Estela de Carlotto: "Cristina nunca nos mintió, pero este hombre que gobierna miente desde que amanece"

En noviembre de 1977, un año después del inicio de la dictadura militar argentina, Laura, una de las hijas de Estela de Carlotto (La Plata, 1930), fue detenida y recluida en un centro clandestino. Tenía 23 años y un embarazo de tres meses. Su pareja fue asesinada un mes después y lo mismo ocurrió con Laura, que murió en agosto de 1978 tras meses de tortura. "¡Asesinos! ¡Ustedes la mataron! ¿Cómo que falleció? ¡Canallas! ¿Dónde está el bebé?", les gritó a los militares cuando le informaron de la muerte de su hija.

A partir de entonces, Estela Carlotto (88) comenzó una búsqueda que 36 años más tarde dio sus frutos, cuando Guido, su nieto, se hizo un examen de ADN y comprobó la verdad. La presidenta de las Abuelas de Plaza de Mayo conoció a su nieto en 2014, pero desde entonces ha continuado su labor de búsqueda de otros bebés y niños secuestrados por el régimen militar. "Hasta ahora hemos recuperado 130, pero calculamos que faltan unos 300. La mayoría tiene más de 40 años", dice a La Tercera al teléfono, desde su casa en La Plata.

Carlotto ha sido por años la cara más visible de las Abuelas y durante el gobierno de los Kirchner tuvo un acercamiento especial con Cristina Fernández. Desde entonces, se ha convertido en una de las pocas personas con acceso directo a la expresidenta. De hecho, estuvo presente para el lanzamiento del libro Sinceramente, a inicios de mayo, y ese mismo mes acompañó a Cristina K a la primera audiencia de un juicio por supuesta corrupción.

Para esta activista argentina de derechos humanos, que recientemente fue invitada por la UTEM a realizar una charla -aunque finalmente no pudo viajar-, no hay medias tintas. "Es el rey de los mentirosos", lanza respecto del Presidente Mauricio Macri, a quien evita mencionar con su nombre o apellido.

Este ha sido un año agitado en Argentina. ¿Qué espera usted que ocurra en las elecciones de octubre?

Esperamos buenos vientos. Tenemos esperanza en el cambio y lo notamos en la calle. Nos dicen que no hay comida, no hay vacunas, malos hospitales, las escuelas no funcionan y hay un desprecio por la educación. Todo esto debe tener un tiempo nuevo. Esperemos que el pensamiento argentino vaya por el bien común de todos y no para el beneficio personal.

Usted ha sido muy cercana a la exmandataria Cristina Fernández. ¿Por qué cree que ella optó por no postular a la Presidencia, dejando ese puesto a Alberto Fernández?

Bueno, eso fue una decisión personal de ella. Es una mujer que tiene carácter y fuerza a pesar de tanta persecución del gobierno y la justicia contra ella, sin que hayan podido comprobar nada. Nosotros la admiramos por lo que fue su gestión de gobierno. Ella fue una mujer de puertas abiertas, de resolver problemas, de darnos respuestas y respetarnos, y por eso le tenemos respeto. La decisión que tomó seguramente ha sido consensuada con sus grupos políticos. Alberto Fernández es una excelente persona y ella quedará en un puesto importante, pero secundario al fin, para colaborar desde su experiencia y su espíritu. Es una magnífica combinación de dos personas con muchas posibilidades de bien para nuestro país.

¿Qué opinión le merece Alberto Fernández, ex jefe de gabinete de los Kirchner? ¿Lo conoce de cerca?

Nosotros no hacemos política partidaria, pero por supuesto que con él hemos tenido muchas charlas y reuniones y nos ha escuchado. Es una persona seria, muy responsable, con un carácter muy propicio para lo que haya que resolver en este período de gobierno nuevo. Habrá una transición tremenda por el estado en que queda el país, con una deuda impagable y destrozado en lo económico, con empresas que cierran diariamente, con un aumento de la pobreza y el desempleo. Pero no va a venir el milagro, sino que simplemente hay que tratar de poner las cosas como estaban antes de este gobierno y volver al bienestar común. Veremos qué pasa, pero todos debemos poner el hombro.

¿Qué diferencia a Mauricio Macri y Cristina Kirchner en términos simbólicos?

Se lo resumo. Cristina nunca nos mintió, siempre nos ayudó, hizo lo que le pedimos. Nunca ni ella ni Néstor nos mintieron; al contrario, nos arroparon. Este hombre que gobierna, miente desde que amanece hasta que anochece, engaña al pueblo. Dice que hay bienestar cuando estamos cada vez peor. Adorna con florcitas en vez de hacer escuelas y hospitales. Una persona que no miente es creíble y la que miente es despreciable.

De todos modos el hecho de que Macri haya ganado en las elecciones de 2015 también refleja una crítica de la sociedad argentina respecto de la gestión de los Kirchner…

Porque él engañó a la gente en la campaña. Es el rey de los mentirosos. Dijo que habría pobreza cero y no ha sido así. Dijo que terminaría el narcotráfico y eso no termina. Dijo que habría alegría para los argentinos y hoy hay tenido tristeza. Todo lo que él prometió no lo hizo.

