“Es hijo del líder de la CAM”: Gendarmería detalla los motivos para no trasladar a Pelantaro Llaitul a cárcel de Temuco

No sería un proceso fácil y así lo reflejaron los oficios y solicitudes del Juzgado de Garantía de Lautaro y Gendarmería. Esto, porque se trataba de la audiencia de formalización de Pelantaro Llaitul Pezoa, hijo de Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM). El menor del clan fue detenido el pasado 23 de noviembre, junto a otros cinco sujetos, por su presunta participación en dos atentados en dos fundos en Galvarino, Región de La Araucanía.

Si bien el control de detención fue el mismo 23, la audiencia de formalización fue ampliada hasta el 25 de noviembre. Mientras tanto, el menor de los Llaitul permaneció detenido en el centro penitenciario de Temuco. Una vez fue formalizado se lo trasladó hasta la cárcel de Valdivia a cumplir la medida cautelar de prisión preventiva. A raíz de aquello, tanto los detenidos como otros comuneros, entre los que se encuentra el mismo Héctor y Ernesto Llaitul -hermano de Pelantaro- han iniciado una huelga de hambre con el objetivo de ser enviados al centro penitenciario de la Región de La Araucanía.

Pero antes de que ingresaran al penal de Valdivia, ya había alertas sobre lo complejo que podría ser la formalización del menor de los Llaitul y sus compañeros de delito. Esto, porque a través de un oficio, el juez del tribunal aseguró que se “ha tomado conocimiento el día de hoy de los llamados públicos que circulan en redes sociales a reunirse y realizar manifestaciones en el Juzgado de Garantía de Lautaro el día de mañana 25 de noviembre de 2022″, por lo cual el magistrado fijó la audiencia de manera remota.

Luego de realizado el control de detención y mientras duraba la ampliación de la detención, el tribunal le ordenó a Gendarmería recluirlos en la cárcel de Temuco, específicamente al módulo de comuneros mapuches. Sin embargo, antes de que se decretara la prisión preventiva, el ente penitenciario ya había informado al juez que de decretar esa medida cautelar, esta no podría ser cumplida en Temuco, debido a que ese recinto no cumplía las condiciones de seguridad para internos de su perfil. El 25 de noviembre, el tribunal determinó 120 días de investigación y precisamente esa medida cautelar para todo el grupo en la cárcel de Valdivia.

Para solicitar que el tribunal accediera que Pelantaro fuera trasladado a Valdivia, Gendarmería entregó una serie de razones por las cuales justificaba el uso de ese penal. El primer motivo, señalan, es que en el penal de Temuco “la dependencia de población especial de etnia mapuche actualmente no está habitable, ya que con fecha 6 de septiembre de 2021 comenzaron los trabajos de remodelación para estas dependencias”.

Posteriormente, detalla las falencias en medidas de seguridad que el centro de Temuco tiene. Ahí sostiene que el ingreso de los imputados a esta cárcel “conlleva diversas situaciones de seguridad de alto riesgo de vulnerabilidad en seguridad (...) además no cuenta con un perímetro que mantenga en resguardo las inmediaciones de la unidad, alejando a la ciudadanía, manifestaciones y/o simpatizantes de la causa mapuche”.

A raíz de aquello, la institución le sugiere al tribunal “que los internos en detención y de connotación pública sean derivados al complejo penitenciario de Valdivia, que reúne las características especiales de seguridad penitenciaria y de población de alto riesgo”. Por eso, asegura que uno de los motivos es por la gravedad del delito, “la connotación de los mismos, el revuelo mediático que causa el conflicto mapuche y en especial el interno Pelantaro Llaitul, hijo del líder y miembro de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), conociendo el carácter que esta representa en la denominada ‘causa mapuche’, el poder de convocatoria y la capacidad de apoyo logístico externo con que cuenta este comunero mapuche”.

En un segundo oficio la institución cita dos normativas legales para que el traslado a Valdivia se concrete. La primera de ellas es la Ley Orgánica de Gendarmería, y la segunda es sobre un acuerdo de la Corte Suprema que instruye a los tribunales “que se abstengan disponer el ingreso de imputados a un centro penitenciario determinado, labor que corresponde a Gendarmería precisar e informar al tribunal”.

Lo anterior, porque ya se ha generado más de un roce entre la institución y tribunales. De hecho, el presidente de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (ANOP), Andrés Muñoz, se reunió recientemente con el presidente de la Corte Suprema, Juan Eduardo Fuentes, para plantearle las inquietudes debido a las decisiones que tomaban los tribunales y que afectaban a Gendarmería.

Muñoz, señala a La Tercera PM, que “ya se ha hecho habitual que los internos que están vinculados a la causa mapuche inician estas huelgas de hambre porque ya en el pasado les dio buenos resultados, el tema está en tal como lo habíamos planteado nosotros en distintas instancias, incluso en la comisión que investigó algunos hechos en la Cámara, nosotros señalábamos de que la resolución se había dictado el año 2021, que señalaba que si las huelgas de hambre se realizaban de manera pacífica no tenía ninguna consecuencia”.