Ómicron, la contagiosa variante del Covid-19, nubló el inicio de 2022 en el mundo. La pandemia, lejos de estar cerca de su fin, golpea nuevamente a los países, que han debido revivir una serie de restricciones sanitarias para hacer frente al virus.

Una serie de naciones han superado los récords de contagios establecidos en las primeras oleadas del virus, lo que refleja el duro escenario de las próximas semanas. Esto ha llevado a que algunos gobiernos europeos, como el de Austria, Italia y Grecia, avancen en la vacunación obligatoria para sus ciudadanos, con multas para quienes se opongan, en un intento desesperado de las autoridades por elevar la tasa de los inmunizados para prevenir colapsos en los centros asistenciales.

Hace un mes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) aprobó de urgencia la más reciente vacuna contra el coronavirus. Se trata de Novavax, inmunizante de origen estadounidense, que se suma a la lista integrada por Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca, Janssen, Sinopharm, Sinovac, Covovax y Covaxin.

Los laboratorios aceleran la producción de las vacunas para compensar la escasez de las dosis en continentes como África y para alcanzar a cumplir con los acuerdos pactados con países que están ad portas o ya iniciaron la administración de la cuarta dosis en la población, como es el caso de Israel y Chile.

En un cruce de datos a 11 países, tres aspectos son claves para entender el impacto de la pandemia: la cifra de fallecidos, la tasa de inmunización y las vacunas utilizadas en las personas.

El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE.UU. confirmó esta semana que ómicron es el responsable del 99,5% de los nuevos casos positivos registrados en los últimos días en el país. Estados Unidos sigue siendo la nación más afectada por la pandemia y a la fecha alcanza 68 millones de casos, con 877 mil fallecidos por el virus.

De acuerdo con Our World in Data, sitio que recopila información oficial de los gobiernos sobre el Covid-19, el 15 de enero, el país superó el récord de 200 mil contagios nuevos diarios registrado en junio pasado, al sumar más de 800 mil infectados en 24 horas.

En el proceso de vacunación, para el que utilizan mayoritariamente Pfizer, pero también los inmunizantes de Moderna y de Janssen, un 75% de la población recibió al menos una dosis de la vacuna, lo que corresponde a 249 millones de personas, y un 62,5% completó el esquema, lo que significan 207 millones de ciudadanos.

A diferencia de la mayoría de los países, Reino Unido está dando pie atrás a las restricciones. El primer ministro Boris Johnson señaló hoy que más del 90% de los adultos mayores de 60 años recibieron las dosis de refuerzo y que los expertos aseguran que la ola de ómicron alcanzó su peak a nivel nacional.

Por ello, Reino Unido asumirá una ruta distinta a la de Europa y suspenderá desde el 27 de enero los pases obligatorios de Covid-19, el uso de mascarillas, la promoción del teletrabajo y otras restricciones.

Los británicos alcanzan más de 15 millones de casos de coronavirus y 152 mil víctimas fatales. Un 76,4% de los habitantes tienen una dosis de la vacuna, o sea, 52 millones de personas están protegidas de forma parcial y un 70% tiene todas las dosis prescritas, lo que corresponde a 47 millones de británicos.

Según la BBC, durante el año pasado el país dejó de administrar AstraZeneca a los menores de 30 años, y también utilizan vacunas de Pfizer y Janssen. Las tres requieren dos dosis obligatorias.

Ante el embiste de ómicron, la Unión Europea (UE) respaldó el cambio de estrategia frente a la pandemia impulsada por España, país que empezará a supervisar el Covid-19 como un resfrío común para dejar de contabilizar los casos y testeos. El gobierno de Pedro Sánchez es el noveno más afectado en el mundo por la pandemia, con 8,5 millones de casos y 91 mil fallecidos.

El Ministerio de Salud informó que un 86,6% de los españoles recibieron al menos una dosis de la vacuna, lo que significa 40 millones de personas, mientras un 81% terminó el esquema de inmunización, lo que se traduce en 38 millones de habitantes. En sus campañas de vacunación utilizan tres tipos de fármacos: Pfizer, Moderna y AstraZeneca.

En un salto epidemiológico que complica a la administración de Olaf Scholz, Alemania alcanzó en las últimas 24 horas más de 112 mil nuevos casos y 239 fallecidos, en comparación al día anterior, que informó 74 mil infectados y 193 muertos. En total, el país supera los ocho millones de contagios y 116 mil decesos por el virus.

De acuerdo con Our Word In Data, 62 millones de alemanes recibieron al menos una dosis de la vacuna, lo que significa un 74,5%. En tanto, un 72,2% finalizó el esquema inicial de dos inoculaciones, o sea, 60 millones de personas.

El Instituto Robert Koch sostiene que, desde 2021, la vacuna que más se administró en el país fue la de Pfizer-BioNTech, ya que es una empresa de biotecnología alemana que trabajó en conjunto con el laboratorio estadounidense. Más atrás aparece el uso de Moderna, AstraZeneca y Janssen.

En las últimas horas, Francia reveló que ómicron sigue avanzando a paso fuerte y quebraron el récord tras superar 464 mil casos positivos y 373 fallecidos en un día, dando un total de 127 mil muertos desde el inicio de la pandemia. En un intento por acallar las manifestaciones antivacunas, el Ejecutivo galo aprobó una ley que limita las actividades para las personas sin inmunización y ya no podrán acceder a espacios de entretención con un test negativo al virus.

Desde el inicio de la campaña de inmunización, los franceses han preferido utilizar la vacuna de Pfizer, con más de 100 mil dosis administradas, seguidos de Moderna, con 21 millones de dosis; AstraZeneca, con 7,85 millones de dosis, y Janssen, con más de un millón. Esto permite tener a un 79,3% de la población con al menos una dosis y un 75% está completamente inoculada.

