Minería reclama castigo injusto de la autoridad en crisis ambiental de Quintero

Sociedad Nacional de Minería, Diego Hernández,
Sociedad Nacional de Minería, Diego Hernández,

Según Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), "es injusto echarle la culpa a Codelco Ventanas sin tener mayores antecedentes concretos", alega, y añade que "no podemos pagar siempre todas las cuentas reputacionales ante estos hechos. Hay un límite y creo que ya hemos llegado a este".


"Se termina castigando y culpando a la minería de forma injusta", acusa el presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami), Diego Hernández.

Un momento complejo está viviendo Codelco por la crisis ambiental de Quintero. No solo por la decisión de ayer del Ministerio de Salud de suspender, de manera parcial, las operaciones de la fundición Ventanas, sino también por las acusaciones contra la estatal que ha hecho el superintendente de Medio Ambiente Cristián Franz.

"Codelco es cliente frecuente nuestro. Entonces, en Codelco hay episodios que nos obligan a estar (mirándolos) permanentemente. Es decir, no se puede descartar a priori que no estuviera dentro de los agentes involucrados", fue uno de los dichos que hizo Franz respecto de Codelco esta semana en el Congreso.

Y aunque Codelco hasta ahora ha reaccionado ofreciendo su total colaboración en la emergencia, dentro del sector minero cunde la molestia. El primero en salir a cuestionar abiertamente a  la autoridad es Diego Hernández, presidente de la Sociedad Nacional de Minería (Sonami) quien además fue presidente ejecutivo de Codelco durante el primer gobierno de Sebastián Piñera.

Según Hernández, "es injusto echarle la culpa a Codelco Ventanas sin tener mayores antecedentes concretos", alega, y añade que "no podemos pagar siempre todas las cuentas reputacionales ante estos hechos. Hay un límite y creo que ya hemos llegado a este".

El presidente de la Sonami además indica que van a tomar medidas como gremio, pero que antes es el Ejecutivo el que debe tomarlas para enfrentar la emergencia. Plantea además que "se necesita tener el presupuesto y personal adecuado que no se tiene (…). Y no da la impresión que el presupuesto del próximo año vaya a aumentar para asumir esas nuevas tareas".

Así agrega que "hay bastante inquietud y desconformidad en las mineras con todo este revuelo que ha causado esta situación real, porque se termina castigando y culpando a la minería de forma injusta. No podemos permitir que eso siga sin límites".

"En este momento, están tratando de tomar medidas sin grandes fundamentos técnicas y que van a afectar a muchas empresas que están ahí. Eso ha generado una inquietud legítima en las empresas de ahí", complementa.

En relación a una eventual manipulación política de la situación, Hernández no lo descarta aunque dice que espera que no sea así. "En esto siempre existe ese riesgo. Esperemos que esta vez no sea así, pero estamos viendo algunas cosas que van en esa dirección. Por ejemplo hacer una conexión entre la aprobación de Mina Invierno con Puchuncaví diciendo que Mina Invierno produce carbón, que parte de ese carbón se quema en las centrales térmicas de Puchuncaví. Eso no tiene ninguna lógica", enfatiza.

"Palos de ciego"

Hernández no es el único que apunta sus dardos contra las decisiones de la autoridad. El presidente de la Federación de Trabajadores de Cobre (FTC), Juan Olguín también es crítico, e incluso solicita inhabilitar al Superintendente Franz por sus dichos. "Él no puede como autoridad hacer un prejuicio de esa manera, es irresponsable. Creemos que eso lo deja inhabilitado para cualquier acción futura. Por lo tanto, el gobierno tendrá que tomar medidas respecto a ese tema", indica.

Olguín agrega que, a su juicio, Franz tiene un "claro sesgo" y que no estarán disponibles a seguir siendo el "conejillo de indias" en una situación que no corresponde. Además dice que "no se está dando una discusión de fondo, sino que se está dando discusión de parche. Aquí están dando palos de ciego. Todavía la autoridad no puede detectar, no puede definir cuál es el problema que está en Ventana y tenemos claro que nosotros no somos".

Olguín, quien representa a más de 15 mil trabajadores de Codelco, exige al gobierno una mayor rigurosidad en los procesos que están llevando adelante.  "Los síntomas de la gente no son atribuibles a lo que está generado acá. Nuestras mediciones están siendo fiscalizadas por la autoridad (…). Somos los únicos con medición en línea", añade. Por lo que pide que la autoridad "empareje la cancha a todos por igual".

Finalmente, eleva el tono: "No quiero pensar mal, que haya intereses políticos porque a otras no las están fiscalizando. Pero veamos los directorios de las empresas que están en el sector. Varios han trabajado en el gobierno presente o en la campaña del gobierno presente".

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