¿Mala suerte o síntoma de decadencia? Un año de la Generación Dorada en el hospital
De Alexis a Claudio Bravo, de Medel a Aránguiz. Se va 2020 y con ello el fin de un periodo negro para los pesos pesados de la Roja en cuanto a lesiones, que ha valido los reclamos de Antonio Conte a Rudi Völler.
Antonio Conte reabrió la discusión entre clubes y la Roja la semana pasada: “No sé si es un problema de la Selección o del jugador, pero la constante es que Sánchez se lesiona a menudo”, dijo sobre el estado de salud del tocopillano, quien se ha perdido varios partidos del Inter por diversas dolencias.
El Niño Maravilla, eso sí, no ha sido el único jugador de la generación dorada aquejado por las lesiones en un 2020 marcado por los recesos, el coronavirus y apenas un puñado de partidos de selecciones. Claudio Bravo, Charles Aránguiz y Gary Medel han sido los más afectados por los problemas físicos. Nicolás Castillo no se queda atrás, aunque su ausencia es de larga data. ¿Por qué les ocurre? ¿Es realmente un problema de la Selección? ¿Un síntoma de la decadencia o caducidad de ese grupo de jugadores?
“Es un tema muy interesante. Hay un millón de algoritmos y las lesiones son multifactoriales. Es una sumatoria de cosas, partiendo por la edad, que influye, y como segundo tema la pandemia, también influye. En todos lados dejaron de entrenar o bajaron sus cargas de entrenamientos”, señala Rafael Rossi, máster en kinesiología deportiva, kinesiólogo de la Clínica Universidad de los Andes y docente en esa casa de estudios.
En ese sentido, el Pitbull padeció una lesión prepandemia (una en enero en el isquiotibial) y tres postcovid (en julio dolores lumbares, en septiembre una lesión en el semimembranoso derecho y en octubre un desgarro). Todo, claro, mientras entrenaba junto al Bolonia, porque la Roja este año no supo de él justamente por sus problemas físicos.
Rossi, ex kinesiólogo y ex director del Comité Paralímpico de Chile, con quienes fue a los Juegos Paralímpicos de Londres 2012 y los de Invierno de 2014 en Sochi, explica que por el Covid-19 “los procesos de readaptación son más lentos, entonces a la hora de la exigencia aparecen lesiones musculares. Hay que pensar que algunos vienen arrastrando lesiones antiguas. Aránguiz se cortó el tendón de Aquiles, Vidal tiene antecedentes en rodilla, Alexis también ha tenido lesiones importantes, entonces obviamente eso igual influye”.
Bravo ha sido el más complicado este 2020: sufrió diversos problemas musculares entre junio y julio estando aún en el City, luego en septiembre ya en el Betis padeció una distensión de rodilla, en noviembre una distensión en el recto anterior y en diciembre una dolencia en el gemelo. El ex Colo Colo, al igual que Medel, sufrió todo en su club, puesto que cuando estuvo con la Roja volvió a su equipo en España y alcanzó a jugar.
“Si es un desgarro es un evento traumático, respuesta a una situación específica. Puede ocurrir a cualquier edad. Lo mismo en la lesión de rodilla. Hay que saber distinguir entre las lesiones traumáticas y las degenerativas, como la artrosis, que sí tienen que ver con eso”, estableció en La Tercera al respecto el traumatólogo Alejandro Orizola.
El Príncipe Aránguiz también ha tenido un año complejo en ese sentido. El detalle dice que fue baja de partidos en Alemania porque en enero tuvo dolencias musculares, al igual que en octubre y en noviembre padeció de complicaciones en el tendón de Aquiles.
Luego de jugar con la Roja ante Colombia el 3 de octubre, cuatro días después enfrentó al Mainz con el Leverkusen, duelo en el que fue reemplazado en el entretiempo. Desde ahí no ha vuelto a ver acción.
“Lo que hacen los chilenos es muy molesto. Los jugadores se desgastan, ha sido así durante mucho tiempo. No tienen en cuenta a los clubes. Incluso, cuando los jugadores están maltratados, tienen que ir a jugar. Esto es un gran lío, te sientes estafado”, dijo en ese momento Rudi Völler, director deportivo del cuadro germano, sobre el volante.
Y Sánchez, por quien Conte reclamó en alto, tuvo en agosto un problema muscular en el bíceps femoral, en octubre una distensión muscular y luego una contractura en el aductor, y en diciembre una lesión en el muslo izquierdo.
En el caso del formado en Cobreloa, en la búsqueda de culpables se involucró incluso Reinaldo Rueda, quien, de cara a los duelos de noviembre, donde el delantero quedó al margen del primero con Perú por lesión y luego jugó frente a Venezuela.
“Con todo el respeto que se merecen las instituciones europeas y mis colegas europeos, ojalá nos lo cuidaran (a Alexis) mejor que nosotros. Ojalá, así como los respetamos, ellos respetaran a nuestros cuerpos médicos. Ojalá nos hubieran hecho caso cuando llegó Alexis (en octubre) y lo hubieran evaluado y no hecho jugar 45′ y luego 90′. Ojalá lo hubieran cuidado como lo cuidamos nosotros. Nos tenemos que respetar mutuamente. Ya no es la época de la colonia”, dijo el colombiano. La respuesta del Inter no tardó en llegar, calificando sus declaraciones de “inaceptables, ofensivas y ajenas a la realidad”.
Hace poco también se sumó Arturo Vidal, aunque él sufrió una distensión en el muslo estando en el Inter, harto tiempo después de haber jugado con el Equipo de Todos.
Rossi cierra aportando un dato: diversos estudios en ligas como la alemana o la inglesa han concluido que las lesiones aumentaron entre cuatro y cinco veces post receso. “Te das cuenta que a nivel transversal influyó el tema de la pandemia y haber estado tanto tiempo con tan poca carga de entrenamiento”.
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