar y buscar nuevos líderes, y esos líderes que han estado con tanta presencia, sí tienen que definir cómo acompañan. Pero no pondría nombre a un responsable, creo que hay que hacer un análisis de responsabilidades compartidas.

Así como las internas generan roces, también lo hacen las primeras vueltas. Milei y su gente trataron de “asesina” y “terrorista” a Patricia Bullrich…

No, una locura. Pero a mí lo que más me alarma de esa actitud es el estado de la sociedad argentina, porque claramente él buscó tener capacidad de daño y la consiguió, sin ninguna duda. No estamos en condiciones de seguir en ese estado de violencia dentro de la sociedad, porque la realidad es que solamente nos afecta a nosotros. Lo vemos inclusive en situaciones muy simples, como la falta de respeto en la calle. Me parece que, y de nuevo a título personal, el nivel de desesperanza que deja esta elección es muy alto.

Ahora el propio Milei deberá salir a buscar los votos de JxC. ¿Cómo cree que el votante de la coalición va a dirimir entre esa dura decisión de elegir por Massa, Milei o el voto blanco?

Ambos van a tratar de disfrazarse un poco con carita de Juntos. Hay un punto que es claro, que es el que nuestro espacio pelea contra la corrupción, y Massa es corrupción. Yo no sé cómo va a ser Massa para intentar convencer al bloque tras su “plan platita”, los escándalos de corrupción que están saliendo de la luz y todos los que están por venir. Pero bueno, va a haber un electorado de Juntos por el Cambio tremendamente dividido. Tremendamente dividido. Eso se suma a que en la actual elección hubo decisiones de último momento en JxC que afectaron a nuestro propio electorado, que también han votado en blanco ahora. Eso es algo que también deberemos analizar, el qué pasó con nuestro electorado que no nos votó del todo.

¿Pensando en que, aparentemente, no todo el voto de Rodríguez Larreta se fue con Bullrich?

Sí, sí. La división con Larreta, no poder capturar determinados mensajes, no ser claros inclusive con las decisiones que se han tomado en el Congreso, en las últimas sesiones que hubo, etc. Patricia siempre sostiene que esto es un tema de convicción, cosa con la que coincido al 100%. Política no se puede hacer sin convicción. El tema es cuál es esa convicción que tenemos. En ese sentido, yo recontraapoyo su mensaje, pero también hay que explicarlo, porque la gente no entiende. Por un lado, tienes la habilidad muy fuerte del peronismo para enmascarar decisiones. Esto de: “Le bajamos el impuesto a la ganancia a todos los argentinos”. Eso no es real. Pero del otro lado no hay una oposición lo suficientemente ordenada, y ahí juega la interna, como para salir y sostener que eso no es real y que uno vota diferente por tales razones. Por eso me parece que el tema de la interna no es solamente si afectó desde el lado de lo político, sino incluso también en la toma de decisión y cómo somos una unidad para ir contra este peronismo, por lo cual queda mucho por analizar.

También se está hablando de un posible quiebre dentro de la colectividad Juntos por el Cambio. ¿Se puede hablar de un quiebre realmente, o es un análisis externo más bien?

No, yo no lo creo. Si uno piensa en los distintos distritos, tanto a nivel nacional como provincia de Buenos Aires, claramente se va a tener que reconfigurar. Recién estaba mirando los resultados que hubo en las intendencias, en las provincias, y uno se pregunta dónde está el líder, ¿cierto? Porque claramente va a haber una reconfiguración de liderazgos que no va a ser de un día para el otro, pero sí que tiene que volver a surgir. Claramente, Patricia es la presidenta del partido y hay un liderazgo fuerte y fue nuestra candidata. Yo evidentemente tengo en línea directa, o sea, me pliego a ella, pero esta elección sí nos posiciona en una situación en que debemos preguntarnos cómo se reconfigura el bloque hacia adelante, y cuáles son los liderazgos que aparecen. Pero va más allá, incluso hay que pensar en el rol de la alianza. Yo estoy hablando mucho desde el PRO, pero hay que también hacer un análisis respecto de la alianza: los lugares que va a ocupar, qué rol tiene el radicalismo, responsabilidades, etc. Me parece que acá, por eso vuelvo a mis palabras previas, es aventurado ponerle nombre y apellido a una sola persona o a un solo espacio, pues creo que acá hay un análisis de responsabilidades compartidas que nos llevaron a este resultado con, del otro lado, una habilidad, justamente, para capturar el voto y el territorio que tiene el peronismo de hoy y de décadas. Y estando en el poder, ni más ni menos.