Un pastor “terriblemente evangélico”: El elegido de Bolsonaro como sucesor de Moro en el ministerio de Justicia

Cuatro días tardó el Presidente brasileño, Jair Bolsonaro, en nombrar su nuevo ministro de Justicia y Seguridad Pública. Se trata de André de Almeida Mendonça, un abogado y pastor evangélico, quien reemplaza en el cargo a Sérgio Moro. El exjuez de la Operación Lava Jato anunció el viernes su renuncia después de denunciar “interferencia política” por parte del mandatario.

La decisión fue publicada en el Diario Oficial, donde Bolsonaro también anunció el nombramiento de Alexandre Ramagem, un hombre de la confianza de su clan, como nuevo director de la Policía Federal.

Horas después de que se publicara su nombramiento, Mendonça hizo una publicación en las redes sociales en un guiño al mandatario. "Agradezco al presidente Jair Bolsonaro por confiarme la misión de conducir las políticas públicas de Justicia y Seguridad en nuestro país", escribió.

El nuevo ministro Justicia, quien además es pastor de la iglesia presbiteriana, estaba al frente de la oficina de Abogacía General de la Unión (AGU). Nació en 1972 en la ciudad de Santos, en la costa de Sao Paulo, y se graduó en 1993 en Derecho en el Instituto Toledo de Ensino, en Bauru, al interior de Sao Paulo. También obtuvo una maestría sobre Corrupción y Estado de Derecho en la Universidad de Salamanca (España) y un posgrado en derecho público por la Universidad de Brasilia. Es profesor visitante en Salamanca y en la Fundación Getulio Vargas.

Además, estudió teología en la Facultad Teológica Sudamericana, en Londrina, y actúa como pastor en la Iglesia Presbiteriana Esperanza, en Brasilia, de manera no remunerada, según informa el diario O Estado de S. Paulo, que destaca entre sus virtudes el ser "extremadamente leal".

Según el portal UOL, Iglesia Presbiteriana Esperanza adopta una línea más progresista dentro del ambiente evangélico y evita el enfoque de temas político-partidarios en los cultos. En las elecciones de 2018, por ejemplo, la iglesia usó las redes sociales para predicar la tolerancia en una campaña considerada por los pastores como "conflictiva y violenta".

Tras ejercer de abogado de la petrolera estatal Petrobras durante cuatro años, en 2000 Mendonça comenzó a trabajar en la AGU y asumió el cargo de corregidor.

Según el diario Folha de S. Paulo, su nominación contó con el apoyo de la cúpula militar y la articulación del presidente del Supremo Tribunal Federal (STF), José Dias Toffoli. La expectativa ahora es que mejore la relación de Bolsonaro con el Poder Judicial.

La transferencia de Mendonça fortalece la indicación de su nombre para una de las dos vacantes que Bolsonaro tendrá derecho a llenar en el STF. El Presidente ya dijo que considera al ministro, a quien calificó como "terriblemente evangélico", en uno de los puestos. La bancada evangélica habría solicitado al Presidente su nominación en un intento de contar con un representante en el STF.

Pero Mendonça no era la primera opción de Bolsonaro para dirigir la cartera de Justicia. El gobernante quería para ese cargo a Jorge Oliveira, actual titular de la Secretaría General de la Presidencia y hombre de su estrecha confianza, pero prefirió optar por una persona de perfil más técnico, después de las insinuaciones que sobre su gestión hizo el exjuez Moro el día de su renuncia.

Moro anunció el viernes su renuncia después de que Bolsonaro destituyera al entonces director general de la Policía Federal, Maurício Valeixo. Durante el discurso en el que anunció su dimisión, el exjuez cuestionó la interferencia política del mandatario en el nombramiento de cargos técnicos, incluido el del director de la Policía Federal.

El exministro insinuó que esa interferencia en los nombramientos pretendía frenar una serie de investigaciones judiciales que comprometerían a tres de los hijos de Bolsonaro: el diputado federal Eduardo, el senador Flávio y el concejal de Río de Janeiro Carlos.

En una entrevista con UOL en octubre del año pasado, el ahora nuevo ministro de Justicia dijo que "ahora no es el momento" para criminalizar las fake news falsas. Los hijos de Bolsonaro son investigados en relación con el intercambio de noticias falsas contra adversarios políticos del bolsonarismo.

Mendonça no realizó una campaña abierta para Bolsonaro en 2018. Su perfil en las redes sociales reveló más entusiasmo con la elección de Marina Silva, entonces candidata a la presidencia por el partido Red Sustentabilidad (Rede). En 2002, el actual ministro de Justicia publicó un artículo que simpatizaba con la victoria del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (PT) en el periódico Folha de Londrina, cuando era abogado de la Unión en la ciudad.

Mendonça no mencionó el nombre de Lula, pero dijo que el triunfo “llenaba los corazones de las personas con esperanzas” y que las urnas habían revelado “al primer presidente electo del pueblo y por el pueblo”, destacó UOL.