Uso de mascarillas no será obligatorio en Alemania

Tal como ha ocurrido en otros países europeos, el gobierno de Angela Merkel se mostró favorable a relajar las medidas de confinamiento en Alemania. Eso sí, las restricciones se mantendrán hasta el 3 de mayo, luego de una revisión de estas el 30 de abril, y se implementará un plan de flexibilización escalonada. Haciendo gala de sus conocimientos científicos, la canciller explicó que si bien el número de infecciones se ha reducido, el país solo logró “un frágil éxito intermedio” hasta el momento y no tiene mucho espacio de maniobra. Alemania registra 136 mil casos y 4 mil muertos.

El plan contempla la prohibición de reuniones de más de dos personas en público y la obligación de mantener una distancia de 1,5 metros entre ellas, en vigor desde el 23 de marzo. Todo esto seguirá en vigencia después del domingo, cuando inicialmente expirarían.

Los negocios no esenciales, también cerrados desde hace casi cuatro semanas, podrán comenzar a reabrir con medidas de higiene, si tienen un tamaño de hasta 800 metros cuadrados. También lo podrán hacer las salas de exhibición de autos, talleres de bicicletas y librerías, independientemente de su tamaño.

Merkel se refirió también a la recomendación para que las personas utilicen mascarillas en el transporte público y cuando vayan a comprar. Por ahora, su uso no será obligatorio.

En cuanto a los colegios, que han estado cerrados desde mediados de marzo, Merkel dijo que se harán preparativos para que reabran gradualmente a partir del 4 mayo, empezando con los estudiantes mayores.

Por otra parte, los servicios que implican un contacto personal estrecho, como las peluquerías, tendrán permitida la reapertura a partir del 4 de mayo, pero bajo ciertas condiciones, como el uso de equipos de protección personal.

Restaurantes, bares y pubs, por el contrario, permanecerán cerrados. También seguirán prohibidos los actos religiosos de todo tipo. En el caso de los hoteles, seguirán estando disponibles para uso esencial.

La conferencia destacó no tanto por las medidas, sino que por la forma en la que Merkel explicó la situación, entregando una base científica. Muchos recordaron que ella posee un doctorado en química cuántica.

La Mandataria explicó por qué su optimismo sobre aplanar la tasa de infecciones al punto necesario para salir del confinamiento requiere precaución. Con mucha tranquilidad y elocuencia dijo que Alemania tenía una cifra de reproducción de uno, lo que significa que en promedio una persona infecta a una persona. Además, señaló que sin las medidas de confinamiento se podría aumentar a una reproducción de dos o tres, lo que podría colapsar el sistema de salud.