El mayor epicentro de coronavirus en América Latina sigue siendo motivo de preocupación. Brasil informó más de 130 mil nuevos casos en 24 horas, el peor día desde la llegada del virus, siendo resultado de la rápida propagación de ómicron y las fiestas de fin de año. La nación de más de 214 millones de habitantes mantiene 23 millones de casos y bordea las 622 mil víctimas fatales por Covid-19.

Los expertos han advertido al gobierno de Jair Bolsonaro que en febrero el país alcanzará un peak, que podría revivir el peor escenario cuando en abril pasado registraban 3.000 muertos diarios. Los niveles de vacunación mantienen su ritmo, un 78% de la población -167 millones de personas- cuenta con una dosis de la vacuna y un 68% -147 millones- finalizó el esquema de dos dosis. De acuerdo con la página gubernamental, la vacuna más utilizada en el país es la china Sinovac, seguida por AstraZeneca, Janssen y Pfizer.

El temor a ómicron se volvió la motivación para que los argentinos acudieran en masa a los centros de inoculación. El gobierno de Alberto Fernández informó que entre la primera semana de diciembre y la primera de enero, la aplicación semanal de vacunas aumentó un 38%, dando un total de 85% de los habitantes -39 millones- con al menos una dosis y un 74% -33 millones- con el esquema de dos dosis, mientras avanzan en la de refuerzo.

Argentina fue uno de los pioneros en Occidente en firmar contratos con la vacuna rusa Sputnik V del Centro Nacional Gamaleya, pero además están aplicando los inmunizantes Covishield, Sinopharm, AstraZeneca, Moderna, Convidecia (CanSino), Comirnaty (Pfizer). Hasta ahora, el país alcanza 7,3 millones de contagios, que han dejado como resultado 118 mil fallecidos.

Después que el Presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, confirmó su segundo contagio de Covid-19 a inicios de este año, el gobierno lanzó la campaña de inoculación de refuerzo para los docentes con el objetivo de preparar el retorno a clases y para utilizar la donación efectuada por EE.UU. de 2,7 millones de dosis de Moderna.

Hasta ahora, el país -sin decretar cuarentenas o cierre de fronteras- registra 4,4 millones de casos positivos, con más de 50 mil nuevos contagios en el último día, totalizando más de 301 mil fallecidos. A un paso más lento que sus vecinos latinoamericanos, un 63,7% de los 128 millones de habitantes del país lograron recibir al menos una dosis de la vacuna y un 58,2% tienen el esquema completo. La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de México utiliza los fármacos de Pfizer, AstraZeneca, CanSino, Sputnik V, Sinovac, Covaxin, Janssen, Moderna, Sinopharm y desde fines del año pasado aprobó el uso de Abdala, un inmunizante cubano.

Con una población de casi 150 millones de habitantes, Rusia observa con atención la variante ómicron, que significó una rápida alza de contagios, tan solo en la jornada de ayer el país detectó casi 34 mil nuevos infectados, la cifra más alta desde noviembre pasado, y registró 698 fallecidos, dando un total de casi 11 millones de casos y 323 mil muertos a nivel nacional.

Aún siendo un país productor de vacunas, que sorprendió al mundo en agosto de 2020 cuando el Ministerio de Salud presentó la Sputnik V y meses después la monodosis Sputnik Light -que le ha permitido a Rusia entregar más de 80 millones de dosis a distintos países en 2021-, el fármaco no goza de total popularidad en su país de origen. Tan solo un 51% de la población -75 millones- recibió al menos una dosis de Sputnik V y un 47% tiene el esquema de ambas dosis, esto es unos 68 millones de personas.

Después de que el país alertó 27 mil infectados en un día y Tokio informó más de siete mil nuevos casos hoy, el gobierno nacional emitió nuevas pautas sanitarias y desde este viernes la capital y 12 prefecturas entrarán en una especie de estado de emergencia, que se extenderá hasta el 13 de febrero. Según CNN, esta normativa permite que los gobernadores limiten las horas de funcionamiento de restaurantes y centros de entretención para frenar la movilidad de la gente.

Japón está cerca de superar los dos millones de contagiados desde el inicio de la pandemia y con los recientes 10 fallecidos de ayer totalizan 18.444 decesos por el virus. Los países asiáticos alcanzan una mayor tasa de vacunación en comparación con otros continentes. Así, un 80% de los japoneses -101 millones de personas- tienen al menos una dosis administrada y un 79% completó el esquema, o sea, unos 99 millones de habitantes. De acuerdo con el gobierno japonés, a la fecha la mayoría de las dosis administradas pertenecen al laboratorio Pfizer, con 86 millones de dosis, y Moderna, con 5,9 millones.

El gobierno surcoreano no titubeó la semana pasada al informar que extenderán las restricciones pandémicas por otras tres semanas y los datos epidemiológicos de hoy le dieron la razón. Según The Korea Herald, los contagios diarios superaron los cinco mil por primera vez en 20 días, mientras que alertaron que uno de cada cuatro pacientes está infectado con ómicron.

A nivel nacional, hay 705 mil casos positivos de Covid-19 y casi 6.500 fallecidos por el virus. Los niveles del coronavirus se habían mantenido controlados producto del alto porcentaje de inoculación en el país, un 86% -44 millones- recibió al menos una dosis de la vacuna y un 85% -43 millones- finalizó el proceso de inmunización. Los surcoreanos han recibido predominantemente el inmunizante de Pfizer, con 65 millones de dosis; AstraZeneca (22 millones), Moderna (21 millones) y Janssen, con 1,5 millones.