El lamento del fotógrafo brasileño que retrata la Amazonía: "Me siento indignado por tanta inconsciencia"

"Estuve allí y la vi. Y la fotografié. Soy un testigo presencial. La Amazonía es mi matriz creativa. Ya fueron más de 50 viajes y expediciones. No en avión, sino caminando, con mochila en las costas, en barco y de automóvil (...) Y ahora, con los acontecimientos recientes, estoy lleno de rabia. Es preciso elevar el tono". Con este texto, acompañado de una imagen en blanco y negro de la selva arrasada por el fuego, el fotógrafo brasileño Araquém Alcântara expresó así en su cuenta de Instagram su indignación frente a los incendios que afectan al pulmón verde del planeta.

Al día siguiente de este posteo, efectuado el 17 de agosto, Alcântara subió otra imagen a esa red social que rápidamente se hizo viral. El fotógrafo registró con su lente a un oso hormiguero (tamanduá-mirim) cuando huía de las llamas. "Salió arrastrándose a través de las llamas cerca de una carretera, este tamanduá-mirim, estaba ciego y con terribles quemaduras en su cuerpo", expresó el fotógrafo. "Mi indignación no cabe en Instagram", fue parte del texto que adjuntó a la imagen.

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Foto que Araquém Alcântara tomó de un oso hormiguero huyendo del fuego.[/caption]

Con 68 años de edad, Alcântara es uno de los precursores de la fotografía de naturaleza en Brasil y uno de los fotógrafos más destacados del país. "Desde 1970, se ha dedicado por completo a la documentación y protección de la naturaleza brasileña", destaca su sitio web. En su vasta producción se incluyen 54 libros, cinco premios internacionales, 32 nacionales, 75 exposiciones individuales e innumerables ensayos y reportajes para publicaciones nacionales y extranjeras. De hecho, es el primer fotógrafo en documentar todos los parques nacionales brasileños y producir dos ediciones especiales para la revista National Geographic. Además, es el autor de "TerraBrasil", el libro de fotografía más vendido en el país, actualmente en su duodécima edición.

En entrevista con La Tercera, Alcântara se refiere a la actual ola de incendios que afecta a la Amazonía y al impacto ambiental que está causando la deforestación de la selva brasileña.

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(Foto: Araquém Alcântara)[/caption]

Usted ha dicho que "la Amazonía es mi matriz creativa". ¿Cómo nació su interés por fotografiar la selva brasileña?

He estado fotografiando la Amazonía desde 1980. Tenía 10 años como fotógrafo y conocerla cambió mi vida. Desde entonces, fueron cuatro libros (uno de los cuales ganó el mayor premio de la literatura brasileña, el premio Jabuti en 2006), cientos de reportajes y decenas de exposiciones, cinco de ellas internacionales. Me transformé en un cantor de la mayor selva de la tierra.

¿Qué siente hoy cuando ve la Amazonía en llamas?

Me siento indignado y consternado por tanta inconsciencia. Entra un gobierno y sale un gobierno y, cada vez más, veo una Amazonía que se desfigura, que va perdiendo su cobertura original, dirigiéndose hacia un estado crítico que afectará todo el clima mundial.

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(Foto: Araquém Alcântara)[/caption]

¿A quién culpa por lo que le está pasando a la Amazonía?

Todos somos culpables. Solo ahora nos estamos despertando. Los científicos advierten del hecho que ella dejará de producir lluvia en los próximos 20 o 30 años si continúa la actual tasa de deforestación. Llaman a este estado como "sabanización", lo que significa menos árboles y más pequeños, poca evotranspiración forestal y, en consecuencia, menos lluvia, más desastres naturales. Un científico cercano me dijo que tendremos que convivir con una hecatombe por día.

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(Foto: Araquém Alcântara)[/caption]

¿Cree que la deforestación de la Amazonía es un proceso irreversible?

No. Alrededor del 80% de la Amazonía aún está conserva. Es posible revertir el actual cuadro con la paralización inmediata de la deforestación, a través de una gran moratoria, en la que se implanten políticas serias que traigan el desarrollo sustentable a los 20 millones de amazónicos que viven allí, inversiones sólidas en infraestructura, apertura a estudios científicos y la exploración y uso sustentable de las riquezas minerales que ella posee.