El montaje ucraniano que "mató" a un periodista ruso para salvarle la vida
El jefe de los servicios de seguridad ucranianos, Vasyl Grytsak, aclaró que la escenificación de la muerte fue una "operación especial", luego de ser objeto de otros dos intentos de asesinato previos.
El periodista ruso crítico con el Kremlin Arkadi Babchenko, cuyo asesinato fue anunciado por las autoridades ucranianas el martes, apareció sorpresivamente en medio de una rueda de prensa en Kiev protagonizada por el jefe de los servicios de seguridad de ese país.
"Aún sigo vivo, se han quedado con las ganas", dijo el periodista, que admitió que cooperó en los últimos dos meses con el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, en sus siglas en ucraniano), en una operación para evitar un atentado de los servicios secretos rusos contra su vida.
"Quiero felicitar a la familia de Arkadi Babchenko y al propio Arkadi Babchenko en su tercer 'nacimiento" dijo el jefe de los servicios de seguridad ucranianos, Vasyl Grytsak, quien aclaró que la escenificación de la muerte del reportero fue una "operación especial" para salvarle la vida. Babchenko fue objeto de otros dos intentos de asesinato previos, según Kiev.
Según Vasili Gritsak, director del SBU, el autor del "asesinato" ha sido detenido y el propio Babchenko se ofreció a participar en la pantomima para lograr neutralizar el atentado.
"El asesinato de Bábchenko fue encargado por los servicios secretos rusos. Contactamos con la gente que tenía esa información, y nos ayudaron a evitar el atentado terrorista. Akradi estaba al tanto y le teníamos controlado. Su familia también lo sabía", explicó Gritsak.
Según los servicios de seguridad ucranianos, "se descubrió un plan para asesinar a Babchenko y se tomó la decisión de organizar una operación especial durante la cual pudimos recoger pruebas irrefutables de la actividad terrorista de los servicios especiales rusos en territorio ucraniano", informaron en Twitter los servicios ucranianos (SBU).
"Pido disculpas a todos, y a mi mujer, por el infierno que tuvo que apoyar, pero no había otra alternativa: agradezco a los servicios ucranianos por haberme salvado la vida", dijo Babchenko.
"La operación especial fue preparada durante dos meses, yo fui informado hace un mes. Trabajaron como locos. El resultado de este trabajo que se transformó en un operativo que llevó a la captura de un hombre", explicó.
Bábchenko, que se refugió en Kiev a principios del año pasado tras recibir amenazas contra él y su familia, dijo estar seguro de que Rusia estaba detrás de los planes para quitarle la vida.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, felicitó al SBU por "la brillante operación para salvaguardar la vida (...) de Arkadi Bábchenko", y prometió proporcionar al periodista guardaespaldas las 24 horas del día para evitar cualquier atentado contra su vida.
"Dudo de que Moscú se calme. He ordenado proporcionar seguridad las 24 horas al día a Arkadi y su familia", escribió el mandatario ucraniano en Facebook.
El SBU decidió revelar la naturaleza de la operación tras detener al presunto organizador, acusado de preparar el asesinato de al menos una treintena de personas en territorio de Ucrania.
Al parecer, el detenido ofreció 30.000 dólares a un conocido suyo -que había combatido del lado de Kiev en el este de Ucrania- por asesinar a Bábchenko, y le prometió mucho más dinero por la ejecución de otros 30 asesinatos.
"El organizador de este crimen habló de la necesidad de eliminar a 30 personas en territorio de Ucrania. Conocemos los apellidos de algunas víctimas en potencia, pero no los voy a nombrar", señaló Gritsak.
La policía ucraniana informó anoche de que Bábchenko había muerto de camino al hospital tras ser tiroteado poco antes en el portal de su domicilio.
El primer ministro de Ucrania, Vladímir Groisman, acusó a Moscú de estar detrás del crimen, al señalar que "la máquina del totalitarismo ruso no le perdonó su honestidad y principios".
Babchenko tuvo que abandonar Rusia a principios de 2017 tras recibir amenazas de muerte y tras varios meses en Praga se instaló en Kiev.
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