De Mejor de América a despreciado: nadie quiere a Matías Fernández

"Estuve conversando con él, tiene contrato con el club y es un tema que tendrá que ver con la dirigencia. Desde el punto de vista deportivo, le comuniqué que ya tenemos los cuatro cupos de extranjeros y que no había posibilidades, tendremos que ver cómo se arregla eso". Así, Julio Comesaña, el veterano entrenador de Junior de Barranquilla, le puso la lápida a Matías Fernández, quien llegaba hace cinco meses como el gran refuerzo de la temporada en el fútbol colombiano. Un duro presente.

El otrora mejor jugador de América disputó 11 partidos con la camiseta del Tiburón, convirtió un gol y dio otra asistencia, cifras muy lejos de las que esperaban los aficionados y el propio entrenador del actual monarca del fútbol cafetalero. Y a pesar de que ilusionó en el comienzo, su aporte se diluyó y eso mismo hizo que en su club busquen la fórmula de terminar el vínculo que lo liga hasta fin de año. De la recepción de crack que le brindaron los hinchas cuando llegó a la ciudad, no quedan ya ni rastros. Hoy es pura indiferencia.

Mientras se encuentra una salida que satisfaga a las partes, el nombre del volante se asocia a Colo Colo, como cada vez que ha surgido alguna opción de que el calerano cambie de club. Incluso, Umbro, el nuevo proveedor de la indumentaria del Cacique, publicó en sus redes sociales un video con las mejores jugadas de Mati y un sugerente mensaje: "Qué bien le queda la 14 blanca al Mati, comenta #14 si piensas igual que nosotros". A pesar de eso, esta vez no existe la disposición de Blanco y Negro para recibirlo y en la firma deportiva evitan referirse al tema.

Pese a su estilo reservado, un sello característico a lo largo de su carrera, en estos días ha intentado mandar señales al Monumental. En su entorno, que siempre lo protegió de los medios, reconocen que su único deseo es vestirse de blanco. Claro, sus últimas campañas en México y Colombia le quitan espacio de maniobra en el extranjero. De hecho, las lesiones que ha padecido en el último tiempo, una de las cuales le abortó un traspaso a la MLS, también juegan en su contra. Por eso, Colo Colo hoy asoma como la única salida viable para no quedar en el camino.

Pero en Colo Colo no miran con buenos ojos. Dentro del club explican que existen varios factores para que no se concrete la llegada del 14. El primero es que no está en los planes de Mario Salas, ya que el DT siente que ese puesto está bien cubierto. "No vamos a traer a un jugador por traer", advierten en ByN. Además, su alto costo económico (US$ 180.000 mensuales cobra en Colombia) hace muy improbable su regreso a Macul. "La situación del club no está para desembolsar cifras tan altas. Incluso, en caso de una venta de Esteban Pavez, o en el caso de que el mismo Matías baje sus pretensiones", señala un director de la concesionaria.

La llegada del exmundialista ni siquiera se ha discutido en la mesa. "La gerencia deportiva no ha presentado al directorio ninguna propuesta para que Matías Fernandez se incorpore a Colo Colo", explica otro integrante de ByN.

Y justamente una de las razones de que Mati no pase el filtro de Marcelo Espina es el Plan 60/40, que apunta a alcanzar un 60% de jugadores de la cantera para 2025, el año del centenario del club. En ese sentido, la llegada de un jugador de 33 años se contradice con el discurso del Cabezón en esta materia.

Aparte de que hay muchas dudas sobre la condición física de Fernández, en Macul temen que el volante traiga de regreso algunos fantasmas del pasado. "Perfectamente podría pasar lo mismo que ocurrió con Lucas Barrios. Sabemos que la gente se quedó con la imagen del jugador que se fue de Colo Colo hace 12 años, pero Matías ya no ese es jugador", afirman en el Monumental, donde, eso sí, valoran sus cualidades humanas. "Es una gran persona en todo sentido", afirman. Lo que pasó con Humberto Suazo hace algunos años también está latente. Incluso el jugador terminó demandando a la concesionaria por despido injustificado, tras su conflicto con el entonces técnico José Luis Sierra.

Matías apareció el domingo en la final de la Copa América, donde tuvo la misión de entregar el trofeo de campeón, en una muestra clara del respeto que se ganó en la cancha. Mientras tanto, en su entorno optan por el hermetismo y solo se limitan a decir que sus agentes están trabajando en varias posibilidades. Sin embargo, su vuelta a Colo Colo parece una quimera. Y las puertas en otras ligas se le cierran de par en par.