Jefe de Epidemiología del Minsal y alza de contagios por Covid: “No está como para aumentar las restricciones”

Desde hace semanas que los contagios de Covid-19 otra vez van al alza. Para muestra, un botón: el pasado viernes las autoridades sanitarias reportaron 7.467 nuevos casos de coronavirus, la cifra más alta desde el 26 de agosto, es decir, después de 70 días.

Y en ese escenario, el jefe del Departamento de Epidemiología del Ministerio de Salud, Christian García, asegura que por la naturaleza del virus el ascenso “era esperable”, pero al mismo tiempo considera que, por el momento, no es necesario endurecer las medidas restrictivas. Y respecto a la aparición de BQ.1 y BQ1.1, ambas subvariantes de ómicron, explica que “no hay evidencia para decir que son más graves o más complejas, pero sí podrían generar contagio, incluso en personas que ya tuvieron coronavirus”.

A su juicio, ¿a qué se debe el incremento de casos de Covid-19?

Era esperable. El Covid-19, como otros virus, tiene ciertos cambios y eso se va viendo en las formas de transmitirse de una persona a otra, y eso ha significado que existan oleadas de contagio, pues el virus va cambiando y puede contagiar a gente no vacunada o que sí lo está. Lo hemos dicho desde un principio, es esperable que tengamos alzas y bajas de casos, porque es algo que está dentro de la dinámica de este tipo de virus.

¿El fin de algunas restricciones también puede haber influido?

Las alzas se estaban viendo un poco antes de la implementación de la Fase de Apertura, por lo tanto, es difícil atribuirlo a algunas de las nuevas medidas. Tenemos que tener en cuenta que los casos muestran un panorama parcial de lo que está pasando, lo más importante es el impacto sanitario que tiene el coronavirus y eso se refleja mediante las hospitalizaciones y la ocupación de camas UCI, y durante las últimas semanas se han mantenido con la ocupación más baja de todos estos años.

¿Qué preocupaciones hay respecto de las nuevas variantes de ómicron?

Es importante estar muy atentos a lo que pasa en el contexto mundial. Si surgieran nuevas variantes más contagiosas, más graves y que puedan poner en riesgo la atención, cosa que no es el caso del escenario actual, se tiene que actuar en concordancia. Por el momento no se está viendo un impacto importante en nuestro país y tampoco en el mundo. Somos de los países que siguen haciendo vigilancia genómica y estamos atentos a las nuevas variantes.

¿Tienen alguna característica especial?

No hay evidencia para decir que son más graves o más complejas, pero sí podrían generar contagio, incluso en personas que ya tuvieron coronavirus. Y eso es importante, y por eso la llamada es a que las personas se vacunen para estar protegidas.

¿Cuándo se va a ver una baja sostenida en los contagios?

Es difícil proyectar. En general, las proyecciones que han hecho los expertos más importantes del mundo no han sido capaces de proyectar exactamente, porque es un virus que es distinto y que es nuevo, y por lo tanto, muy difícil de proyectar. Eso sí, es esperable que siga el aumento, igual esta semana tenemos un enlentecimiento en el incremento de contagios. Tenemos que estar muy atentos a los casos graves y cómo van las hospitalizaciones, esos puntos son claves para determinar el impacto sanitario que tiene la pandemia.

¿Ven posible retroceder en algunas medidas? Volver a las mascarillas, por ejemplo.

Por el momento, el escenario no nos hace ver cosas distintas a las que hemos estado viendo desde un principio, incluso desde que inició la etapa de Apertura. Evidentemente, todas las medidas se están evaluando de manera permanente y si surgiera una variante más agresiva o más grave, se podrían cambiar las medidas. Por lo que se está viendo en el escenario local y mundial, no está como para retroceder o aumentar las restricciones respecto de lo que tenemos ahora.

¿Cómo ha evolucionado la vacunación después de que se liberaron las restricciones?

La vacuna bivalente partió en los grupos de más riesgo y en el personal de salud. Ha avanzado de manera lenta, pero ya hemos vacunado a alrededor de 180 mil personas, incluyendo personal de salud, personas con algún grado de inmunosupresión. Además, dado al aumento de casos, adelantamos el grupo de personas mayores de 80 años. El llamado es a acelerar la vacunación para que las personas se protejan de la enfermedad y de ómicron, que es una variante mucho más contagiosa.

¿Y el plan “Antígeno en 3 pasos”? ¿Tienen cifras de este autotesteo? ¿La gente está dispuesta y consciente de que el autocontrol es importante?

Ya tenemos un número importante de test vendidos. También tenemos un número importante de personas que se están reportando. Hemos vendido cerca de 30 mil exámenes y se han informado casi ocho mil y la mitad de ellos han sido positivos. Eso es algo importante, porque es fundamental lograr el diagnóstico oportuno y rápido para cortar la cadena de trasmisión.

Cuando la ministra lanzó el cambio a la Fase de Apertura, habló de “querer hacer un cambio cultural”, especialmente por el uso de la mascarilla. ¿Cómo ve eso?

Las mascarillas siempre se han mantenido como una recomendación importante, nunca se han ido y es una medida muy importante de protección contra el Covid-19, pero también contra otros virus. En los lugares donde tenemos aglomeración es importante mantener su uso. Algo que es parte de este cambio cultural que queremos es que las personas si tienen síntomas, utilicen las mascarillas, porque no solo protege a las personas, sino que está demostrando de manera clara que está protegiendo al resto.

Hay otros virus respiratorios circulando. ¿Cuáles son los que están afectando más el escenario epidemiológico?

Tuvimos circulación de virus influenza A, que tuvo un aumento importante en el invierno. En primavera también tenemos alza, sobre todo después de ingresar a los colegios. Es algo habitual de primavera y ahora estamos viendo algo parecido y que es principalmente influenza A, pero también circulan otros virus, como parainfluenza o adenovirus. Las medidas de protección son muy similares a las del Covid-19, como la vacunación y el lavado de manos.

Hasta el 27 de octubre había 1.175 casos de viruela del mono y su mayor concentración era en la Región Metropolitana (84,6%). ¿Cuál es el panorama?

Lo que hemos visto es que nosotros vamos siguiendo el panorama del resto de los países, donde se vio un alza en los primeros meses, pero ya llevamos varias semanas al descenso y de manera importante. Esto es gracias a las condiciones que tiene la enfermedad, porque el contagio no es como el Covid-19, pues para contagiarse de viruela se necesita una exposición cercana. Esperamos mantener la alerta y estamos vacunando a las personas que lo requieran.