Merkel y Macron abordan voluntad reformista de la UE

A casi un año de haber asumido la presidencia de Francia con un discurso muy proeuropeo, Emmanuel Macron, podría estar perdiendo a Alemania como uno de sus principales aliados en sus aspiraciones de reformar la Unión Europea (UE).

El mandatario francés se reunirá hoy con Angela Merkel en Berlín, en una cita que promete ser un termómetro para medir la brecha entre ambos líderes, considerando que la canciller alemana ha dado señales de que su voluntad sobre los asuntos europeos ha perdido fuerza en su agenda.

Según la prensa internacional, todo pareciera indicar que el periodo de formación de gobierno más largo en la historia de Alemania, que culminó en febrero, marcó un punto de inflexión en las prioridades de Merkel, obligándola a enfocarse más en el plano interno.

Ayer en una conferencia de prensa acompañada de la premier de Nueva Zelanda, Jacinda Ardern, Merkel afirmó que el encuentro de hoy con Macron será "una pieza más", dentro de la elaboración de una propuesta común para la eurozona. Sin embargo, la canciller germana no se detuvo a dar mayores detalles sobre la reforma ni las propuestas específicas del mandatario galo que incluyen medidas como el establecimiento de un presupuesto común para el bloque, a la que ya se ha mostrado contraria en otras oportunidades.

Una nota publicada esta semana por Le Monde, destaca que "el final de la luna de miel" entre Macron y Merkel no marcará una parada en su deseo común de avanzar en Europa. "El proceso probablemente tomará más tiempo" de cara al Consejo Europeo de junio, señala el artículo.

Fiel a su discurso, Macron insiste en reclamar una "soberanía más fuerte" de la Unión Europea, alejándose de los "egoísmos nacionalistas" y pidiendo tomar las riendas de la responsabilidad, para avanzar con resultados tangibles.

Para la analista de la Brookings Institution, Célia Belin, "Macron sabe que las reformas de la UE son siempre una negociación". Con sus propuestas ha presentado una primera oferta y los alemanes podrían retroceder, "pero Macron también está buscando otros socios europeos para apoyar sus propuestas, como España. Es un juego largo y paciente", dijo Belin a La Tercera.

Considerando lo anterior, Macron no solo deberá convencer a Merkel de sus ánimos reformistas. Figuras como el ministro alemán de Finanzas, Olaf Scholz, han manifestado su cautela sobre la idea de relanzar la UE. "No todas sus propuestas pueden ser llevadas a la práctica", señaló el político del Partido Socialdemócrata (SPD), uno de los socios del gobierno de Merkel.

Finalmente, para el experto en Relaciones Internacionales de La Sorbonne, Diego Ramírez de Arellano, Macron "debería ser bastante prudente con este proyecto que plantea (...) y hacerlo con el conjunto de países europeos y no solo entre Francia y Alemania", explicó a La Tercera.