Esta mañana, el Presidente Sebastián Piñera recibió al ministro de Educación, Raúl Figueroa, y a representantes de la sociedad civil para abordar la situación de los establecimientos escolares en medio de la pandemia del Covid-19.

En la cita -que se desarrolló en el Palacio de La Moneda- estuvieron presentes la subsecretaria de Educación Parvularia, María Jesús Honorato, la presidenta de la agrupación “Con mis hijos no te metas”, Ingrid Bohn, el presidente de Asociación de Colegios Particulares Subvencionados V Región y Vocero Movimiento Regreso a Clases, Giordi González, la representante de la Unesco, Claudia Uribe, entre otras agrupaciones de apoderados.

Tras el encuentro, el ministro Figueroa expresó que “hemos tenido una muy fructífera reunión entre diversas agrupaciones de apoderados para conversar sobre lo trascendente que es enfrentar adecuadamente el desafío de evitar al máximo que la pandemia afecte el desarrollo tanto emocional como de aprendizaje de nuestros niños y jóvenes”.

“Son diversas agrupaciones que representan distintas realidades tanto desde el punto de vista territorial como de mayor o menor vulnerabilidad de los establecimientos, pero que en términos generales confluyen todas en el mismo objetivo de cómo somos capaces de generar las mejores condiciones para que los establecimientos educacionales estén a disposición de sus niños y jóvenes y que los padres puedan libremente decidir cómo seguir adelante con el proceso educativo de sus hijos en este contexto de pandemia”, dijo.

En la ocasión, Bohn manifestó que “todos hemos llegado a la conclusión de la necesidad imperiosa de poder dar la oportunidad de que nuestros hijos puedan volver a clases presenciales. Hoy necesitamos que las escuelas estén abiertas”.

Además, agregó que “el Presidente Piñera nos ha dicho, y lo valoramos, que somos los padres los que vamos a decidir si nuestros hijos vuelven a clases, pero necesitamos que el Colegio de Profesores, por ejemplo, no decida por nosotros. Somos nosotros los que conocemos a nuestros hijos y sabemos sus necesidades. Agradecemos el enorme sacrificio de los profesores, pero las clases presenciales son irremplazables”.

En tanto, Lucía Buttazzoni del movimiento “Escuelas Abiertas” señaló que “hoy solicitamos al Presidente de la República que exigiera al Ministerio de Salud una comunicación más efectiva y poderosa sobre los reales riesgos de ir o no a clases. No podemos dejar que esto quede al arbitrio de autoridades que no tienen el conocimiento sanitario como son los alcaldes o el Colegio de Profesores u otros que puedan incidir. Es el Ministerio de Salud el que debe comunicar efectivamente que los colegios, las escuelas y jardines son lugares seguros donde mínimamente se producen contagios”.

“Tenemos que socializar la confianza con una voz firme que venga de la autoridad sanitaria”, añadió.

La semana pasada, el Colegio Médico dio a conocer su estrategia “Covid Cero”, que tiene como objetivo crear un “cortocircuito epidémico” para frenar el alza en los contagios de coronavirus. Como parte de sus propuestas, el gremio planteó que en una primera etapa comiencen las actividades en jardines infantiles y en la educación básica de forma voluntaria y cumpliendo con los protocolos. En una segunda etapa, se considera el retorno presencial y voluntario en la educación media y universitaria.

Tras esto, sostuvieron una reunión vía Zoom con el Colegio de Profesores para abordar la propuesta. En un punto de prensa posterior, el presidente del Magisterio, Carlos Díaz, expresó que “nos parece que en fase 1 no existe ninguna posibilidad de volver a clases presenciales si que ello signifique poner en riesgo la vida y la salud de las comunidades”.

Así, sostuvo que lo que propone el gremio es que el retorno presencial se lleve a cabo de fase 4 en adelante: “eso es lo que hemos manifestado y es lo que seguimos sosteniendo”.

“La realidad nos da absolutamente la razón. Hoy tenemos una crisis hospitalaria enorme en el país y eso pone la condición aún más difícil. Cualquier problema que se genere hoy, sabemos que trae un riesgo de vida real, efectivo, directo e inmediato porque incluso no tenemos las camas disponibles en muchos lugares”, indicó.