Seguridad perimetral y orden público: los primeros acercamientos entre Interior, Santiago, rectoría y los estudiantes del Instituto Nacional

“Como CEIN, abordamos las violaciones a los DD.HH. a nuestrxs compañerxs por parte de Carabineros. Y quedamos en seguir trabajando este mes. De igual manera, se va a trabajar en otras medidas de seguridad para nuestra comunidad Institutana”.

Eso se leía en una historia de Instagram que el Centro de Estudiantes del Instituto Nacional (CEIN) publicó el pasado viernes luego de una reunión que el representante de los estudiantes, Vicente Webster, sostuvo con la alcaldesa de Santiago, Irací Hassler; la ministra del Interior, Carolina Tohá; el subsecretario del Interior; Manuel Monsalve; la delegada presidencial de la RM, Constanza Martínez; y la rectora del Instituto Nacional (IN), Carolina Vega.

Una junta que habría sido solicitada a la ministra del Interior por parte de la rectora del IN, la que también habría sido patrocinada por el municipio y el director de Educación Municipal (DEM), Rodrigo Roco y que, por lo demás, llega en medio de un pesado clima educacional en el establecimiento, marcado por la llegada de una nueva rectora, un petitorio estudiantil de 15 puntos y una paralización de actividades que provocó la pérdida de más de 20 días de clases y que se vio forzada a la baja por un incendio que afectó las dependencias del establecimiento el pasado 26 de mayo.

Pese a que la instancia abordó un abanico de temas como los hechos de violencia que han afectado a la institución, la labor de las policías y las tomas del recinto escolar, desde la Municipalidad de Santiago afirmaron que la cita sirvió para una coordinación entre las distintas autoridades y así establecer una instancia de trabajo para abordar la seguridad perimetral del IN, buscando asegurar “el resguardo para la comunidad y en especial para las y los estudiantes de ambas jornadas. Esto, considerando el alto flujo de peatones y circunstancias como robos y asaltos, tráfico de vehículos y otros problemas, en especial en calle Arturo Prat y en la llegada hacia el Metro Universidad de Chile”, explicó a La Tercera PM, Rodrigo Roco.

Tal instancia será coordinada por la Delegación Presidencial y se trabajará con foco en ordenar el espacio público del lugar, en coordinación con Carabineros, según sostuvieron desde el DEM.

Otro de los temas tratados en la reunión fue el nuevo protocolo para el actuar de Carabineros y los hechos de violencia que han afectado a la institución. Es más, este era parte de uno de los puntos del petitorio que el alumnado elevó a la rectoría y que fue respondido el 22 de mayo por las autoridades.

En esta línea, el texto del estudiantado establecía la exigencia de otro protocolo para el actuar de la policía, a lo que las autoridades del establecimiento respondieron con que “es necesario recordar que, tal como se menciona en el compendio, la dependencia directa radica en el Ministerio del Interior”.

Consultados al respecto por los contenidos y principales lineamientos de la reunión, desde la cartera sostuvieron que esta “fue una positiva instancia de diálogo con todos los estamentos que forman parte del consejo escolar, incluida la nueva directiva del centro de alumnos. La reunión fue organizada para escuchar sus planteamientos y avanzar en una mejor coordinación con la comunidad y el municipio de Santiago”.

Luego de que el CEIN procediera a bajar la toma indefinidamente producto del fuego que afectó las instalaciones del recinto educacional, este martes el estamento estudiantil comunicó a través de sus redes sociales que parte de los baños que habían sido solicitados dentro de su petitorio habrían sido vandalizados por terceras personas.

“Es inaceptable que trabajo y esfuerzo voluntario por parte de nuestros compañeros sea pasado a llevar de manera imprudente y totalmente fuera de lugar, especialmente cuando el lugar vandalizado corresponde a nuestra lucha estudiantil por condiciones dignas para nuestra comunidad”, se leyó en el comunicado.

Asimismo se informó que en la tarde de este lunes hubo un nuevo amago de incendio en una de las salas ubicadas en el primer nivel -que se encontraba vacía- y que habría sido controlado por un profesor a los pocos segundos.

“Es inaceptable que estudiantes de nuestro colegio atenten contra la infraestructura del liceo (...). Su falta de criterio solo logra que nos hundamos como comunidad y como comunidad activa en la lucha secundaria, opacando el histórico esfuerzo (...)”, cerraron.