¿A qué atribuye los casos judiciales contra Cristina Kirchner?

A una persecución política. Lo dicen todos. Porque si a una persona no se le comprueba un delito, hasta no tener las pruebas, pues entonces déjenla en paz. Lo que se quiere es encarcelarla para que no tenga acceso a ningún cargo de trascendencia. Son barbaridades lo que están haciendo. Esperamos que las cosas cambien. Nadie quiere venganza ni rencor, simplemente el argentino tiene derecho a tener comida, techo, salud y educación para sus hijos.

Estela de Carlotto preside a las Abuelas de Plaza de Mayo desde 1989. "Una cosa distinta ha sido encontrar chicos de seis o siete años o adultos de más de 40 años que ya tienen la vida hecha", sostiene. Y agrega un dato: los primeros nietos que encontramos estaban en Chile. En 1979, Anatole y Victoria Julien, de 4 y 1 año, aparecieron abandonados en una plaza. La familia que los adoptó, los Larrabeiti, no sabían que los niños eran hijos de una pareja de uruguayos desaparecidos.

"Ellos se quedaron viviendo con sus padres adoptivos por decisión de la familia biológica y están viviendo en Chile. Los queremos mucho y sabemos que están bien", cuenta. "Hasta ahora hemos encontrado solución a 130 casos. Nosotros calculamos que faltan alrededor de 300 nietos. Hemos comenzado a encontrar chicos cuyos casos los hemos comprobado a través del análisis científico", agrega.

Días atrás, Elisa Carrió propuso una ley para revisar algunos juicios a militares. ¿Qué le parece a usted esa idea?

Bueno, es realmente descabellada, completamente fuera de lo que es la democracia. Pero hay que tener en cuenta de quién provienen esas propuestas insanas y totalmente absurdas. Es una persona que, lamentablemente, ha cambiado de personalidad. Ella era muy seria cuando comenzó su carrera años atrás, pero ahora está permanentemente divulgando comentarios acusatorios que luego no tienen ningún sentido y ahí quedan. Solo queda la mancha para la persona ofendida. Los juicios que estamos haciendo son claros, con la justicia ordinaria. No se han hecho tribunales especiales para juzgar a los genocidas. Hay juicios y ellos tienen sus defensores. Se les dan todas las oportunidades de confesar su situación delictiva. Pero no confiesan ni se arrepienten e incluso muchos han dicho que volverían a hacer lo mismo si fuera necesario. Es decir, son personas peligrosas. Estamos atravesando en este sentido en Argentina una etapa muy riesgosa desde el Estado, porque se le ha dado prisión domiciliaria a estos genocidas y sabemos que no son viejitos inocentes.

Cada caso de los nietos que han encontrado tiene su particularidad. ¿En general, los jóvenes que han conocido a su familia biológica se han quedado con ellos?

Depende de quiénes se quedaron con estos bebés y cómo fueron criados. Hubo adopciones de buena fe, ignorando el origen de los mismos. En su momento, la justicia omitió estos ocultamientos tremendos. Nosotros hemos recuperado chicos de diferentes edades. Una cosa distinta ha sido encontrar chicos de seis o siete años o adultos de más de 40 años que ya tienen la vida hecha. Nosotros tenemos equipos técnicos que nos ayudan a ir a los domicilios cuando hay denuncias. La recepción puede ser grata o ingrata. A veces cierran la puerta en la cara porque no quieren saber nada. Pero nosotros después insistimos porque tenemos la obligación de recurrir a la justicia y esta actúa. Con una pequeña muestra de sangre se puede saber la verdad. Las Abuelas tenemos mucha paciencia.

¿Es posible llegar a la verdad absoluta?

En Argentina tenemos muchas dificultades. El gobierno actual no coopera en lo absoluto. Ellos ponen piedras en el camino. Nosotros no entramos en esa política. Nosotros buscamos memoria y justicia y lo hacemos con el respeto de la sociedad. Estamos viviendo en una democracia frágil, donde hay desaparecidos vivos que tienen que encontrar su verdad y nosotros tenemos la obligación de seguir buscándolos. Nosotras tenemos mucha edad, pero tenemos el relevo y está colaborando muchísimo gente joven y también los nietos recuperados que tienen intención de integrar nuestra dirección.

En enero de 2016, desde el gobierno argentino se puso en duda el número de desaparecidos. ¿Cómo recibió usted aquello?

Eso es una infamia, un agravio inmerecido, porque nosotros nunca mentimos. Nosotros estimamos que son 30 mil o más.

¿Cómo está su relación con Hebe de Bonafini y todo lo que ha pasado con las Madres de Plaza de Mayo luego de denuncias de supuesta corrupción y malos manejos?

Bueno, todo eso está en manos de la justicia. Yo respeto a mis compañeras de lucha, aunque no coincido en absolutamente nada en sus dichos y sus formas, pero está el respeto merecido a una madre que ha sufrido la pérdida de sus hijos y que ha luchado a pesar de las contradicciones que hemos tenido en este camino de casi 42 años.