El “infierno” de los chilenos en Ucrania tras la ofensiva rusa
Las autoridades ucranianas han emitido un llamado a que los residentes busquen refugio y se mantengan en calma. Tres chilenos cuentan cómo están viviendo esta crisis.
La guerra ya fue declarada después de que las Fuerzas Armadas rusas irrumpieran hoy en el territorio ucraniano, principalmente a través de los enclaves rebeldes del este. El Presidente ruso, Vladimir Putin, anunció esta mañana una “operación militar especial” en la región de Donbas y las alarmas ya están encendidas tras la ofensiva militar.
Odessa es una de las ciudades ucranianas que han sido golpeadas por los ataques de Rusia, pero la situación en este puerto está funcionando “normalmente”, por ahora. “La ciudad sigue como nada, lo único destacable es que a eso de las tres de la tarde había grandes filas en las bencineras, pero la gente sigue trabajando y una parte de las personas están esperando a los rusos para entregarles flores”, menciona un chileno residente de la ciudad de Odessa, que prefirió no dar su nombre por motivos de seguridad.
Sebastián Silva, chileno que reside en la capital ucraniana, Kiev, coincide respecto de la situación en las ciudades. “Las personas hacen filas en los cajeros automáticos y supermercados, pero la gente aún tiene que ir a trabajar”, señala el estudiante de Ingeniería en Informática.
Las explosiones se escuchan a lo largo del país, pero en algunas zonas se han detenido. “En Odessa ya ocurrió lo que se propuso Rusia: destruir los objetivos militares. A las 11 de la mañana se sintió la última explosión, con base aérea, base antiaérea y regimientos destruidos, sin daños a la infraestructura civil y social”, destaca el chileno en Odessa.
La situación en la capital es de miedo e incertidumbre, muchos temen salir de la ciudad por temor a que puedan ser alcanzados por un proyectil ruso. “Estoy esperando instrucciones de las autoridades, el evacuar la ciudad está un poco peligroso por el tema de que está colapsada con autos, y los rusos pueden bombardear civiles. Las autoridades en Ucrania nos dijeron que hay que ir al Metro, que funciona como refugio, la estación Arsenalna es la más segura para ir, al ser una de las más profundas es ideal para estos momentos”, menciona Sebastián.
Aún se mantiene cierta normalidad en la capital ucraniana: “Me alegro al ver que el Ejército ucraniano está haciendo una buena defensa, la gente aún tiene que ir al trabajo y probablemente mi profe de matemáticas se va a enojar por no haber hecho el examen”, apunta el estudiante.
Algunos están tratando de comunicarse con las autoridades diplomáticas. “Estoy buscando qué hacer. Por ahora estoy tratando de hablar con la embajada de Chile para ver si me pueden ayudar”, menciona Fernanda Aedo, arquitecta chilena en Lviv, ciudad al oeste del país. La situación de emergencia ha afectado la entrada y salida al país. “La embajada ha estado en contacto por el tema de renovación de mi pasaporte, de hecho, yo tenía vuelo para hoy hacia Polonia, pero ya ves, se suspendieron los vuelos, no hay motivos para dejar el país”, apunta.
Por otro lado, el chileno residente en Odessa se muestra más relajado con la situación. “Haré lo de siempre, dentro de poco ya me iré a casa, almorzar y seguiré informándome de lo que ocurre. Lo que veo es tranquilidad absoluta, al menos en Odessa”, señala.
Del mismo modo, Silva pretende quedarse en Ucrania. ”Solamente si la situación lo permite me iré de aquí, pero no está en mis planes volver a Chile otra vez”, apunta.
La crisis actual del país pareciera que no tiene fin, pero el chileno en Odessa ve con optimismo el futuro, “todo estará bien muy pronto y el pueblo ucraniano podrá vivir una mejor vida junto a sus hermanos rusos, en paz y bienestar”.
La embajada de Chile en Polonia, que es concurrente en Ucrania, se ha estado poniendo en contacto con los chilenos en el país eslavo desde hace más de un mes. Hasta hoy, se habían registrado 45 compatriotas.
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