Cecilia García-Huidobro, directora del Museo Violeta Parra: “Es una pena que Isabel Parra no haya estado en las últimas sesiones de directorio: jamás nos llegó su planteamiento"
Ante las críticas de Isabel Parra al manejo del museo incendiado el viernes, su directora responde. Dice, por ejemplo, que había sido cerrado, pues la Asociación Chilena de Seguridad tomó esas medida y además argumenta que una de las actividades sugeridas por la hija de Violeta Parra costaba un millón de pesos.
Tras el incendio que afectó al Museo Violeta Parra el viernes pasado, Isabel Parra dijo ayer a La Tercera PM que no estaba de acuerdo con el manejo que había tenido la institución desde el estallido social del 18 de octubre. Si bien la obra de la artista no fue dañada por el fuego debido al resguardo que se hizo en noviembre, el espacio ha debido tomar un rol diferente considerando su ubicación a sólo metros de Plaza Italia.
El Museo Violeta Parra permaneció cerrado en los últimos meses y, en opinión de Isabel Parra (que es vicepresidenta de la Fundación Violeta Parra, organismo del que depende el museo), debería haber estado más abierto al clima social y político que se vive. Señalaba, por ejemplo, que ella y su hija Tita hicieron "una sanación" del museo en noviembre, sin embargo les habría gustado hacer más actividades.
"Hay una directora (Cecilia García-Huidobro) con la que no coincidimos en la forma en que había que poner a Violeta Parra dentro de esta crisis", señaló Isabel Parra a La Tercera. Directora ejecutiva del espacio desde 2016, Cecilia García Huidobro, se refiere a los dichos de la hija de Violeta Parra y explica cómo ha tenido que funcionar el museo durante el último tiempo.
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Fachada Museo Violeta Parra, tras el incendio del viernes pasado. Foto: Rudy Muñoz.[/caption]
Isabel Parra ha dicho no coinciden con la dirección del Museo Violeta Parra ¿Qué opina de aquello?
Ella es miembro del directorio. Fue Isabel junto con su hermano Ángel quienes hicieron esta generosa donación a los chilenos, quienes estuvieron a cargo de la construcción del museo y también la institución que la administraría. La institución tiene un directorio que fija todas las directrices, por lo tanto todo se resuelve en sesiones de directorio. Es una pena que ella no haya participado el último tiempo: es ahí donde se plantean ideas, propuestas y jamás nos llegó su planteamiento. Sobre la sanación que ella menciona, quiero decir que el presupuesto que nos llegó de un millón de pesos para aquello excede absolutamente las posibilidades del museo. Nosotros administramos recursos públicos y nuestra obligación es velar por el buen uso de ellos. Además, este es un museo que está clausurado por la Asociación Chilena de Seguridad: nos habían dejado solamente una oficina. Con todos los vidrios rotos, sin electricidad, cómo puede hacerse una actividad que está en un espacio clausurado al público. No es que no quisiéramos hacer actividades en el museo, sino que nosotros nos desplegamos en otros territorios del país.
¿Hubo diálogo con Isabel Parra durante este tiempo?
Yo he estado todos los días en el museo, incluso los fines de semana. Así que cuando Isabel Parra ha venido, por supuesto me he justificado con ella. Pero yo insisto, que esto no es una personalización. Puede haber diferencias y me parece natural, especialmente en los momentos que estamos viviendo. Aquí lo que importa es el legado y la obra de Violeta Parra y yo no quisiera que se personalizara como algo institucional porque no es así.
¿Qué futuro le ve al museo ante este eventual quiebre? ¿Cómo ve una posible restauración?
No hay un quiebre, pues la institución permanece. El trabajo es arduo, estamos en contacto con el arquitecto, pero en este minuto pensar en una reconstrucción aquí en este lugar se ve muy difícil. Es el directorio el que tendrá que resolver: ellos podrían decidir llevarlo a otro lugar, podrían decidir disolver la fundación, etc. Pero por el momento lo que estamos haciendo y también con el apoyo del ministerio, es sacar exposiciones itinerantes, sacar talleres, llevar conferencias, o sea desplegarnos por el territorio, porque si bien las paredes del edificio están quemadas, el museo está vivo. El legado de Violeta Parra va mucho más allá de las paredes de este museo.
¿Cómo cree que se puede proteger el patrimonio cultural en estos tiempos de crisis?
En el Museo Violeta Parra se tomó la decisión de resguardar las obras en un lugar seguro. Tenemos un largo desafío: el legado va mucho más allá y se desplegará, como hasta ahora, por los territorios mediante talleres, exposiciones, conciertos, etcétera, con especial énfasis social. En general, las instituciones están todas coordinadas y trabajando juntas, porque en este minuto los problemas si bien tienen matices, son iguales para todos. Sabemos que tenemos una responsabilidad tremenda de mantener los patrimonios, obras y espacios de la ciudadanía.
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