¿Un león a hidrógeno? Peugeot pone en la calle el inédito e-Expert Hydrogen
La marca asegura que la gran ventaja de su nuevo vehículo comercial, más allá de que no emita partículas contaminantes, reside en que recarga hidrógeno en tres minutos para volver a andar más de 400 km.
Peugeot celebra que este lunes salió de su línea de montaje de Rüsselsheim, Alemania, el primer furgón e-Expert Hydrogen, la versión a pila de hidrógeno del conocido Expert, que llega para sumarse al abanico compuesto hoy por variantes con motor a combustión y el eléctrico enchufable. El Peugeot e-Expert Hydrogen -que había sido anunciado oficialmente en marzo- conjuga así lo mejor de dos mundos: por un lado, no emite partículas de CO2 y, por el otro, no requiere necesariamente de largos tiempos muertos entre recargas. La marca de Stellantis asegura que tarda apenas tres minutos en recargar hidrógeno para rodar otros 400 km.
Otro detalle que destacan en la marca francesa, es que el Expert a hidrógeno dispone del mismo volumen de carga de las versiones con propulsor térmico y que, además, al llevar baterías tiene un bajo centro de gravedad, que garantiza su estabilidad, seguridad y agilidad.
Para su funcionamiento, este Expert emplea una pila de combustible que produce la electricidad necesaria, gracias al hidrógeno de sus depósitos. Asimismo, se cuenta con una batería recargable de alta tensión de iones de litio, con una capacidad de 10,5 kWh, que puede cargarse en la red eléctrica y que también alimenta al motor eléctrico durante determinadas fases de la conducción.
El Peugeot e-Expert Hydrogen está disponible en dos largos de carrocería -Standard y Long- con las mismas capacidades de volumen de las variantes diésel y eléctrica (o sea, 6.1 m³). Cargan hasta una tonelada y pueden remolcar el mismo peso. El modelo con pila de hidrógeno circula a una velocidad máxima de 130 km/h.
Hace una semana, la japonesa Toyota también había exhibido un curioso Yaris GR impulsado por la fuerza eléctrica derivada del hidrógeno. En la firma destacaron que este prototipo entregaba las mismas sensaciones emotivas que ha despertado siempre un motor a combustión.
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