Foco de críticas a Trump tras corte de financiamiento a la OMS

“Instruyo a mi gobierno a detener el financiamiento mientras se realiza una investigación sobre el papel de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la mala gestión y encubrimiento de la expansión del coronavirus”. De esta manera Donald Trump anunciaba el martes que su país suspendía de manera temporal el aporte económico que entrega al organismo, señalando que deberán “rendir cuentas” por sus “errores”.

Se estima que el aporte de EE.UU. a la OMS se acercó a los US$ 400 millones el año pasado, lo que corresponde al 15% del financiamiento total de la organización. Siendo su país el que más contribuye, Trump señaló que tenía “serias dudas de que la generosidad de EE.UU. se haya utilizado del mejor modo posible”. El aporte de China, en tanto, fue de casi US$ 76 millones entre 2018 y 2019.

Tras semanas de ataques a la OMS por su gestión de la pandemia, las críticas de Trump se materializaron el martes. Aunque se trata de una medida drástica, la decisión se veía venir. Esto, luego de que en enero elogiara a China por la forma en que contuvo el virus.

“El mundo recibió todo tipo de información falsa (…). Si la OMS hubiera hecho su trabajo de enviar expertos médicos a China para calibrar la situación de forma objetiva en terreno y criticar la falta de transparencia de China, el brote se podría haber contenido en el foco con muy pocas muertes”, dijo Trump.

Sin embargo, el propio Trump se ha convertido en foco de críticas por su manejo de la crisis en EE.UU., ya que -con casi 30 mil muertos- es el país con mayor número de fallecidos. Eso sí, este miércoles dijo que ya pasó lo peor de la pandemia.

La comunidad internacional reaccionó de inmediato a la decisión de Trump. Uno de los primeros en responder fue el secretario general de ONU, António Guterres, quien señaló que “no es el momento” para cortar fondos al organismo. “Creo que la Organización Mundial de la Salud debe ser apoyada, ya que es absolutamente fundamental para los esfuerzos del mundo para ganar la guerra contra el Covid-19”, dijo.

El organismo involucrado también contestó, lamentando la decisión de Trump. “La gestión de la OMS en la lucha contra la pandemia del Covid-19 será examinada a su debido tiempo por los Estados miembros y los organismos independientes para garantizar transparencia y responsabilidad”, aseguró el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

En Alemania, el ministro de Asuntos Exteriores, Heiko Maas, destacó la importancia de trabajar en conjunto para combatir la pandemia. “Culpar a otros no ayuda. El virus no conoce fronteras”, señaló.

Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, también criticó la medida: “No hay razón para justificar este movimiento en un momento en que se necesitan sus esfuerzos más que nunca para ayudar a contener y mitigar la pandemia de coronavirus”.

El presidente de la Comisión de la Unión Africana, Moussa Faki Mahamat, calificó la decisión de Trump como “profundamente lamentable”, mientras que la primera ministra de Nueva Zelandia, Jacinda Ardern, advirtió que no estaba de acuerdo con los argumentos del mandatario estadounidense.

China, por su parte, hizo un llamado a Washington a seguir cumpliendo con sus obligaciones con el organismo. “Esta decisión va a reducir la capacidad de la OMS y minar la cooperación internacional contra la epidemia”, dijo el portavoz del ministerio de RR.EE., Zhao Lijian.

La decisión de Trump también generó reacciones en Estados Unidos. La Asociación Médica Americana (AMA), los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y el Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes se opusieron al recorte del financiamiento.

A través de Twitter, Bill Gates celebró la tarea del organismo. “Detener los fondos para la OMS durante una crisis de salud mundial es tan peligroso como parece”, dijo.

Los analistas creen que esta acción es parte de un esfuerzo de la administración de Trump por frenar la creciente influencia global de China, especialmente dentro de organismos internacionales. En este contexto, y según señala The Wall Street Journal, la decisión busca presionar a la OMS para incluir a más funcionarios estadounidenses dentro de la organización.