Una fractura radical: la crisis del partido tras la controvertida elección

"A mí nadie ni pública ni privadamente me ha manifestado la intención de salir del partido, así que no puedo hacerme cargo de rumores", adelanta Carlos Maldonado, el electo presidente del Partido Radical en un proceso que está en trámite de impugnación por parte del actual timonel, Ernesto Velasco y que tiene a la colectividad a un paso del quiebre.

Según la Junta Electoral Nacional del PR, Maldonado se impuso como ganador con 3.789 votos ( 54,2) versus los 3.206 sufragios (45,8%) de su contendor. Pero desde el sector de Velasco se ha acusado una serie de irregularidades que incluso han llevado a algunos dirigentes a iniciar contactos para migrar al Partido Socialista. Otra opción, como publicó Reportajes, es conformar otra tienda, lo que habría sido analizado en una reunión realizada el lunes 30 de julio en la tarde en las oficinas del exministro de Defensa José Antonio Gómez.

Osvaldo Correa, secretario general del PR y uno de los asistentes a este encuentro asegura que ha habido muchas reuniones en que se ha abordado el difícil escenario actual y aunque recalca que no quiere "aventurarse", sí admite que el quiebre es "delicado".

"Obviamente que nosotros vamos a esperar soluciones de carácter interno para esta situación compleja y eso tiene que ser atenido en las instancia correspondientes. Si ello no sucede hay que analizar y evaluar lo que ocurrirá", detalla y recalca que hoy está en juego "la unidad del radicalismo".

Correa, precisa que hay situaciones en el Maule, donde los apoderados de Velasco súbitamente no pudieron ser contactados el día de los comicios, pero también hay conflictos en comunas como Viña del Mar "donde había votos en las urnas antes de que se abrieran las mesas".

"Tengo la esperanza de que los canales formales van a actuar y si eso pasa sí o sí se va a mover el escrutinio final. Esto no es una pataleta ni posición de mal perdedor", concluye.