El Colorado critica sentencia que favorece a La Parva en disputa por terreno: acusa a tribunal de actuar bajo "capricho"

Ayer jueves El Colorado -de propiedad de la familia Leatherbe- presentó ante el 17º Juzgado Civil de Santiago un recurso de apelación en contra de la sentencia que le ordenó retirar el andarivel La Copa y todas las instalaciones que se encuentran sobre una franja de terreno contigua a su vecina La Parva, controlada por Leonidas Vial.

En el escrito que consta de 41 páginas, El Colorado se lanzó con todo en contra de la sentencia de la magistrada Rocío Pérez Gamboa. "La sentencia no realiza esfuerzo intelectual alguno para justificar su adhesión a las conclusiones del perito, como si la sana crítica a la cual debe apegarse para su valoración probatoria, constituyera una forma de antojo o capricho", cuestionó la sociedad administrada por Andacor S.A.

En enero de 2016, La Parva demandó a El Colorado por la ocupación ilegal de un paño, cuya superficie total alcanza 40.290 metros cuadrados. En su recurso de apelación, El Colorado argumentó que la única prueba que sostiene las pretensiones de La Parva lo constituye un informe pericial, al cual la sentencia definitiva se remite sin análisis dándolo por cierto sin justificación racional alguna.

La firma incluso fue más allá y acusó a la propia magistrada que redactó la sentencia de no leer dicho informe. "Tal es la ausencia de una lectura crítica del informe pericial, que en el considerando 30º de la sentencia, leemos que dos informes técnicos coinciden en sus resultados y avalan la opinión de la demandante, refiriéndose implícitamente al informe del Sr. Álvarez Telechea acompañado como instrumento privado junto a la demanda, y sugiriendo que éste informe sería "coincidente" con el del Sr. González, lo cual es absolutamente falso", acusó en su escrito El Colorado.

La disputa entre La Parva y El Colorado surge en 2008, cuando el centro de la familia Leatherbe comenzó la edificación del andarivel La Copa, que cuenta con una capacidad para transportar a 1.300 personas en el terreno en disputa.

Según los antecedentes del juicio, en el verano 2008- 2009, las partes comenzaron las primeras conversaciones sobre la discrepancia y dudas del trazado del límite que Andacor había dado a sus dominios y a la posibilidad de que las instalaciones estuviesen fuera de su propiedad.

Por lo mismo "no podemos hablar de una posesión material prolongada, sin reclamos o divergencias, o pacífica, puesto que lo cierto es que ambas partes desde años antes de este litigio ya reconocían los problemas y reclamaban", remató la jueza en su fallo.