¿Que el Presidente aclare? El dilema del oficialismo sobre si Boric debe disipar dudas de si habló o no con Monsalve de la denuncia en su contra

“No, no”. Con esa escueta respuesta, sin profundizar, el martes la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, abrió paso al cuestionamiento sobre si el Presidente Gabriel Boric habló con Manuel Monsalve sobre la denuncia por acoso sexual presentada en su contra, cuando él se desempeñaba como subsecretario del Interior.

Ayer se le preguntó lo mismo a la titular de Interior, Carolina Tohá, y ella optó por responder que “no es necesario que me refiera a ninguna de esas dos preguntas, porque ayer se le plantearon a la ministra vocera y las contestó. Entonces, son temas que están ya contestados”.

A ese mismo libreto se apegó el Presidente este jueves, durante una entrega de viviendas en Colina. “Quiero partir con estas palabras muy brevemente en relación a lo que se ha ventilado durante los últimos días, de una denuncia presentada. Quiero decir que ya se han referido muy claramente la vocera de Gobierno y mi abogado, y hoy día estoy aquí para ocuparnos de lo que realmente les importa a los chilenos y chilenas, que las instituciones hagan su trabajo, que el gobierno gobierne”, dijo Boric al comenzar su discurso.

La negativa del gobierno a aclarar ese punto ha sido cuestionado por la oposición, pero también por algunos sectores del oficialismo. En particular, por el temor a la idea de que la denuncia que recibió Boric pudo haber influido en el trato que tuvo Manuel Monsalve una vez que La Moneda se enteró de los hechos ocurridos en el Hotel Panamericano. Y es que, con esa información sobre la mesa, al hoy exsubsecretario se le permitió ostentar el cargo por dos días más, viajar hasta el Biobío a conversar con su familia y exponer en el Congreso. Además, pudo defender su inocencia en un punto de prensa en La Moneda, el día que fue removido.

Por ejemplo, el senador Pedro Araya (PPD) planteó que si bien la denuncia presentada contra Boric “carece de sustento jurídico y parece más bien una operación política para dañar” su imagen, sugiere que “en atención a la forma en cómo se abordó la situación del caso Monsalve y cómo, por parte del gobierno, se ha abordado esta denuncia contra el Presidente, él tiene que despejar cualquier manto de duda que exista, dado que, producto de las descoordinaciones que existieron para tratar el caso Monsalve se ha instalado todo tipo de teorías conspirativas”.

Y añadió que “lo que procede, a mi juicio, es que el gobierno aclare el punto: si este tema fue tratado con Monsalve o no, a fin de despejar las dudas que se puedan suscitar de la materia, toda vez que fue el propio gobierno el que instaló el caso Monsalve, y ahora esta denuncia como un tema de gobierno, siendo que son temas absolutamente de carácter personal. Al tratarse de responsabilidades penales, no tendría por qué estar involucrado el gobierno en esto”.

Por su parte, el presidente del Partido Radical, Leonardo Cubillos, sugirió que “a pesar de las muestras de transparencia en estos casos (...), conlleva a una serie de especulaciones respecto a lo realmente sucedido en los pasillos de Palacio. Esas conjeturas solo recrudecen especulaciones dañinas que no ayudan a la transparencia y tratamiento que necesitan estos casos. Está claro que estas situaciones lamentablemente perseverarán en el tiempo. Por eso es importante su aclaración lo antes posible, porque sería muy injusto que se recuerde en la historia a nuestro gobierno por estos hechos”.

El diputado Jaime Araya, de la bancada PPD e independientes, es de la idea de que “una vez terminada la investigación que lleva la Fiscalía por esta absurda denuncia, el Presidente debiera despejar todas las dudas”.

Para el parlamentario, “referirse a temas que están siendo actualmente indagados me parece imprudente, ya quedó demostrado con la vocería de la ministra Vallejo, que abrió un nuevo flanco en este tema. Por ahora, el Presidente solo debiera hablar por medio de su abogado. En caso contrario, el problema va a seguir creciendo”.

Para otra parte de la alianza de gobierno, en tanto, la idea de que el Presidente tenga que salir aclarar detalles sobre cómo se ha abordado la denuncia en su contra no genera entusiasmo.

El diputado Matías Ramírez, de la bancada PC, dijo que “resulta irrelevante (si Monsalve supo o no). La denuncia contra el Presidente evidentemente carece de sustento y es el Ministerio Público quien deberá decidir el futuro de la misma. Tratar de vincular dicha denuncia con la investigación penal en contra de Monsalve, en este caso sobre el conocimiento o no de este último, es buscar una polémica artificial”.

“Es profundamente perjudicial para un tratamiento serio mezclar ambos casos. Es preocupante que constantemente la oposición esté buscando sacar réditos de situaciones graves que ya están en manos de la justicia. Es allí donde estarán las respuestas relevantes para la gente. El resto me parece que es utilización de la violencia hacia las mujeres para hacer puntos políticos”, complementó la diputada Catalina Pérez (independiente-Frente Amplio).

En tanto, el expresidente de la Cámara Raúl Soto (PPD) valoró que el Presidente decidiera referirse -de forma breve- al tema hoy, en la pauta que tuvo en Colina. “Evidentemente que en algún momento el Presidente iba a hablar. Me parece bien que el Presidente Boric haya aprendido también la lección respecto del extenso, más allá de lo prudente y necesario, que fue el punto de prensa en el caso Monsalve. Hoy día dio una declaración prudente, breve y donde se limitó a decir que va a hablar a través de su abogado, y a través de las vocerías del gobierno”.