Rusia acusa a Ucrania de romper tregua unilateral rechazada por Kiev

El fuego de artillería se pudo escuchar desde la línea del frente en Ucrania el viernes, incluso después del inicio oficial de un alto el fuego unilateral declarado por Moscú y rechazado por Kiev.

El Presidente Vladimir Putin ordenó el alto el fuego de 36 horas a partir del mediodía del viernes para observar la Navidad ortodoxa. Kiev ha dicho que no tiene intención de dejar de luchar, rechazando la supuesta tregua como un truco de Moscú para ganar tiempo para reforzar las tropas que sufrieron grandes pérdidas esta semana.

El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que sus tropas comenzaron a observar el alto el fuego desde el mediodía hora de Moscú “a lo largo de toda la línea de contacto” en el conflicto, pero aseguró que Ucrania siguió bombardeando áreas pobladas y posiciones militares.

Reuters no pudo verificar de inmediato si la intensidad de los combates disminuyó tras el inicio de la tregua. Un testigo en la capital regional ocupada por Rusia, Donetsk, cerca del frente, describió la artillería disparada desde posiciones prorrusas en las afueras de la ciudad después de que la tregua entrara en vigor.

En las horas previas, los cohetes se estrellaron contra un edificio residencial en la ciudad ucraniana de Kramatorsk, cerca de la línea del frente oriental, dañando 14 casas, pero sin víctimas, dijo el alcalde. Los residentes describieron varias explosiones.

“Es malo, muy malo. Necesitamos presionarlos, hacer que se vayan, tal vez ayudarían más sistemas de defensa aérea. Esto sucede a menudo, no solo en ocasiones festivas. Cada dos días”, dijo Oleksnadr, de 36 años, afuera de un supermercado en el momento del ataque.

Un rescatista murió y otros cuatro resultaron heridos después de que las fuerzas rusas bombardearan un departamento de bomberos en la ciudad de Kherson, en el sur de Ucrania, antes de la fecha límite el viernes temprano, dijo el gobernador regional. Reuters no pudo verificar esto de inmediato.

Putin ordenó el alto el fuego de 36 horas en la guerra de 10 meses en un movimiento sorpresivo el jueves, diciendo que se extendería hasta el final de la Navidad ortodoxa rusa el sábado.

Pero el Presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, rechazó el alto el fuego como una estrategia para que Rusia ganara tiempo.

“Ahora quieren usar la Navidad como una cubierta, aunque sea brevemente, para detener los avances de nuestros muchachos... y acercar equipos, municiones y tropas movilizadas a nuestras posiciones”, dijo Zelensky en su discurso de video del jueves por la noche.

Poco después de que se suponía que entraría en vigor el alto el fuego, funcionarios respaldados por Rusia acusaron a Ucrania de bombardear Donetsk con artillería, dijo la agencia de noticias estatal rusa TASS.

Denis Pushilin, el líder instalado por Rusia en Donetsk, dijo el jueves que la orden de Putin solo cubría operaciones ofensivas y que sus fuerzas devolverían el golpe si les disparaban.

Vladimir Saldo, el administrador instalado por Rusia de la región ucraniana de Kherson, describió el alto el fuego como “un gesto de buena voluntad”, pero dijo que la situación en el frente no cambiaría por eso.

A pesar de las advertencias de ataques aéreos que sonaron en varias regiones, los funcionarios ucranianos no informaron ataques aéreos importantes después de la hora de inicio del alto el fuego.

Las batallas no habían disminuido previamente durante la temporada festiva y Rusia montó oleadas de ataques aéreos que golpearon la infraestructura e hirieron a los residentes en Kiev durante el Año Nuevo, generalmente un momento de celebración tanto en Ucrania como en Rusia.

Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero del año pasado, iniciando una guerra que ha matado a decenas de miles de personas y ha desplazado a más de un tercio de los 44 millones de habitantes del país. La guerra ha reducido a escombros las principales ciudades y ha aplastado la economía de Ucrania.

Con armas y apoyo financiero de Estados Unidos y Europa, Ucrania ha hecho retroceder a Rusia de parte de su territorio, pero las batallas continúan en el este y el sur.

La ciudad de Bakhmut, a 20 km al sureste de Kramatorsk, ha sido durante meses el campo de batalla más intenso, todavía en manos ucranianas a pesar de la guerra de trincheras y los meses de embate de las fuerzas rusas que han dejado gran parte en ruinas.

“Le digo a la gente que debemos orar por los muchachos que retienen a Bakhmut. Si se entrega a Bakhmut, Kramatorsk sufrirá mucho”, dijo Yehven, de 32 años, también en el supermercado.

Esta semana, los aliados occidentales de Ucrania finalmente anunciaron envíos de una gran cantidad de vehículos blindados de combate, que Kiev ha estado solicitando durante meses para darle ventaja en las batallas mecanizadas contra los tanques rusos en el frente.

Alemania dijo que entregaría un avanzado sistema de misiles antiaéreos Patriot y alrededor de 40 vehículos de combate de infantería Marder en tres meses. Washington también debe anunciar el viernes Vehículos de Combate Bradley como parte de un nuevo paquete de seguridad de US$ 2.800 millones. Francia también anunció un paquete de vehículos blindados esta semana.

El Estado Mayor militar de Ucrania dijo que sus soldados repelieron los repetidos ataques rusos durante el último día, y que Moscú se centró en tratar de tomar ciudades en Donetsk, incluida Bakhmut.

“El enemigo está concentrando sus principales esfuerzos en los intentos de establecer el control sobre la región de Donetsk” sin éxito, dijo el Estado Mayor en un comunicado, y agregó que tanto Ucrania como Rusia lanzaron múltiples ataques aéreos durante el último día.

El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sugirió que la oferta de alto el fuego de Putin era una señal de desesperación: “Creo que está tratando de encontrar algo de oxígeno”, dijo a los periodistas en la Casa Blanca.

La Iglesia Ortodoxa de Rusia celebra la Navidad el 7 de enero. La principal Iglesia Ortodoxa de Ucrania rechazó la autoridad de Moscú y muchos creyentes ucranianos cambiaron su calendario para celebrar la Navidad el 25 de diciembre como en Occidente.

Zelensky, hablando en ruso en lugar de ucraniano y dirigiéndose a los rusos, dijo que poner fin a la guerra significaba “terminar con la agresión de su país... Y la guerra terminará cuando sus soldados se vayan o los echemos”.