“Hay que afectar las rentas criminales que aparentan ser legales”: los consejos de un policía colombiano para enfrentar el crimen organizado en Chile

Hasta Santiago llegaron este jueves representantes de 12 policías de Latinoamérica para formar parte del tercer encuentro de Interpol para América del Sur. La cita, que tiene como anfitrión a la Policía de Investigaciones de Chile (PDI), se desarrolla en seis reuniones para abordar diferentes materias delictuales, aunque la primera de ellas era algo que los investigadores denominan “un factor común” en la región: el crimen organizado.

Durante la serie de encuentros las policías de Argentina, Brasil, Colombia, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, además de Chile, compartieron su experiencia en el combate de diferentes delitos en sus países, fijando una serie de objetivos y compromisos para avanzar colaborativamente.

Uno de los funcionarios que participó y expuso la experiencia de su país frente a la criminalidad organizada, es el coronel Edwin Urrego, subdirector de Investigaciones e Interpol de la Policía Nacional de Colombia, quien conversó con La Tercera al cierre del encuentro y compartió las recomendaciones que -dice- también expuso durante el encuentro policial. Lo propio hizo Andrei Passos, general director de la Policía Federal de Brasil.

Así, en primer punto, Urrego destacó las principales estructuras criminales a las que actualmente hacen frente en Colombia: el Estado Mayor Central de la FARC y Segunda Marquetalia. Mencionó, igualmente, a “Plan del Golfo” y el “ELN”, y a otras bandas dedicadas al narcotráfico “que se apoyan estos grupos armados organizados para exportar sustancias de estupefaciente”.

Como expone el coronel de la policía colombiana, para lidiar con las bandas, en primer lugar, establecieron un “catálogo” de organizaciones en base a sus características, y también trabajan como una serie de organismos policiales en todo el mundo, principalmente con Estados Unidos, para bloquear transacciones de drogas.

Además de eso, explica Urrego, en Colombia se han centrado en la identificación de los bienes de estas bandas, ya que el principal objetivo de las organizaciones, sin importar en el escalafón de la cadena que se encuentran, es buscar a través del tráfico de drogas, de personas, de la minería ilegal, la extorsión y el secuestro, generar riqueza.

Por lo mismo, dice que han elaborado una estrategia “multicrimen”, la cual no sólo busca detener a los integrantes de las estructuras, sino que también “tenemos unas acciones dirigidas a afectar las rentas criminales y el flujo de activos ilegales, que al final llegan a los mercados, al sistema financiero, dando apariencia de legalidad a través del lavado de activos (...) Y sabemos que donde más les va a doler es cuando se ataquen sus finanzas”.

De ahí, entonces, la principal recomendación que hace Urrego a Chile: “No hay que concentrarse únicamente en la identificación de los actores criminales y los componentes orgánicos de las estructuras, que es muy importante, pero también hay que prestarle atención a las finanzas criminales, a las fuentes de financiación y a los flujos de los efectivos de capital a través del lavado de activos”.

“Todo ese producto de la renta criminal termina en el sistema financiero, termina en empresas fachada, termina en la compra de bienes a gran escala y que en últimas es la renta o es el objetivo que busca cualquier estructura y es enriquecerse, que es pues el que lleva a que esas estructuras cada día tengan más poder”, explica.

Por su parte, el general director de la Policía Federal de Brasil afirma que es “difícil hacer recomendación de un país tan estructurado, que tiene policías que actúan con altísimo nivel”.

Pese a eso, afirma que en su país también han buscado enfrentar con fuerza el poder económico de las organizaciones, “trabajando siempre en todas las investigaciones con el tema económico, buscando siempre quitar el poder económico de estas bandas, de estos grupos organizados. Y también alcanzar sus liderazgos para que estén en la cárcel y quitarles el poder económico”.

A juicio del jefe de la Policía Federal de Brasil, el crimen “no tiene fronteras”. Por lo mismo, recomienda fijar una “cooperación internacional muy fuerte”. “Creo que con estos tres ejes, de buscar el poder económico de las bandas, a sus liderazgos detenidos y cooperación internacional, tendremos un camino a correr y alcanzar los enfrentamientos de mejor calidad”, agrega.

Cooperación internacional que el representante de la Policía Nacional de Colombia destaca, ya que según afirma, el trabajo colaborativo que ha desarrollado Chile con el país cafetero durante el último tiempo ha permitido la detención del presunto autor del homicidio del funcionario de Carabineros en abril pasado en Quinta Normal, así como también más recientemente uno de los fundadores del Tren de Aragua, Larry Changa, apresado por la policía de ese país.

“Hubo un trabajo muy oportuno, rápido, pero eso se dio a través de la interacción, no solo un intercambio de información a través de un correo, sino el ‘face to face’, el hablar, el conocernos. Estos espacios son importantes porque nos permite fortalecer los lazos de cooperación, conocer los problemas y cómo podemos interactuar para podernos fortalecer”, concluye en coronel colombiano.

A juicio del coronel de la Policía Nacional de Colombia, existen algunos delitos y factores en común entre todos los países de Latinoamérica. Uno de estos, explica es el narcotráfico, aunque también apunta a la situación migratoria que afecta a la región y que influye en la aparición de bandas que buscan traficar personas. “Son problemas que nos atañen y que son comunes y que buscamos tener soluciones también comunes a través del fortalecimiento de los mecanismos de cooperación internacional”, señala Urrego.

Pero aquello, afirma, también ha influido en la llegada al país cafetero de bandas de origen extranjero. Al ya conocido Tren de Aragua, donde han logrado detener a una serie de integrantes, el coronel también apunta a que en su país hay presencia de otras bandas “como los carteles mexicanos, que han buscado hacer alianzas con grupos armados organizados precisamente para garantizar la llegada de las sustancias de estupefacientes a México con destino final los Estados Unidos”. En esa línea, agrega que también han detectado “algunas estructuras también de Brasil, también por temas de narcotráfico, algunas estructuras italianas”.

En el país cafetero, concluye Urrego también han tenido un cambio en la criminalidad, es que han dejado atrás grandes grupos de narcotráfico como los que encabezaba Pablo Escobar, quienes además de traficar drogas, también realizaban acciones con la comunidad, algo que ya no ocurre.

¿Eso quiere decir que esos grupos se han reducido? “No, se han aliado y esa alianza pues ha conllevado a que en cierta manera crezcan para poder tener mayor injerencia territorial y más facilidad para obtener la fuente de financiación”, responde el coronel del Policía Nacional de Colombia.